Gerardo Díaz y Joan Rosell se disputarán la presidencia de la CEOE

La CEOE celebrará su próximo congreso en el primer trimestre de 2006, posiblemente en el mes de febrero, pero la parrilla de salida para la carrera hacia la presidencia ya está lista. El caso es que José María Cuevas se encuentra en la recta final de su mandato y ya suenan nombres para sustituirle. Los candidatos que se postulan como posibles sucesores son Gerardo Díaz, presidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) y Joan Rosell, su homólogo en Fomento del Trabajo (la CEOE catalana).

El objetivo de la patronal es realizar una transición sin estridencias y que no comporte grandes cambios en su política. Para poder llevar a cabo esta “transición tranquila”, y ante los movimientos de algunos empresarios, Cuevas ha realizado gestos ambiguos sobre la posible repetición de mandato o sobre su posible retirada, según le conviniese en un momento u otro. Con esta estrategia ha neutralizado hasta el momento todos los rumores sobre los posibles candidatos que puedan ocupar su lugar.

“A pesar de no continuar en la presidencia, Cuevas quiere seguir presente en la nueva dirección que salga del Congreso”, señalan fuentes de la patronal. Por eso, aunque salga físicamente de su sillón presidencial, podría dejar a un hombre de su total confianza al frente de la misma. Ese tapado sería Gerardo Díaz, presidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), dueño de Viajes Marsans y de Spanair y uno de los líderes del ala dura de la CEOE, nada condescendiente con el Gobierno socialista y señalado simpatizante de la política económica del PP.

Sin embargo, la casualidad ha querido ahora que un juez haya imputado a Gerardo Díaz y a su socio Gonzalo Pascual en un presunto delito de apropiación de fondos públicos por un monto de 204 millones de euros como consecuencia de la compra de la compañía Aerolíneas Argentinas, además de otros presuntos delitos de falsedad documental y delito fiscal. Aerolíneas Argentinas era propiedad del Estado, que la vendió a Viajes Marsans a través de Air Comet en el año 2001. Esta instrumental también es propiedad de Díaz y Pascual.

Los pasivos de Aerolíneas

Aunque nunca se hizo público el monto de la operación, desde dicha venta, el Estado español ha estado abonando cientos de millones de euros por los pasivos que Aerolíneas tenía en aquel momento. Una parte de estas aportaciones, que presuntamente pasaron a las cuentas de Air Comet y que no se utilizaron para saldar créditos, son las que han desencadenado la imputación de los empresarios españoles.

Las fuentes consultadas señalan que la imputación ha sido un duro golpe a los planes de Cuevas: “Si Gerardo Díaz sucede a Cuevas en la patronal, ésta puede encontrarse dentro de unos meses con un presidente procesado, lo que no le conviene. O vuelve a presentarse o ha de buscar a otro tapado”, insisten las fuentes.

De todos modos, no faltan sucesores para Cuevas, ya que varios nombres han corrido de boca en boca durante los últimos meses. Otro de los candidatos es Joan Rosell, presidente de Fomento del Trabajo, aunque éste siempre ha mantenido un discreto silencio sobre su situación. Rosell, considerado un hábil negociador, tiene la ventaja de que es un hombre que no está mal visto desde el Gobierno –sus relaciones con el poder político son buenas- e incluso no despierta demasiadas antipatías desde los sindicatos.