Sumar pide un IVA del 21% a los alquileres turísticos y que tributen cuando estén vacíos

Sumar ha presentado este miércoles una batería de subidas de impuestos a los alquileres turísticos con el objetivo de recortar la rentabilidad que obtienen actualmente los propietarios y así fomentar que se pasen al alquiler permanente. La propuesta incluye gravar con el 21% de IVA a los alquileres turísticos, la imputación de rentas inmobiliarias por valor del 20% del valor catastral o la eliminación de deducciones por la compra, el pago de intereses o la inversión en mejoras de estos inmuebles.

La formación ha planteado este paquete de medidas en forma de Proposición No de Ley (PNL) con el objetivo de que sea debatida por los distintos partidos del Congreso. Pero también pretende incorporar estas propuestas a la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) que comenzará de forma inminente con el partido mayoritario del Gobierno, el PSOE.

"Las medidas anunciadas por el ministerio de vivienda nos parecen insuficientes y, además, poco eficientes", ha lamentado el portavoz económico de Sumar, Carlos Martín, por lo que ha justificado que es necesario intervenir por la vía de la fiscalidad para reducir la rentabilidad del alquiler vacacional. "Con las simulaciones que hemos hecho, estas medidas llevarían la rentabilidad del alquiler turístico por debajo de la del alquiler permanente", ha explicado.

Para empezar, porque los alquileres se verían encarecidos en un 21% al tener que tributar por el IVA general. Actualmente están exentos del IVA salvo que ofrezcan servicios similares a los de la hostelería. Esto es, no lo paga prácticamente nadie. Pasarían así de estar exentos a tener un tipo superior al de los hoteles y otros alojamientos. Sumar justifica esta diferencia en que los pisos turísticos generan externalidades negativas, como la expulsión de los vecinos o la gentrificación, mientras que los alojamientos tradicionales generan externalidades positivas, como empleo o el respeto de normativa de salud, laboral, etc.

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Sumar permitiría una excepción a esta subida del IVA para los alquileres que sean en la vivienda habitual del propietario. En estos casos, ya sea si pone en el mercado habitaciones de la casa, o el inmueble completo por cortos periodos de tiempo, se aplicaría el tipo reducido del IVA, el 10%. El motivo es que en estos casos no se produciría expulsión del vecino, sino que el alquiler le permitiría complementar sus ingresos.

La formación también propone endurecer la fiscalidad sobre los propietarios a través del IRPF para las zonas tensionadas. En concreto, plantea suprimir la deducibilidad actual que tienen los gastos financieros, la amortización y la inversión en mejoras que existe en el impuesto. Además, plantea una brusca subida de las rentas inmobiliarias imputadas para que los propietarios paguen IRPF cuando estén vacíos.

"El objetivo no es recaudar más, sino cambiar los precios relativos del alquiler turístico y el permanente"

En concreto, propone subir la renta imputada hasta el 20%, desde el 2% general en el que está actualmente (en algunos casos baja hasta el 1,1%). Esto significa que la renta imputada se multiplicaría por 10 o 18 veces. Este porcentaje se calcula sobre el valor catastral del inmueble reflejado en el IBI.

Estas dos medidas que afectan al IRPF sólo se aplicarían en las "zonas tensionadas". Sumar considera zonas tensionadas los dos archipiélagos completos, los municipios de más de 200.000 habitantes y aquellos en los que el número de turistas multiplique por 10 al de habitantes (10 turistas por cada residente).

La formación plantea extender la supresión de la deducibilidad también en el impuesto sobre sociedades, para que así también tengan un endurecimiento de la carga tributaria las empresas dedicadas al alquiler turístico. Igualmente, se aplicaría exclusivamente sobre los inmuebles situados en estas zonas tensionadas.

Por último, reclama un impuesto especial en las Socimis del 25% sobre los beneficios anuales para aquellas que hayan tenido, “en algún momento del periodo impositivo”, un alquiler turístico. Sumar pone el foco en este vehículo de inversión y reclama al Gobierno “estudiar otras medidas normativas oportunas a efectos de desincentivar el uso de las Socimis para el arrendamiento de viviendas con fines turísticos”.

Sumar considera que este paquete de medidas sería eficaz para trasladar viviendas del mercado de alquileres turísticos al de alquileres estables. “El objetivo de estas medidas no es recaudar más, sino cambiar los precios relativos”, ha explicado Martín.