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Moncloa intenta meter cizaña entre Rato y Arias Cañete a propósito de la polémica del Banco de España
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Moncloa intenta meter cizaña entre Rato y Arias Cañete a propósito de la polémica del Banco de España

El entorno del equipo económico que Rodrigo Rato capitaneó en el Gobierno Aznar recibió ayer distintos mensajes subliminales desde el Ministerio de Economía de Pedro Solbes,

Foto: Moncloa intenta meter cizaña entre Rato y Arias Cañete a propósito de la polémica del Banco de España
Moncloa intenta meter cizaña entre Rato y Arias Cañete a propósito de la polémica del Banco de España

El entorno del equipo económico que Rodrigo Rato capitaneó en el Gobierno Aznar recibió ayer distintos mensajes subliminales desde el Ministerio de Economía de Pedro Solbes, en el sentido de que si el PP deja de “meter el dedo en el ojo” a Miguel Ángel Fernández Ordóñez y lo acepta como gobernador del Banco de España, el Gobierno Zapatero “no tendría inconveniente en aceptar al candidato a subgobernador propuesto por el PP, José María Marín”.

La especie fue radicalmente desmentida en la tarde de ayer por el responsable para asuntos económicos del PP, Miguel Arias Cañete. Dice el dicho que en la guerra todas las armas son válidas para derrotar al enemigo, y eso es lo que la máquina de propaganda de La Moncloa y el propio Solbes llevan días haciendo en torno a la dura polémica generada por la elección de Mafo como gobernador del Banco de España.

De acuerdo con las fuentes consultadas por este diario, Moncloa ha llegado a filtrar a determinados medios de comunicación la especie de que no había ningún problema con el Partido Popular, porque Solbes había pactado con Rodrigo Rato la elección de José María Roldán como subgobernador.

La realidad es tan distinta que en la sede del PP daban por zanjada la polémica al final de la tarde de ayer: el Gobierno se ha salido con la suya nombrando como gobernador a un tipo de un perfil político tan acusado como el de Mafo, arruinando con ello el consenso existente entre el Gobierno y el partido de la oposición desde que entrara en vigor la Ley de Autonomía del Banco de España.

“Lisa y llanamente, el Gobierno tenía claro lo que iba a hacer en la renovación en la cúpula del Banco de España, y como no hemos aceptado ese juego han aparentado un enfado monumental”, aseguraba ayer una fuente del PP. La creencia en el entorno económico del PP es que Solbes va a intentar nombrar como subgobernador a José Viñals para hacer con ello un guiño al PP, “pero no excluimos que Moncloa tenga su propio candidato a subgobernador”.

Viñals, amigo personal de Solbes

Viñals es un técnico de reconocido prestigio alejado de la política, aunque de adscripción centrista, además de amigo personal de Solbes. “Nosotros no nos vamos a meter con Viñals, pero no nos dejaremos embaucar, dejaremos claro que no es nuestro hombre, porque para eso hemos dicho claramente que nuestro candidato a subgobernador es José María Marín”.

La determinación en el PP es clara: “No vamos a aceptar nunca a Mafo como gobernador del Banco de España. Dicho esto, les hemos dado el nombre de nuestro candidato a subgobernador; si lo quieren aceptar, ya saben lo que tienen que hacer, pero si deciden nombrar a otro, ese otro no será nunca nuestro candidato, por muy acusado que sea su perfil técnico”.

Es la guerra. Así las cosas, el PP amenaza con actuar desde el Ejecutivo contra el Banco de España gobernado por Mafo si es que llegara a ganar las elecciones, y es que la Ley de Autonomía se puede modificar sin necesidad de pasar por el Congreso, y Economía puede restar al Banco de España muchas de sus competencias, como la de supervisión.

En esta línea de confrontación, el antiguo banco emisor podría quedarse solo con la competencia de Política Monetaria que, a su vez, está delegada en el Banco Central Europeo. De proponérselo, un Gobierno PP podría hacer que Mafo se cruzara de brazos, llegando incluso a desgajar de la plaza de Cibeles el influyente Servicio de Estudios de la institución.

El entorno del equipo económico que Rodrigo Rato capitaneó en el Gobierno Aznar recibió ayer distintos mensajes subliminales desde el Ministerio de Economía de Pedro Solbes, en el sentido de que si el PP deja de “meter el dedo en el ojo” a Miguel Ángel Fernández Ordóñez y lo acepta como gobernador del Banco de España, el Gobierno Zapatero “no tendría inconveniente en aceptar al candidato a subgobernador propuesto por el PP, José María Marín”.