La sombra del impago obliga a Grecia a abonar un 2,7% para financiarse a tres meses

Grecia ha vuelto a sentir este miércoles en el mercado que el riesgo del impago cotiza al alza en sus costes de financiación. Atenas ha sacado adelante una subasta de letras a tres meses en la que, para captar 1.300 millones de euros, ha tenido que pagar un interés del 2,70%, por encima del 2,5% de febrero y el más alto desde marzo de 2014. Es decir, algo similar a lo quele ocurrió la semana pasada con las letras a seis meses.

Prolonga así la secuencia de los últimos meses. En concreto, desde el 1,7% que pagó en noviembre. A partir de entonces, el coste subió al 1,8% y al 1,9% en diciembre, al 2,15% en enero y al 2,5% en febrero. Al mismo plazo -tres meses-, España pagó un interés del 0,01% en febrero.

La Agencia de Gestión de la Deuda Pública ha ejecutado esta operación con la misión de refinanciar el vencimiento de 1.600 millones en letras que afrontará este viernes. Pero es que ese día el país también tiene que devolver 336 millones al Fondo Monetario Internacional (FMI), a los que tendrá que sumar 560 millones más el lunes. Y otros 336 millones al FMI el viernes 20, jornada en la que también afrontará otro vencimiento de letras a 1.600 millones.

Este exigente calendario marca la actualidad en las reuniones entre las instituciones de la troika -que es como se llama ahora a la troika-y el Gobierno de Alexis Tsipras. Sobre todo, porque si el segundo no concreta sus reformas, ni Europa ni el Banco Central Europeo (BCE) ni el FMI aportarán más dinero a Grecia, con lo que el país tendrá que sacar de donde pueda el dinero para afrontar sus compromisos financieros. Como no está claro que lo pueda hacer, la amenaza del impago está de vuelta, de ahí los mayores intereses que le exige el mercado.

Por el contrario, si el ministro de Finanzas, Yanis Varufakis, convence con sus propuestas, las tres partes suavizarán su postura y suministrarán 7.200 millones a Grecia -1.800 millones de Europa, 1.900 del BCE y 3.500 del FMI-. Y en ese caso la posición griega en los mercados sería menos acuciante.