Es noticia
Enel aprieta a la cúpula de Endesa: sin visa, viajes en primera ni coches oficiales
  1. Empresas
POR EL IMPACTO DEL REJONAZO ENERGÉTICO

Enel aprieta a la cúpula de Endesa: sin visa, viajes en primera ni coches oficiales

El grupo italiano se ve obligado a recortar costes de forma brusca por el impacto de las medidas regulatorias adoptadas por el Gobierno en julio

Foto:

Enel tiene entre ceja y ceja que su inversión en Endesa sea rentable pese a los cortocircuitos con los que el Gobierno los está castigando. Tras aplicar varios expedientes de regulación de empleo en algunas de sus plantas y un plan de bajas incentivadas para el 10% de su plantilla global, el grupo italiano ha optado ahora por suprimir algunos privilegios históricosque tenían los directivos de la filial española.

Fuentes oficiales de Endesa han confirmado el plan de ajuste que Enel viene aplicando desde principios de año a su plana mayor, devaluada después de que, el pasado año, el grupo público italiano trasladase gran parte de la toma de decisiones desde Madrid a Roma. En lo que difieren los portavoces de la que fuera primera eléctrica nacional es en los maticesde las medidas adoptadas por la dueña de Endesa.

Según fuentes de la alta dirección, Enel ha eliminado todas las tarjetas de crédito de las que disfrutaban los ejecutivos de primer y segundo rango que tenían derecho a ella. La decisión, aseguran, no tiene excepción alguna, por lo que también se ha visto afectado el presidente, Borja Prado. En consecuencia, los empleados de Endesa tienen que pagar los gastos por adelantado y la compañía se los reintegra posteriormente.

placeholder Endesa aporta 10 millones dólares a fondo privado de reconstrucción de chile

Desde Enel, cuyos empleados en Italia no tenían esta prebenda, han ratificado esta información, si bien añaden que desde julio se ha implantado un nuevo sistema en la filial española para que el directivo no tenga que recurrir a su bolsillo con antelación. El nuevo modelo no ha sido detallado por la sociedad.

Además, la compañía ha reducido el número de coches oficiales que utilizaban sus empleados para desplazarse a reuniones corporativas. Endesa, que disponía de una flota de automóviles de la clase Mercedes, ha limitado el empleo de estos vehículos privados después de ajustar su plantilla de conductores. Ahora toca coger un taxi.

La última medida para reducir los costes ha sido disminuir el número de viajes en avión para asistir a eventos empresariales, salvo los que requieran de forma ineludible la presencia física. Estos vuelos deben ser aprobados por Recursos Humanos y en muchos casos por el propio consejero delegado, Andrea Brentan, bajo justificación imprescindible. Se han prohibido los viajes en primera clase, con la excepción de los destinos de más de cuatro horas, especialmente los que tienen que ver con asuntos en Latinoamérica, donde Endesa tiene una gran presencia. El grupo ha recomendado a sus ejecutivos que sustituyan los desplazamientos largos por multiconferencias.

Un daño regulatorio irreparable

La dieta impuesta por Enel a su cúpula española es una medida más en su plan de ajuste global que la multinacional italiana ha tenido que aplicar después de que el Gobierno haya adoptado medidas regulatorias que la han castigado de forma severa. La eléctrica calcula que el impacto de los cambios en la retribución de las distintas energías le está costando más de 1.800 millones, 1.200 por las decisiones tomadas en 2012 y 675 por las que determinóen julio.

Un coste que ha llevado a advertir al Ejecutivo que "los niveles de remuneración deben estar por encima de los costes de capital para crear valor para las inversiones". De lo contrario, "revisaremos nuestros planes de inversión a la baja y seguiremos adoptando acciones de reducción de costes", con el consiguiente efecto en “la calidad del servicio, el crecimiento y el empleo".

Así lo aseveró Andrea Brentan, que ya ha propuesto a los sindicatos una reducción del 10% de la plantilla, que afectará a 1.000 de los 10.000 empleados en España. También ha adoptado varios ERE en algunas de sus centrales de ciclo combinado, literalmente paradas por el sistema que premia el consumo de las renovables. Una preocupación que se resume en que Enel ha tenido que revisar a la baja el valor de su participación en Endesa en 2.400 millones.

Enel tiene entre ceja y ceja que su inversión en Endesa sea rentable pese a los cortocircuitos con los que el Gobierno los está castigando. Tras aplicar varios expedientes de regulación de empleo en algunas de sus plantas y un plan de bajas incentivadas para el 10% de su plantilla global, el grupo italiano ha optado ahora por suprimir algunos privilegios históricosque tenían los directivos de la filial española.

Endesa Enel
El redactor recomienda