Özil señalado por su mal estado físico y su vida desordenada

Mesut Özil asombró durante el Mundial de Sudáfrica. Se convirtió en la referencia de la selección alemana, algo que continuó haciendo con la camiseta del Real Madrid. Su visión de juego, la capacidad de hacer jugar y jugar por igual, le llevaron a ocupar un puesto entre los elegidos, tanto de la afición, como de los dirigentes, como de la Prensa, que le llevó a encumbrar de tal manera que algunos le colocaron a la altura de los grandes jugadores de la historia madridista. Se hablaba del alemán como del nuevo Zidane, algo que no sucede un año más tarde. Es más, ahora se señala al centrocampista por su flojo rendimiento y se habla de su vida desordenada como uno de los motivos de su cada día menos aportación al juego ofensivo del equipo blanco.

Özil está bajo sospecha. El alemán nunca ha destacado por su físico, pero sus ausencias durante los partidos cada vez son más constantes. Ya durante la pasada temporada, José Mourinho siempre acudía a él para hacer uno de los tres cambios, circunstancia que se está repitiendo durante la presente campaña. Özil sufre y no aguanta el ritmo y las obligaciones que le impone el técnico portugués, algo que le pasa factura en su claridad ofensiva. El asunto ha llamado la atención en la zona noble del Bernabéu, que ya han dado un toque al alemán ante sus cada día más breves apariciones durante los partidos. El técnico se ha comprometido a recuperarle, algo que todavía no ha conseguido. 

La web 'Soymadridista' apuntó el pasado mes de septiembre que ya existía preocupación por el asunto. Pues bien, esta se ha multiplicado y ahora mismo hay muchas dudas sobre una posible solución al tema. La comida de Navidad del club blanco sirvió para confirmar un rumor que ya se ha convertido en realidad. 

La comparación con Sneijder es lógica. El holandés asombró a su llegada a España, pero su rendimiento fue descendiendo en proporción a sus salidas nocturnas, circunstancia que le terminó costando su puesto en el Real Madrid. En el Inter le esperaba Mourinho, que con su especial librillo a la hora de motivar a los jugadores, consiguió que el talento del centrocampista volviera a aparecer para llevar al equipo interista a la conquista de la Champions, precisamente, en el Bernabéu ante el Bayern. El reto que se ha marcado el entrenador portugués es repetir lo hecho con Sneijder de aquí al término de la temporada. Florentino Pérez ha recogido el guante.