QIA, el brazo inversor de Qatar, busca hoteles de lujo en España

Qatar Investment Authority (QIA) tiene la llave del dinero que necesita España. El fondo soberano del Reino de Qatar maneja unos recursos mil millonarios gracias al lucrativo negocio del petróleo. Su problema es nuestra esperanza: encontrar buenas oportunidades de inversión fuera de sus fronteras. Hasta la fecha, el dinero que gestiona la familia real Al Thani, compuesta por más de 3.000 personas, no había puesto sus ojos en nuestro país, salvo para activos relacionados con el sector hotelero o del ocio.

Sin embargo, a raíz del encuentro que ayer mantuvieron el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, con el primer ministro qatarí, Hamad bin Jaber Al Thani, el fondo soberano ha ampliado su abanico de preferencias. Según el acuerdo anunciado, Qatar realizará inversiones en España por importe de 3.000 millones de euros en telecomunicaciones y energía, aunque un 10% será para capitalizar las cajas de ahorro, como ya hizo QIA en Barclays y Credit Suisse.

Pero no había sido así hasta fechas muy recientes. Durante el pasado mes de enero, representantes de QIA visitaron España. En concreto, la comitiva del fondo soberano viajó a las ciudades de Barcelona, Madrid y Málaga, donde estuvieron visitando distintos activos inmobiliarios, según fuentes del sector. De hecho, su presencia no pasó inadvertida y desató el interés de los intermediarios por ofrecerles oportunidades de inversión, aunque su interés principal pasaba por encontrar hoteles cinco estrellas.

La adquisición de un gran cinco estrellas estaría ligada con la llegada de Qatar Airways a la Península. La compañía aérea nacional tiene rutas fijas entre la emergente capital Doha y dos ciudades españolas (Barcelona y Madrid), oferta que pretende ampliar ahora con la inclusión de un hotel de lujo en su pack de viaje. Por este motivo, uno de los centros visitados fue el complejo madrileño de Puerta América, un vanguardista establecimiento situado a la entrada este de la capital, en dirección al aeropuerto de Barajas.

Hasta la fecha, la única inversión recordada por parte del dinero de Qatar fue precisamente en el sector hotelero. La familia real qatarí adquirió a comienzos de 2008 a la inmobiliaria Evemaría el cinco estrellas Los Casares, gestionado por la firma internacional Hyatt. Entonces, con el barril de petróleo a 126 dólares la unidad y los países del Golfo Pérsico en plena vorágine inversora, la operación qatarí fue realizada a través de la división hotelera de su fondo soberano, la Compañía Nacional de Hoteles de Qatar (QNHC).

Volkswagen, Harrods y… el Málaga

Más recientemente, aunque deba encuadrarse en el campo del ocio, el jeque Abdullah Bin Nasser Al-Thani formalizó durante el verano de 2010 la compra del equipo de fútbol del Málaga por 36 millones de euros. Una inversión pasional si no fuera porque entre los planes del nuevo presidente midas de los boquerones pasa una operación inmobiliaria millonaria en los terrenos del estadio de La Rosaleda, muy próximos a otra zona comunicada con el aeropuerto y el puerto que también se revisaría urbanísticamente.

Otro de los vínculos de Qatar con intereses españoles, como ayer reconoció el presidente Zapatero, tiene que ver con el fútbol. El pasado diciembre, el emirato árabe se convirtió en patrocinador del FC Barcelona, un acuerdo por el que la entidad culé recibirá 30 millones de euros a cambio de lucir la publicidad de Qatar Foundation cinco temporadas. El acuerdo fue cerrado por el vicepresidente económico del Barca, Javier Faus, que profesionalmente gestiona el fondo de inversión hotelero Meridia Capital.

En otros países, las operaciones de Qatar han sido más variadas. Durante los últimos años, QIA ha protagonizado  adquisiciones tan sonadas como los almacenes londinenses de Harrods o participaciones destacadas en el fabricante alemán de coches Volkswagen, la bolsa británica London Stock Exchange o los supermercados Sainsbury´s, por citar sólo algunos de sus intereses europeos. Ahora, el dinero qatarí quiere darse una oportunidad en España más allá del sol, la playa y el fútbol.