El día negro de Morata en el debut con el Atlético por la polémica del VAR

En el día que no podía fallar el Atlético de Madrid se montó un nuevo lío con el videoarbitraje. La derrota contra el Betis (1-0) tendrá recorrido y dará que hablar por una acción para la polémica. Una internada en el área de Morata fue interceptada por Feddal. El defensa del Betis se lanzó al suelo y, viendo las imágenes repetidas, no queda claro dónde está el contacto. Para el árbitro catalán –David Medié Jiménez– no hubo dudas. Feddal toca la pelota antes de que Morata caiga al césped. En la sala del VAR corroboraron la decisión del árbitro del campo y no hubo revisión en el monitor. Las protestas de los jugadores del Atleti fueron constantes por entender que hubo derribo y no hacer uso de la revisión. A Simeone también se le vio enfadado en la zona de banquillo.

En el Atlético se sienten perjudicados con la decisión arbitral y la utilización del VAR. Se pasó de un posible 0-1 a un 1-0. Inmediatamente después llegó la jugada del penalti –en esta ocasión claro– de Filipe Luis por tocar el balón con la mano en un salto. Un error del lateral brasileño. El penalti lo aprovechó Canales para marcar el tanto de la victoria. En el Atleti desaprovecharon la oportunidad de acercarse más al Barcelona después del pinchazo de los azulgranas el día anterior contra el Valencia en el Camp Nou.

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D. O.

El protagonismo negativo va creciendo en cuanto a la utilización se refiere del VAR y las dudas que genera el criterio de cuándo se debe recurrir al monitor para la revisión. La acción para la polémica de Morata se asemeja a la queja del Real Madrid en la jugada de Vinicius contra la Real Sociedad cuando el brasileño cayó al suelo en la salida del portero Gero Rulli. La reacción del club banco fue una llamada de Florentino Pérez al presidente de la Federación, Luis Rubiales, para mostrar su malestar o disconformidad por no haberse revisado la jugada en el monitor.

La maravilla de Oblak

Ahora es el Atlético de Madrid el que se siente perjudicado en un partido trascendental para la pelea por el campeonato de Liga. El ruido se hace mayor cuando el que se siente dañado es uno de los ‘grandes’. Es el caso del equipo rojiblanco y antes del Real Madrid. Vamos a escuchar todo tipo de reacciones de disconformidad y debates sobre el uso del VAR. Una herramienta que está en su primera temporada y que falla o acierta por el uso de los propios árbitros. Los que están a pie de campo y los que les toca en la sala de la Federación en Las Rozas. Se cuestiona si tienen que ser los propios árbitros los que estén en la sala del VAR cuando no están designados para los partidos o deberían ser otras personas: ex colegiados u otro tipo de profesionales del fútbol. Esta polémica se une a la jugada del gol de Luis Suárez contra el Leganés en el Camp Nou, en la que no se revisó si el uruguayo golpeó el brazo del portero Cuéllar.

El enfado en el Atlético de Madrid es importante en un día que Simeone fue más valiente que nunca. Puso en el once a Correa, Lemar, Griezmann y Morata. Un equipo ofensivo que salió con la ambición y la determinación de ganar para ponerse a tres puntos del Barcelona. Era el día del bautismo de Morata como jugador del Atlético de Madrid. Fue de menos a más. El partido empezó con un paradón de Oblak en un cabezazo de Feddal. Una mano prodigiosa. Maravillosa. A Morata se le notó la falta de acoplamiento con los nuevos compañeros. Trabajó en la presión y lanzó carreras al espacio. En las segunda parte llegó la acción del penalti no señalado. Se rehizo el Atleti del gol de Canales con un disparo de Griezmann al poste. Simeone sacó más pólvora. Metió en los cambios a Kalinic y Vitolo. Pero fue un día negro en el debut de Morata. El Atleti no perdía desde el 1 de septiembre contra el Celta en Vigo.