Isaac Romero aleja al Sevilla del descenso y alarga las dudas del Atlético de Madrid (1-0)

El Sevilla venció al Atlético de Madrid (1-0) gracias al gol de Isaac Romero, el canterano que se ha convertido en el ídolo de la afición por su buen rendimiento desde que debutó en enero. Los colchoneros buscaron con vehemencia el empate, pero no lo consiguieron. El triunfo deja a los sevillistas a seis puntos del descenso.

Fue un partido de los que antaño decidían las posiciones de arriba. Sin embargo, la realidad de ambos clubes ha cambiado. Mientras que los colchoneros continúan en el mismo peldaño de la escalera desde que llegó Simeone, el rendimiento del Sevilla ha decrecido mucho en los dos últimos años. Es una anomalía ver a este equipo pelear por el descenso.

La victoria del Madrid ante el Girona (4-0) ha dejado la Liga prácticamente sentenciada, tal vez por ello el inicio del Atleti no fue el esperado. En realidad, los colchoneros sólo necesitan certificar su presencia en la Champions la próxima temporada. El Athletic de Bilbao atraviesa un buen momento y tiene intención de luchar por esa posición.

La derrota del Cádiz ante el Betis (0-2) convirtió este partido en una oportunidad de oro para el Sevilla. Los hispalenses eran conscientes de que, si ganaban, se alejarían del descenso lo suficiente para, al menos, dormir en las próximas semanas. La batalla por la permanencia está al rojo vivo.

El momento de Isaac

El Sevilla salió con muchísima más intensidad en el partido, consciente de que la situación le era favorable ante un rival complicado. Sin embargo, todo es más sencillo si tienes a un delantero como Isaac Romero en el equipo. La irrupción del canterano es lo mejor que le ha pasado al Sevilla, huérfano de gol en la primera parte de la temporada.

Isaac fue el autor del gol sevillista, en una jugada a balón parado. El delantero le ganó el remate de cabeza a Koke en el segundo balo y decretó el estado de ilusión en Nervión. Sus 5 goles en 7 partidos con el Sevilla así lo avalan. Poco después, envió un balón al palo. Fue un incordio constante para la defensa colchonera.

El Atleti estuvo lejos de la portería sevillista, más allá de una ocasión clara de Morata, en esa primera mitad. El delantero de la Selección, además, se marchó lesionado y acabó llorando en el banquillo. Quizá sea consciente de la gravedad de la lesión y de que podría perderse la Eurocopa. Luis de la Fuente, por cierto, se encontraba en el palco del Sánchez-Pizjuán.

Las dificultades del Atleti

Los colchoneros apretaron el acelerador en la segunda mitad, pero acusaron la falta de pólvora. Aunque Depay tuvo en sus botas en el empate, el lanzamiento se marchó desviado. La defensa sevillista era una verbena y el equipo confiaba en que otro chispazo de Isaac fuera suficiente para certificar la victoria.

El triunfo da una alegría más que necesaria para los sevillistas, mientras que es una excusa más para que el Atleti se centre en la Copa del Rey y en la Champions. Quedan todavía 15 partidos para saber si la pelea por entrar en la Copa de Europa y por evitar el descenso se convierte en una pesadilla.