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La patronal eléctrica está en coma. Ayer no se pudo constituir la Junta Directiva porque sus miembros casi se pegan.
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La patronal eléctrica está en coma. Ayer no se pudo constituir la Junta Directiva porque sus miembros casi se pegan.

Bronca monumental ayer en la sede de Unesa. Lo que se preveía una reunión más o menos civilizada, para dirimir cuestiones en el seno de la

Foto: La patronal eléctrica está en coma. Ayer no se pudo constituir la Junta Directiva porque sus miembros casi se pegan.
La patronal eléctrica está en coma. Ayer no se pudo constituir la Junta Directiva porque sus miembros casi se pegan.

Bronca monumental ayer en la sede de Unesa. Lo que se preveía una reunión más o menos civilizada, para dirimir cuestiones en el seno de la patronal eléctrica, acabó como el rosario de la aurora. El presidente de Iberdrola no pudo ni siquiera dimitir de la presidencia de Unesa, al no constituirse la Junta Directiva de la asociación. Antes hubo desayuno de los primeros espadas del sector en el que saltaron las chispas y de qué manera. Todo acabó antes de lo previsto, a las 12 de la mañana.

Quienes estaban presentes dicen que la tensión se podía cortar con un cuchillo, cuando Manuel Menéndez, presidente de Hidrocantábrico (además de Cajastur y Naturcorp), criticó a Iñigo Oriol el papel que estaba teniendo Iberdrola en la OPA de Gas Natural. El aludido, también fuera de sí, contraatacó recordando que Cantábrico estaba en manos de la portuguesa EdP: “Tú tampoco eres nadie para echar nada en cara”.

Mientras tanto, un Pizarro auténticamente enfurecido arremetía contra Iberdrola, “de una manera que parecía que se iba a liar a tortas con el propio Oriol”, comentan las fuentes consultadas. Otras también presentes confirman que la reunión fue “muy, muy tensa, pero al menos no se escucharon insultos. No nos hemos pegado porque hemos ido a colegio de pago”. Sin embargo, también confirman que “fue un todos contra Oriol, con acusaciones de traición y deslealtad por medio”.

En el transcurso del desayuno, el presidente de Iberdrola presentó la dimisión, que le fue aceptada por unanimidad, pero al proponer a Pedro Rivero, se rechazó, también por unanimidad, dicha propuesta.

Con semejante panorama, “ha sido imposible constituir la Junta”, con lo que no se ha podido formalizar la dimisión de Iñigo Oriol y, sobre todo, conocer cuál iba a ser el futuro de Unesa. ¿Quién será el próximo presidente? En las quinielas destaca el propio Menéndez, ya que Basagoiti, de Fenosa, parece descartado. La propia Unesa presentó un comunicado ayer en el que señalaba que no se había constituido la Junta y que no dirían esta boca es mía.

Fuentes del sector eléctrico aseguran que “Oriol está viviendo un auténtico calvario”. Se ha visto en un fregado que es, si nada lo remedia, un feo colofón a su carrera, que ya toca a su fin por motivos de edad: vilipendiado por la competencia y saliendo por la puerta de atrás de Unesa, una asociación fundada por su padre y que ahora está en encefalograma plano.

No falta quien dice que “si no hubiera alargado un año más su mandato al frente de Iberdrola y Unesa, a finales del pasado mes de abril, se habría ido de rositas, con el valor cómodamente asentado en los 20 euros y empatado en capitalización con Endesa”.

En su reelección de hace unos meses, Oriol decía que “hay cuestiones en las que en el sector no existe una postura común: se trata de cuestiones todas ellas que están relacionadas con el régimen de libre competencia y, por tanto, es lógico que haya posiciones dispares. Pero incluso en esos casos, el papel de Unesa ha sido fundamental”. Ayer esas buenas palabras no volvieron a escucharse.

Miranda arenga a sus tropas

Por su lado, el consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda, convocó el lunes a todo el personal ejecutivo de su compañía, para informarles y, de paso, arengarles. Había allí “jefes altos, medios y relativamente bajos, con pocas personas a su cargo”, según señalan varias fuentes presentes en el evento. ¿El motivo? Informar que “haremos todo lo que tengamos que hacer para defender nuestros intereses”.

Unas 1.000 personas llenaron hasta la bandera el auditorio de la futurista sede de la eléctrica en la calle Ribera del Loira, para escuchar el mensaje de “unidad y proyecto de grupo” pronunciado por Miranda.

Bronca monumental ayer en la sede de Unesa. Lo que se preveía una reunión más o menos civilizada, para dirimir cuestiones en el seno de la patronal eléctrica, acabó como el rosario de la aurora. El presidente de Iberdrola no pudo ni siquiera dimitir de la presidencia de Unesa, al no constituirse la Junta Directiva de la asociación. Antes hubo desayuno de los primeros espadas del sector en el que saltaron las chispas y de qué manera. Todo acabó antes de lo previsto, a las 12 de la mañana.