Xavi dispara contra los árbitros, se queda sin excusas y el Barcelona regala otro partido

El Barcelona volvió a dejarse dos puntos de oro en Vallecas (1-1). La sangría defensiva del equipo de Xavi Hernández siguió en una primera parte tétrica donde los de Francisco dominaron y dieron con el gol antes que los azulgranas, obnubilados por la infernal presión rayista y la poca capacidad de respuesta colectiva e individual. Como ya viene siendo habitual, el Barça saltó aturdido al terreno de juego y lo pagó caro. Una tendencia que se repite en esta temporada y que Xavi no ha sabido solucionar.

"Creo que ha habido dos partes; en la primera hemos dominado al Rayo Vallecano, pero no hemos ido a por el partido. Regalamos el gol. En la segunda parte hemos hecho lo que queríamos: dominar y generar ocasiones", confesó Xavi en DAZN. El técnico azulgrana también criticaría la mentalidad de su equipo, un melón que abrió Ilkay Gündogan tras la derrota en El Clásico y que persigue al Barça hasta ahora.

"Si queremos ganar títulos hay que cambiar la mentalidad. Tenemos que ir a por el partido desde el primer minuto. El hecho de haber ganado el año pasado quizá, de alguna manera, inconscientemente... bajas esa mentalidad. Tenemos que dar más para ganar títulos", reveló preocupado el entrenador catalán.

La crítica entronca con un técnico que no logra inyectar tensión en sus jugadores y a los que ha puesto en la diana por falta de intensidad. "Estamos regalando muchísimas cosas. Hemos perdido puntos en Mallorca, en Granada... ahora llevaríamos muchos más. Esto genera una inseguridad en los jugadores que no es buena", afirmó por entonces el técnico, muy preocupado, tras la victoria por los pelos contra el Deportivo Alavés en Montjuic, donde el público silbó a los jugadores al descanso.

En el día en que Frenkie de Jong volvió a jugar con Pedri y la mayoría de jugadores estaban disponibles, el Barça volvió a decepcionar en una primera deficiente parcialmente maquillada en la segunda. El equipo no tuvo fluidez con la pelota, le faltó estar mejor colocado posicionalmente en el campo, se desorganizó con las pérdidas de balón, estuvo descolocado en la salida de balón, no tuvo un buen despliegue defensivo y encajó antes de golpear.

Xavi ve un fantasma

El técnico azulgrana, sabedor de que la presión sobre su figura aumenta y Rafa Márquez gana enteros en el filial del Barça, no perdería la ocasión de criticar la tarea arbitral en DAZN: "El linier me ha dicho que Óscar Valentín condiciona la posición de Balde y luego lo han dado. Son situaciones que nos salen cruz. Ha habido también un penalti a Raphinha".

Una respuesta que repetiría en rueda de prensa: "Es penalti claro a Raphinha. Me lo dice todo el mundo, he visto la imagen... es penalti claro. Nos está saliendo cruz en las decisiones polémicas. No es una excusa. Hemos empatado porque no hemos estado bien en la primera parte y hemos empatado en la segunda".

Las quejas de Xavi desataron el enfado de Presa, presidente del Rayo: "Me parece indecente que Xavi pida fuera de juego en el primer gol de Unai López. Es increíble que se pida fuera de juego en esa acción. Eso es intentar engañar al árbitro. Que lo diga alguien que no ha jugado nunca al fútbol en su vida, pero él...".

La defensa sigue fallando

"Debemos mejorar en defensa. El año pasado, nos dio mucha solidez. No hemos estado mal, pero son dos errores puntuales que no deben ocurrir. Por esos errores, perdemos dos puntos". Son palabras de Xavi tras el empate contra el Mallorca. La situación no ha mejorado en un equipo incapaz de dominar las áreas y ser contundente en las zonas más importantes del campo.

En un equipo que cuenta todas sus victorias en LaLiga por la mínima tras el 5-0 al Real Betis​, la defensa debería ser crucial para amortizar al máximo los goles a favor anotados. Sin embargo, los azulgranas solo han logrado mantener el cero en su portería en 6 de 14 partidos.

En el curso 2022/2023, el Barça logró 26 porterías a cero y únicamente encajó 20 tantos en todo el campeonato. Esta temporada ya lleva 14 goles en contra en 14 partidos, lo que demuestra una clara involución en la solidez defensiva. La fragilidad en área propia y la descoordinación en la presión atormentan a Xavi y le eliminan uno de sus principales pilares ganadores.