Los 'villanos' del fútbol se portan como caballeros con el rugby en Valladolid

Según reza un antiguo dicho británico "el fútbol es un juego de caballeros jugado por villanos y el rugby es un juego de villanos jugado por caballeros", aunque en el caso de Valladolid podría decirse que los 'villanos' del fútbol se han portado como unos caballeros. Pucela, hoy por hoy la capital del rugby español, alberga este domingo (13:00 horas) la final de la Copa del Rey entre el VRAC Quesos Entrepinares y el Silverstorm El Salvador, ambos de la citada ciudad.

Y lo hace en el Estadio José Zorrilla, de titularidad municipal, aunque la casa del Real Valladolid desde su construcción en 1982 con motivo del Mundial celebrado en España ese mismo año y del que fue sede. También lo fue de la final de la Copa del Rey de fútbol de esa temporada. Treinta y cuatro años después, lo será de la del llamado deporte del balón oval, todo un acontecimiento en la ciudad, hasta el punto de haberse colgado el cartel de no hay billetes. Con capacidad para 26.500 espectadores, se han vendido incluso algunas entradas de algunas localidades que no se utilizan en partidos de fútbol.

Carlos Suárez, presidente del Real Valladolid, explica a El Confidencial que "cuando el Alcalde -el socialista Óscar Puente- me pidió Zorrilla para albergar la final de Copa de rugby, en lo primero que pensé fue en este deporte, que lamentablemente no tiene mucha fuerza y le quedan años para tenerla, así como en el hecho de que la disputen dos equipos de Valladolid, actualmente los mejores del rugby español". Cabe recordar que el equipo blanquivioleta adelantó su partido de Liga contra el Zaragoza a este sábado (20:15 horas), para de este modo dejar libre el domingo, fecha fijada para la final de Copa de Rugby, a la que finalmente acudirá el rey Felipe VI.

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"Hablé con LaLiga y consulté a la Real Sociedad, que tiene experiencia en ceder Anoeta para partidos de rugby", comenta Carlos Suárez. "Hubo gente que protestó porque consideraba que el césped de Zorrilla podía estropearse, pero si el tiempo es bueno, el campo apenas va a sufrir, pues de hecho suele estropearse más en un partido de fútbol que en uno de rugby".

Además, y tal y como explica el presidente del Real Valladolid, "no cobramos nada por el alquiler, ya que consideramos que para la ciudad es muy bueno. Nos hemos volcado y hay que demostrar que hasta el rugby, cuando la fiesta merece la pena, podemos lograr muchos réditos". El único problema puede surgir con algún patrocinador, al no coincidir los del Valladolid con el de la Federación Española de Rugby, aunque en este caso también hay que confiar que haya un entendimiento dada las peculiares circunstancias.

Suárez, como gestor deportivo que es, sabe que "todo lo que funciona y puede traer gente a la ciudad es bueno para todos y beneficia indirectamente a nuestro club, aunque es verdad que en el caso de la final de la Copa del Rey de rugby es algo más local al disputarla dos equipos de Valladolid. Hoy por hoy, el fútbol está a años luz del rugby, pero es importante también que en otras ciudades se den cuenta de que todo se puede hacer. No se trata de comparar, sino de ayudar a crecer y buscar el beneficio para otros deportes, ahora el rugby, pero también al balonmano o al baloncesto", sentencia..

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Como no podía ser de otra manera, al hablar con Carlos Suárez hay que preguntarle por la situación del Real Valladolid, decimocuarto en la Liga Adelante, pero a tan sólo cuatro puntos de los puestos de playoff de ascenso a Primera y a falta aún de 9 jornadas. "Después de iniciar la compra y empezar a hacer las cosas bien tras salir del concurso de acreedores, nos faltó un poco de suerte para consolidar el proyecto en Primera. Cuanto más tardemos en ascender, más complicado será hacerlo. Debemos acabar con la deuda, hacer las cosas bien, después de haber aprendido de las que hicimos mal. Eso sí, lo que hay que hacer es ganar partidos y que, como suele decirse, la pelotita entre". "Además, debemos lograr que los aficionados sean del Valladolid, más allá de los resultados", sentencia el 'villano' Carlos Suárez, quien se ha portado como un caballero con el rugby y los dos clubes de la capital castellano-leonesa.