I-Squared encarga a Goldman refinanciar y vender T-Solar por más de 1.500 millones

I-Squared, el fondo estadounidense que en 2017 compró los activos de energías renovables de la quebrada Isolux, ha encargado a Goldman Sachs la refinanciación de la deuda de T-Solar, uno de los mayores generadores de energía solar de España. El 'private equity' ya ha comenzado las negociaciones con la banca, liderada por BBVA, para alargar el vencimiento de los 1.000 millones de euros vinculados a sus 53 plantas termosolares repartidas por hasta seis países. Un paso previo a, según distintas fuentes, una venta por entre 1.500 y 2.000 millones de euros ('enterprise value', que incluye la deuda).

Así lo aseguran fuentes próximas a las conversaciones iniciadas por I-Squared, que está rentabilizando la inversión realizada con la compra del negocio renovable de Isolux a gran velocidad. Según consta en las cuentas anuales de 2018, el fondo estadounidense ya se ha repartido contra reservas un dividendo de 78 millones de euros tras multiplicar por tres su ebitda o beneficio bruto de explotación, hasta los 86 millones de euros.

Una cifra que crece a gran ritmo debido a la entrada en producción de muchos de los activos que están en desarrollo y que le permitirá alcanzar este año unos ingresos de 172 millones, frente a los 118 millones del pasado ejercicio. Por ello, I-Squared considera que ahora es el momento adecuado para pedir una mejora de las condiciones de sus créditos a los acreedores, a los que paga un tipo de interés medio superior al 4% y que en algunos casos rebasa el 5%.

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Agustín Marco

T-Solar adeuda 930 millones de euros a los bancos, la mayoría a BBVA, y tiene emitidos bonos por 101 millones de euros. En total, algo más de 1.000 millones, cuyo coste la compañía quiere rebajar, ya que el vencimiento medio de este pasivo finaliza en 2027. Fuentes financieras aseguran que, dado el buen rendimiento de las plantas solares, es uno de los segmentos dentro de las renovables que menos han sufrido las continuas reformas energéticas del Gobierno.

El pasado año, T-Solar cerró la compra del negocio termosolar de la sociedad que el empresario gallego Manuel Jove tenía junto con Ibereólica y el fondo Infrared. Una operación por la que se hizo con dos plantas de 100 MW cada una situadas en Andalucía y Extremadura, y cuya valoración ascendió a cerca de 500 millones de euros. Además, adquirió tres plantas situadas en Badajoz, Sevilla y Toledo de 5,6 MW a varios vendedores particulares.

Un sector caliente

En los últimos 12 meses, Grupo T-Solar aumentó su cartera en un 37%, refinanció una cartera de 34 megavatios en España con bonos de proyecto por importe de 118,4 millones de euros y diversificó su base de generación con una tecnología solar diferente. T-Solar tiene hoy en día presencia en seis países y cuenta con 392 MW de potencia repartidos en 53 plantas. Concretamente, en Italia, Estados Unidos, Perú, India y Japón, aunque la mayor parte de la cartera (267 MW) se sitúa en España.

En total, I-Squared ha destinado 1.900 millones de euros en desarrollar estos activos, según asegura en su página web corporativa. Fuentes financieras consideran que, dado que la mayoría de las plantas ya está en producción, la refinanciación que ahora se ha puesto en marcha es el paso previo a la venta de T-Solar, que podría alcanzar un valor superior a los 1.500 millones de euros.

Esta operación coincide en el tiempo con la venta de Fotowatio por parte del grupo árabe Abdul Latif —la compró en 2015—, por más de 1.500 millones, y el traspaso de una mayoría del capital de Zero-E, la empresa de renovables de ACS, que ha sido valorada en 2.000 millones. En julio, se cerró la compraventa del 50% de X-Elio por parte de Brookfield, por 500 millones, a KKR y la familia Riberas.