De Cos lo vio venir: la defensa que levantó en el Banco de España contra la injerencia política

Desde que se filtró el nombre del ministro José Luis Escrivá como el candidato propuesto por Moncloa para ocupar el cargo de gobernador del Banco de España, han crecido las dudas sobre la independencia de la entidad. El mandato del gobernador Pablo Hernández de Cos ha servido para visibilizar el papel que puede desempeñar la entidad si se rige por los principios de independencia y rigor. Sin embargo, los problemas de los últimos tiempos para la renovación de los órganos institucionales llevan tiempo generando dudas sobre el futuro del Banco de España. Bastaba con mirar la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que estuvo bloqueada más de cinco años.

En 2022 el Banco lanzó el Programa de Evaluaciones Externas bajo la batuta del gobernador Pablo Hernández de Cos. El objetivo fue fijar programas de evaluación externa, con planes bianuales, para tratar de blindar la independencia. Es la mejor solución que encontró el Consejo del Banco para tratar de mantener el prestigio y la utilidad social que tuvo la entidad en los últimos años. No fueron unos visionarios, simplemente comprendieron que la fragmentación política y la polarización convertían al Banco de España en un caramelo goloso para el gobierno de turno, dada la relevancia social y mediática de sus informes y estudios.

La evaluación externa no garantiza la independencia del Banco, pero el miedo a recibir informes negativos podrían incentiven a cualquier gobernador a dejar que los profesionales de la entidad realicen su trabajo de forma autónoma. En definitiva, se buscaba desincentivar que el gobernador controle el contenido de los informes, así como las temáticas abordadas.

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Los evaluadores externos tendrán como mandato "examinar y mejorar sus actuaciones (del Banco de España), así como la transparencia y la rendición de cuentas", señalan las directrices del Banco de España. "La evaluación proporcionará una valoración, total o parcial, de las respectivas actuaciones o programas del Banco mediante el desarrollo de indicadores para medir eficacia, eficiencia y calidad y el fortalecimiento de los mecanismos de seguimiento y control del cumplimiento de objetivos". Al finalizar las diferentes evaluaciones, los expertos elaborarán un informe con los resultados y realizarán una serie de recomendaciones de mejora.

Una de las decisiones más importantes del Consejo del Banco fue la de establecer una obligación de realizar un seguimiento del grado de cumplimiento de esas recomendaciones. Esto es, quedará negro sobre blanco el nivel de asimilación de las propuestas de mejora que aplique cada gobernador. Las áreas que sean evaluadas deberán elaborar un plan de acción en respuesta a la evaluación que incorpore las recomendaciones recibidas y realizar un seguimiento de las mismas.

Opinión

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Desde el año 2022 se han aprobado tres programas de evaluación, el último de los cuales se elaborará a finales de este año y el siguiente, sobre el uso de datos dentro de la entidad. El último, aprobado este mismo año, está fijado para los años 2024 y 2025. El último plan de acción aprobado, el de la labor de elaboración de las previsiones económicas, incluye también novedades importantes. Entre ellas se encuentra el compromiso del Banco por realizar un seguimiento más estrecho del mercado laboral y de las cuentas públicas, dos de las cuestiones más importantes para cualquier gobierno. Este planteamiento de los programas de evaluación no garantiza que la entidad vaya a mantener su independencia, pero sí supone un incentivo a que el futuro gobernador, al menos, guarde las formas.