La continuidad de Pellegrini y los contactos de Mourinho

El debate se instauró en el banquillo del Real Madrid al poco de iniciarse la temporada. Algunas decisiones como la de respaldar a Robben o Sneijder o sentar a Crisitano Ronaldo en el segundo partido de Liga, no gustó en la zona noble del Bernabéu.

 

Ya metidos en la discusión sobre el futuro de Manuel Pellegrini apareció el Alcorcón, para después ser el Olympique de Lyon el que dejó al chileno al borde del abismo. La positiva respuesta del equipo, la lucha con el Barcelona por la Liga, las ganas de los aficionados de tener una estabilidad que ya ni recuerdan y el apoyo de poderosos grupos de opinión dentro de la entidad madridista, pueden conseguir que la situación se voltee por completo y finalmente Pellegrini continúe siendo el dueño del vestuario madridista la próxima temporada.

 

Es tal la metamorfosis, que en los últimos días, fuentes autorizadas del Real Madrid han confesado a El Confidencial que: "Vamos a ganar la Liga y Pellegrini continuará siendo el entrenador del Real Madrid la próxima temporada y cumplirá su contrato". Eso sí, esta afirmación se hizo tras la semifinal del Barça en Milán, por lo que la euforia blanca estaba disparada.

 

Lo cierto es que la decisión definitiva llegará el 17 de mayo, un día después de que la Liga eche el telón. A día de hoy, a Pellegrini se le mira con mejores ojos. Los directivos madridistas reconocen que no todo ha sido culpa del chileno. Creen que ha habido errores a la hora de confeccionar la plantilla y que alguno de  los que iban a ser jugadores clave, han dimitido antes de tiempo.

 

La corriente de la continuidad está ganando enteros. Jorge Valdano y José Ángel Sánchez, principales ejecutivos del club, optan por la continuidad, por reforzar el proyecto iniciado hace un año, antes que iniciar un nuevo proyecto. Los directivos, por contra, apuestan por el cambio. Florentino Pérez se mantiene expectante y valora todas las opciones. Sabe que desde Boskov ningún entrenador ha continuado en el banquillo sin ganar título alguno, pero tampoco quiere repetir errores del pasado cuando Heynckes se tuvo que marchar después de ganar la 'Champions' o Del Bosque tras conquistar la Liga.

 

Mourinho ya se ofrece al Madrid

 

En esta situación, alguno de los posibles candidatos ya ha comenzado a mover ficha. Estamos hablando de José Mourinho o mejor dicho de Jorge Mendes, agente del técnico del Inter y de Cristiano Ronaldo. Mendes es un auténtico artista en esto de crear corrientes de opinión, manejando a su antojo algún que otro periódico. Vende muy bien la mercancía y más si al lado está Cristiano Ronaldo como perfecto anzuelo. Ya se sabe, me vendes a Mourinho y a cambio tienes más llegada al internacional luso. Así de sencillo.

 

El mánager portugués ha conseguido que algunos vean a Mourinho como único capaz de enderezar la nave madridista. No importa el precio ni el peaje que se tenga que pagar por su llegada. El montante de la operación ya lo dijimos días atrás: 21 millones de euros, 8 de la cláusula que le libera del contrato con el Inter y los otros 13 por lo que cobra en el equipo italiano.

 

Aún así, Mendes ha conseguido que se hable de la llegada de Mourinho al Real Madrid como el que va a comprar una barra de pan. Lo que tampoco se puede negar es que Mourinho ha gustado, agrada y será superlativo en caso de que el Inter evite la presencia del Barcelona en la final de la Champions, pero como dicen los que mandan en la entidad madridista: "Es una falta de respeto hacia Pellegrini. El Real Madrid tiene entrenador y a mucha gente se le olvida".

 

El otro gran candidato y favorito desde el principio llegado el caso de que se cese a Pellegrini es Rafa Benítez, pero tanto el entrenador del Liverpool como su agente, Manuel García Quilón, se están mostrando elegantes al máximo y respetan el trabajo del chileno.

 

La delicada situación económica del Liverpool ayuda a pensar a que todo será más sencillo, ya que el técnico no dirá que no si el Real Madrid le presenta una oferta. De todas formas, a día de hoy, apuesten por la continuidad de Pellegrini. ¿Se imaginan lo que sería echar a un entrenador con 98 puntos logrados en el campeonato de Liga? Florentino Pérez, tampoco se lo imagina.