Es noticia
A Guindos no le salen las cuentas de la derrama del FGD: faltan 500 millones
  1. Economía
TRAS APLICAR LAS DEDUCCIONES POR PARTICIPAR EN SAREB

A Guindos no le salen las cuentas de la derrama del FGD: faltan 500 millones

El ministro Luis de Guindos tiene difícil alcanzar los 2.000 millones anunciados con la derrama del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) para la compra de

Foto: A Guindos no le salen las cuentas de la derrama del FGD: faltan 500 millones
A Guindos no le salen las cuentas de la derrama del FGD: faltan 500 millones

El ministro Luis de Guindos tiene difícil alcanzar los 2.000 millones anunciados con la derrama del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) para la compra de preferentes de CatalunyaCaixa y NovaGalicia. Si se suman las aportaciones teóricas de las entidades y se descuenta la deducción del 30% de las aportaciones realizadas al capital de Sareb, faltan más de 500 millones para alcanzar esa cifra. Las mayores aportaciones vendrán de BBVA, que no participó en el banco malo, a la que le corresponderían, en teoría, unos 400 millones, aunque la entidad rebaja esa cifra a 302.

Esta derrama, adelantada por El Confidencial y anunciada oficialmente el 22 de marzo, consiste en un 0,3% de los depósitos computables de las entidades en España (no se incluyen las unidades en otros países ni algunos tipos de depósitos). Pero no de todas las entidades. Las que han recibido dinero público no tienen que aportar: BFA-Bankia, CatalunyaCaixa, NovaGalicia Banco, Banco Gallego, Caja España-Duero, BMN, Liberbank y Caja3. También están exentas las entidades de pequeño tamaño (menos de 5.000 millones), lo que deja fuera a muchas cajas rurales y a las dos cajas locales supervivientes de la crisis.

Y de las que quedan, las que han entrado en el capital de Sareb pueden deducirse el 30% de sus aportaciones (2.470,6 millones), lo cual afecta a todas las entidades sanas españolas (más Barclays y Deutsche Bank) salvo BBVA; de hecho, esta exención se interpreta como un castigo a Francisco González por esta traición, o bien como un incentivo para que se incorpore al banco malo antes de fin de año, período en que estará vigente la deducción.

Aplicando todos estos factores a las las cifras de depósitos de cada entidad, Credit Suisse  estima que la mayor aportación será la de BBVA, precisamente por no acceder al descuento: 396 millones. No obstante, la entidad asegura que sus cálculos arrojan tan sólo 302 millones. Para Santander, el banco de inversión suizo determina una aportación de 335 millones. Le siguen CaixaBank con 298 millones y Sabadell con 150, aunque fuentes de este último rebajan esa factura a 120 millones. Finalmente, Popular tendrá que aportar 93 millones. En total, 1.240 millones según estas estimaciones, que se quedan en 1.116 si cogemos las correcciones hechas por las propias entidades.

A esto hay que añadir el resto de bancos que operan en España (Bankinter y los extranjeros, básicamente) más Unicaja, Ibercaja y Kutxa, cuya aportación conjunta cifran algunas fuentes en menos de 200 millones. Finalmente están las cooperativas de crédito, que tendrían una aportación similar a la del Popular, es decir, unos 90 millones. Por tanto, estamos hablando de entre 1.400 y 1.530 millones en el mejor de los casos, muy lejos de cualquier forma de los 2.000 que fijaron como objetivo tanto De Guindos como el Banco de España.

¿Tendrá suficiente el FGD?

Si no se consiguen los 2.000 millones, se pondrá en peligro la capacidad del FGD para comprar todas las acciones por las que se canjearán las preferentes y deuda subordinada en manos de los minoristas de CatalunyaCaixa y NovaGalicia, aunque fuentes del Banco de España aseguran que esa cifra incluye cierto colchón sobre las necesidades reales. Hay que tener en cuenta, además, que el FGD va a aplicar una quita adicional a la impuesta por Bruselas -todavía por determinar- a cambio de ofrecer liquidez a estos ahorradores, lo que disminuirá las necesidades del fondo para hacerse cargo de estos títulos. Por otro lado, fuentes del Banco de España recuerdan que el FROB puede prestar dinero al FGD en caso de que no sea suficiente con la derrama.

Esta fórmula pretende resolver el problema de que las preferentes y subordinada se canjearán por acciones no cotizadas y, por tanto, ilíquidas de estas dos entidades. Pero ha encontrado un importante rechazo en los bancos sanos, manifestado públicamente el martes por Emilio Botín. Por otro lado, BBVA considera que el descuento a los que han participado en Sareb rompe el principio de igualdad y discrimina a una sola entidad, por lo que está dispuesto a recurrir a Bruselas. 

Los titulares de preferentes de CatalunyaCaixa serán los que sufran unas mayores pérdidas en el canje impuesto por Bruselas, del 61% de su inversión por término medio. Estos títulos perderán el 43% en NovaGalicia, el 38% en Bankia y el 50% en Banco Gallego. En cuanto a la deuda subordinada, la pérdida media será la siguiente: en Bankia, del 36% para la perpetua y del 13% para la que tiene vencimiento; en NovaGalicia, del 41% para la perpetua y del 22% para la con vencimiento; en CatalunyaCaixa, del 40% y el 15%, respectivamente; y en Banco Gallego, del 39% y el 11%. A estos porcentajes hay que añadir el descuento adicional que impondrá el FGD.

El ministro Luis de Guindos tiene difícil alcanzar los 2.000 millones anunciados con la derrama del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) para la compra de preferentes de CatalunyaCaixa y NovaGalicia. Si se suman las aportaciones teóricas de las entidades y se descuenta la deducción del 30% de las aportaciones realizadas al capital de Sareb, faltan más de 500 millones para alcanzar esa cifra. Las mayores aportaciones vendrán de BBVA, que no participó en el banco malo, a la que le corresponderían, en teoría, unos 400 millones, aunque la entidad rebaja esa cifra a 302.

Luis de Guindos