Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo desafían a la lógica y correrán en Laguna Seca

Pedrosa y Lorenzo volverán a desafiar a la física este fin de semana en Laguna Seca. Lorenzo, operado dos veces en sólo 15 días en la clavícula izquierda, volverá a asumir riesgos tras correr mermado físicamente en las dos últimas carreras, Assen y Sachsenring. Pedrosa, que sufrió en el Gran Premio de Alemania un shock traumático, una conmoción cerebral, y una pequeña fractura también en la clavícula izquierda, tampoco se perderá la cita de este fin de semana. Ambos desoyen las recomendaciones de los médicos.

En un deporte tan intenso y vivido a tantas pulsaciones como el motociclismo, dos ‘bestias’ vuelven a poner a prueba sus físicos. Pedrosa, tantas veces tachado de pusilánime en la adversidad, con un aura victimista que le impedía llegar con opciones al tramo final de los campeonatos, no quiere esta vez que nada le aparte de su objetivo: el asalto al Mundial de Moto GP. Centrado en su pugna con Jorge Lorenzo, de nuevo favorito para alzarse con el título, la irrupción de Marc Márquez ha agitado el paddock. De aspecto risueño, el compañero de Pedrosa ha irrumpido con fuerza. Las complicaciones de los máximos aspirtantes al título, le han permitido liderar el campeonato. Aventaja en dos puntos a su compañero, Dani Pedrosa, y en once al vigente campeón del Mundo, Jorge Lorenzo.

Con Márquez como invitado especial a la lucha por el campeonato liderándolo tras las caídas en el último Gran Premio de Alemania, no quieren perder más puntos en una pelea que se prevé titánica de aquí al final de la temporada. “Para ser honesto, pensé que Laguna Seca había terminado para mí. Estaba cansado después de tantos accidentes en poco tiempo. Pensaba en mantener la calma, quedarme en casa y no ir a Laguna Seca. Pero entonces la caída de Dani me dio más posibilidades en el Mundial. También me sentía mucho mejor dos días después. Todo esto cambió mi pensamiento”, declaraba Lorenzo a motogp.com. El piloto de Yamaha, a once puntos del liderato, tiene claro que no puede fallar en el Gran Premio de Estados Unidos. Un circuito con una carga física notable con cuatro curvas a la derecha, siete a la izquierda, y el viraje más famoso del campeonato: el Sacacorchos. “Es muy importante no fallar, terminar la carrera y perder los puntos mínimos posibles”, ahondaba Lorenzo.

Dani Pedrosa, con mejores sensaciones  tras finalizar a un gran nivel el pasado campeonato, no quiere perder comba y al igual que Lorenzo, se probará en Laguna Seca con la convicción de estar disponible para ser de la partida el domingo. El problema será el dolor. “Tengo fractura y también algo desgarrado el pectoral, pero bueno, hay que intentar ver cómo me siento en la pista, porque es un circuito muy difícil. Tengo que salir a probar”, declaraba el de Honda. "Sé cómo va esto: primero te encuentras fatal, luego vas mejorando y a media semana te preguntas ¿por qué no?", afirmaba Valentino Rossi el pasado domingo cuestionado por las posibilidades de ambos de subirse a la moto en Estados Unidos. Pese a las advertencias de los médicos, ambos volverán al asfalto para no perder de vista a Márquez.

Por su parte, Marc Márquez no dejó lugar para la duda y en la primera jornada de libres se encargó de ser el más rápido en pista. Lorenzo y Pedrosa sufrían más de lo previsto para intentar acercarse a la cabeza de la clasificación. Tras el rebufo de Márquez estuvieron en todo momento Rossi y Crutchlow que tuvieron su propio duelo por intentar colocarse lo más cerca posible del español. Un accidente de Blake Young provocó que su moto se quedase en medio de la pista en la curva 5 y, además, derramase aceite lo que obligó a detener los entrenamientos para que los controles de pista pudiesen limpiar. Todos los pilotos regresaron a la pista para intentar mejorar, sin éxito, los registros que habían conseguido hasta ese momento. Con Márquez sólido en la primera plaza, Bradl y Dovizioso relegaron al cuarto puesto a Rossi con Crutchlow quinto, justo por delante de Lorenzo, Aleix Espargaró, Bautista y Hayden.