Simeone convierte al Atlético de Madrid en el 'Séptimo de Caballería'

Afrontaba el Atlético de nuevo el ‘virus FIFA’ y volvió a solventarlo con una seguridad poderosa. No existen dudas ya de que este equipo tiene molde de conjunto grande. Sin mayor pensamiento que el partido inmediato sigue sacando de pista a sus rivales por intensidad, por seguridad y por confianza. Todo el mundo acepta su rol en beneficio del grupo, al mismo tiempo que ambiciona crecer en su papel, en esa competencia interna tan del gusto de Simeone. Hombres como Raúl García o Tiago, que partían en este inicio de temporada como suplentes, siguen aprovechando su papel cada vez que tienen la oportunidad. También se ha subido al carro Alderweireld, llegado en los últimos coletazos del mercado de verano.

Pero Simeone sigue sin echar las campanas al vuelo. Eltécnico argentino considera que el Atlético continúa sin ser un aspirante a hacerse con la Liga, a pesar de su contundente victoria ante el Getafe:"Sigo convencido de que la Liga es aburrida. Hay pocas posibilidades para todos los equipos que no sean Madrid o Barcelona. El trabajo de los jugadores sigue siendo enorme y veremos más adelante.Me agarro en lo que pasó en la última década. No nos comparamos. Hoy, la realidad es que el Getafe se quedó con uno menos pronto y pudimos ser contundentes ante un rival con uno menos. No nos hace creer más de lo que somos", aseguró el argentino.

En un partido de línea recta, definió el Atlético sin dilación gracias a la varita de sus dos estilistas. Volvía Arda Turan a un once tras su prolongada ausencia para formar el mediocampo ideal de Simeone a falta de Mario Suárez, bien suplido por Tiago. En las botas de Koke y Arda se decidió el partido. Un córner botado por Koke en el minuto 25, todavía sin encontrar el encuentro un guión claro, fue mandado a la red por Raúl García, poderoso como pocos cuando vuela el balón.

Repetiría en la segunda parte para poner el 4-0, ya con el Getafe sacado de pista, en otro remate exquisito. Junto a los dos goles sumaría un balón al poste. Suplía esta vez a Diego Costa y no bajó enteros el equipo rojiblanco, que sigue explotando cada veta que divisa en el partido.

El navarro, como muchos otros, es uno de los jugadores que simboliza la gran evolución del equipo rojiblanco desde la llegada de Diego Simeone y su equipo a la entidad. Tras volver a Osasuna en calidad de cedido, Simeone le encontró acomodo como volante, alejándole del mediocentro, posición en la que naufragó en el Atlético y que le valió sonoras pitadas en el Calderón, que ahora le adora. Es el símbolo de los nuevos tiempos que suenan en el Manzanares, con una fe que no tiene techo.

Resulta revelador el buen trato que partido a partido le da al balón el Atlético, señal que ejemplifica el crecimiento del equipo a través del juego. Dominado con obsesión febril la ocupación de los espacios, ya no rehúye el protagonismo del encuentro. Se sabe equipo grande y asume su condición como tal. Como en la primera parte, olió la sangre nada más empezar la segunda y ahí estaba Villa para volver a renacer. Necesita de goles el asturiano, con heridas aún por cicatrizar de su tortuoso último año en Barcelona.

Simeone, que antes de entrenador fue futbolista, sabe de la necesidad de tener ilusionado al Guaje para el beneficio del equipo. Le mima y le cuida para sacar su mejor versión, menos explosiva que antes pero igual de eficaz. Conoce el oficio de ariete y así encontró el gol, el tercero de la noche y que mandaba a la lona al Getafe, con un hombre menos desde el minuto 41 por expulsión de Valera.

No tuvo más historia el encuentro, que se dedicó a rendir homenaje a los suyos. Así despidió con una sonora ovación a Raúl García, protagonista de la noche con dos goles y una actuación excelsa como segundo punta, posición en la que siempre destacó. 5 goles lleva ya el navarro en el campeonato de Liga. En su lugar entró Diego Costa, que dejó para la parroquia una chilena, reforzando la fe de una afición entusiasmada con su equipo. No quiso Villa perder comba y puso el sexto para cerrar el encuentro. De nuevo como punto final de la jugada.

También se sumó a la fiesta Adrián, al que en el cuerpo técnico le tienen una fe ciega.Nadie habla de títulos en el Calderón, fiel a la filosofía del partido a partido. “Ganar trae ganar”, suele afirmar Simeone. Y en esas sigue el Atlético, subido a una rueda ganadora que no atisba fin.

Ficha técnica:

7 - Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Alderweireld, Filipe Luis; Arda Turan, Tiago, Gabi (Oliver, m. 70), Koke (Adrián, m. 65); Raúl García (Diego Costa, m. 62) y Villa.

0 - Getafe: Moyá; Valera, Lopo, Alexis, Roberto Lago; Borja (Arroyo, m. 46), Michel (Mosquera, m. 60); Pedro León, Diego Castro, Lafita; y Adrián Colunga (Ciprian, m. 69).

Goles: 1-0, m. 26: Raúl García cabecea un saque de esquina de Koke. 2-0, m. 37: Lopo, en propia puerta, tras un centro al área. 3-0, m. 49: Villa culmina un centro desde la banda derecha de Juanfran. 4-0, m. 51: Raúl García cabecea un envío aéreo a la espalda de la defensa de Tiago. 5-0, m. 69: Diego Costa, con un espectacular chilena. 6-0, m. 78: Villa remata en el segundo palo un centro de Adrián. 7-0, m. 90: Adrián, con un tiro raso tras una serie de rechaces en el área.

Árbitro: Clos Gómez (C. Aragonés). Expulsó por doble amarilla a Valera, del Getafe (m. 34 y 42). Amonestó a los locales Raúl García (m. 14) y Arda Turan (m. 35) y a los visitantes Borja (m. 18) y Michel (m. 20).

Incidencias: partido correspondiente a la decimocuarta jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 30.000 espectadores.