Rossi, Pedrosa y Lorenzo sólo pueden pelear por las migajas que ha dejado Márquez

El título del Mundial de MotoGP ya tiene nombre y apellidos, algo que no resta emoción a la competición. Es más, comienza ahora. La racha triunfal de diez victorias que firmó Marc Márquez en la primera mitad del año despejó todos los interrogantes que había en torno al dueño del cetro en 2014. Con la respuesta encontrada en el box de Repsol Honda, ahora es el turno de los otros tres gallos del corral de la máxima categoría. Valentino Rossi, Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo tienen tres carreras para repartirse las migajas que ha dejado Marc. Australia es el escenario de la primera batalla, a la que llegan con una diferencia de tres puntos… y cierta ventaja para los chicos de Yamaha.

A medida que transcurría el campeonato, y mientras el piloto italiano avisaba que tenían que encontrar la forma de derrotar a Márquez por su propio bien y el del campeonato, asumieron que el único trofeo con el que podrían rematar la temporada iba a ser el de subcampeón. Y en ello están. Por detrás del piloto de Repsol Honda aparecen Rossi y Pedrosa empatados con 230 puntos. Tres por detrás se sitúa un renacido Jorge Lorenzo; ha cosechado un par de victorias consecutivas (Aragón y Motegi) y ha estado presente en los últimos ocho podios. Precisamente, la remontada que ha protagonizado tras un nefasto inicio de temporada es la mejor motivación para el piloto de Yamaha.

“Ganar dos carreras seguidas después de un comienzo tan decepcionante fue increíble, para mí y para todos los chicos de Yamaha que trabajaron muy duro. Espero que podamos tener otro gran fin de semana y luchar por la victoria de nuevo, algo muy importante de cara al segundo puesto del campeonato”. Jorge Lorenzo no esconde su objetivo en Phillip Island, un circuito más adecuado para las Yamaha que para las Honda. Es más, el año pasado se llevó la victoria en una extraña carrera en la que tuvieron que cambiar de moto… y que pudo haber costado a Marc Márquez el que luego fue su primer mundial de MotoGP. Sea como sea, el resurgir de Jorge Lorenzo incomoda a su compañero de box que será uno de los nombres propios del fin de semana.

En Australia, Valentino Rossi cumplirá 250 grandes premios en la máxima categoría distanciándose de Alex Barros (con 245 carreras), Capirossi (217), Edwards (196) y Nicky Hayden (195). Semejante experiencia juega a su favor. Y más si tenemos en cuenta la trayectoria del italiano en Phillip Island: en la mayor de las cilindradas, se ha subido a lo más alto en seis ocasiones a las que hay que sumar otras dos del resto de categorías. Sólo falló las dos temporadas en las que vistió de rojo Ducati, ausencias que le impidieron igualar las ocho presencias consecutivas de Casey Stoner. A pesar de todo esto, Valentino Rossi se ha salido del tiesto asegurando que él prefiere ganar el mayor número de grandes premios posibles antes que alzarse con el subcampeonato.

Dani Pedrosa completa la terna de candidatos a pelear por la segunda posición del Mundial de MotoGP. Las Honda sufren en el circuito situado en las afueras de Melbourne igual que lo hace el piloto para ganar en Phillip Island, una imagen que sólo se ha visto en 2005 cuando lo hizo en la extinta categoría de 250cc. Pedrosa no consigue tomar el pulso al trazado ‘aussie’, tarea que se antoja complicada con los resultados sobre la mesa: su única victoria de la temporada llegó en Brno (República Checa) y tras aquel triunfo, sólo ha regresado al podio en Misano (tercero). En Silverstoney Motegiacabó cuarto mientras que en Motorland finalizó en decimocuarto lugar.

Así es como llegan los candidatos a la segunda de las tres carreras consecutivas que forman parte de la gira asiática. Un periplo que pone a prueba su resistencia y su estado físico cuando la temporada da sus últimos coletazos. Es el momento en el que hay que aprender a gestionar la presión y el instante en el que dejan de existir los desahogos. La emoción aterriza en MotoGP a tres carreras del final con el ‘segundo’ título de la máxima categoría por decidir en un pañuelo de tres puntos. Agárrense porque vienen curvas, en concreto siete a izquierdas y cinco a derechas. Pura adrenalina al otro lado del mundo.