Así ha liquidado Airbus frentes judiciales por corrupción investigados en medio mundo

Aceptar un acuerdo por valor de 3.600 millones para acabar con tres investigaciones por corrupción en Reino Unido, Francia y EEUU relacionadas con su actividad comercial en medio mundo. Es lo que ha hecho Airbus esta semana, con el beneplácito de sendos tribunales en esos países según confirmó ayer la propia compañía. Pagos generalizados y no declarados de intermediarios que facilitaban la venta de productos del grupo, tanto aviones militares como civiles, están detrás de este escándalo que se arrastra desde hace década y media y ante el que el grupo había venido siendo tibio.

Reuters informó ayer de que contratos con Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, a quienes se ha vendido productos militares y civiles, están entre los investigados por los fiscales franceses, junto a otros en Corea del Sur, Taiwan, Vietnam, China, India, Japón, Turquía, México, Brasil, Colombia, Kuwait y Tailandia. Investigadores británicos, también según Reuters, añadieron acuerdos comerciales civiles entre los investigados por su parte con aerolíneas de Malasia, Sri Lanka, Taiwan e Indonesia. Y la venta de aviones militares (el C295 que se produce en España) a Ghana. Está incluido también el contrato de venta de 72 cazas Eurofighter a Arabia Saudí firmado en 2006, según fuentes cercanas a Airbus en España consultadas por El Confidencial.

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Carlos Hernanz

Airbus, en su tercer comunicado esta semana sobre este asunto, confirmó la firma de esos acuerdos con las autoridades anticorrupción de Francia y Reino Unido que suponen importes de 2.083 y 984 millones, respectivamente. En EEUU, el preacuerdo incluye al Departamento (ministerio) de Justicia y al de Estado (Exteriores) a los que abonará 526 y 9 millones, respectivamente. Estos acuerdos suponen que Airbus logra paralizar las investigaciones durante tres años en esos tres países, admitiendo además que una autoridad independiente audite desde Francia (su autoridad anticorrupción) su sistema de 'compliance' (cumplimiento normativo y ético). Si Airbus cumple los requisitos exigidos por esos tres países, a lo cual el grupo asegura estar comprometido, evitará que las investigaciones se reabran pasados esos tres años.

Fuentes consultadas por El Confidencial explican que Airbus venía usando desde hace décadas, y heredada de la estructura comercial de cada uno de los socios nacionales que se integraron en EADS (hoy Airbus) en 2000, una red de intermediarios para la venta de aviones civiles y militares. Este último mercado es nada transparente y las relaciones personales con altos mandos de los ejércitos clientes son clave. España, por ejemplo, tenía su red de intermediarios en Latinoamérica y parte de África, eliminados en 2017 precisamente por estos casos de corrupción ahora saldados. El caso en Ghana investigado en Reino Unido se referiría a la venta de tres aviones C295, que se ensamblan en Sevilla, entre 2011 y 2015 a este país. Esas ventas se dirigieron desde la división comercial que en esos años existía en España para los aviones de transporte militar, división que fue centralizada en Munich desde 2017.

Estos facilitadores de las ventas, externos a Airbus, recibían comisiones comerciales del grupo y su uso no era controlado suficientemente por la propia Airbus. Auditores internos detectaron estos pagos no justificados de los intermediarios a terceras personas o empresas a principios de esta década y se iniciaron las investigaciones.

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"En casi todos los contratos de Defensa hay pagos de comisiones, royalties, quizá una solución sería hacerlos transparentes, publicarlos todos mediante un acuerdo como el que existe en la industria petrolera", apunta uno de los expertos industriales consultados. Se refiere a la EITI, que agrupa a las principales petroleras mundiales y buena parte de los países clave en los que se extrae crudo. Guillaume Faury, presidente de Airbus, ha hecho en cualquier caso en menos de 10 meses en el cargo más y mucho más rápido para solventar estos casos que su antecesor, Tom Enders. Faury aseguró ayer, en la nota enviada por la tarde, que las "lecciones aprendidas" de este caso convierten a la empresa en un socio "confiable" a partir de ahora.

Las negociaciones estos últimos años para llegar a estos acuerdos, según otra de las fuentes consultadas por este diario, incluía inicialmente diferir los pagos en varios años. Faury ha rechazado esa opción y lo ha cargado todo de una vez y contra las cuentas de 2019. Las posibles pérdidas anuales que obtendrá el grupo llegan justo cuando su principal rival, Boeing, ha registrado también números rojos por primera vez desde 1997 por el coste del aterrizaje forzoso desde marzo de todos sus 737 MAX. Este hecho, junto a la suspensión anunciada en diciembre de la fabricación de este avión, han llevado a Boeing además a doblar el impacto estimado de esta crisis industrial a 18.000 millones de dólares.

EEUU entró en la investigación porque Airbus debe incluso avisar hasta de las negociaciones, aunque las ventas no se concreten

La investigación de Francia, sede central de Airbus, se abrió después de esa denuncia de la propia Airbus a las autoridades británicas de la SFO (Serious Fraud Office). Entonces, ¿de dónde procede la investigación de EEUU? La legislación de exportación de armas de este país se habría incumplido en contratos civiles, como Airbus precisó en la nota de ayer. "La ley americana obliga a Airbus a comunicar a las autoridades de Comercio americanas, o incluso al Pentágono según los casos, el mero establecimiento de negociaciones comerciales con un tercer país. Tienen por decirlo así un control previo de la labor comercial de Airbus para ver si el país en cuestión está o no en su lista negra de mercados vetados".

Junto a esa autorización para entablar contacto, está posteriormente la obtención de la propia licencia de exportación por el Departamento de Comercio o el Pentágono. Uno de los expertos consultados recuerda a este respecto: "España vendió a Venezuela 12 aviones C295 y C235 en 2005, y Airbus llegó a fabricar incluso los dos primeros del modelo C295 en tanto se tramitaba la licencia de exportación ya que usan sistemas estadounidenses. Finalmente, fue denegada en 2006 y hubo que reconducir esos aviones hacia otros clientes". La negativa de EEUU también afectó a buques militares que iba a producir Navantia.

Otro ejemplo de veto preventivo de EEUU sufrido por Airbus es el cierre del mercado chino a la venta del avión de transporte A400M. Igualmente, tras imponer Alemania restricciones a la venta de armas a Arabia Saudí desde hace dos años por la implicación de este país en la guerra de Yemen, Airbus ha dejado en suspenso la venta de entre 10 y 15 aviones A400M a este país. Hubiera sido en 2018 la primera venta a un nuevo cliente desde que el programa se lanzó en 2003. Alberto Gutiérrez, presidente de Airbus España, señaló en una reciente comida con la prensa en Madrid que, como grupo europeo, Airbus respetaba el marco legal y la sensibilidad de los gobiernos del continente aunque les perjudicara en momentos concretos.

Junto a los tres casos cerrados, queda abierta otra investigación por corrupción en la venta de Eurofighter a Austria en 2003. Fue Alemania el país Airbus que lideró la venta por las relaciones muy cercanas entre ambos países. Un primer acuerdo sirvió para cerrar la rama alemana de esta investigación en 2018 mediante un pago de 81 millones acordado con la fiscalía de Munich. La investigación de la fiscalía austríaca sigue abierta. Una de las fuentes consultadas señala que este caso determinó que en 2019 no solo saliera del grupo el presidente Tom Enders, sino también el director financiero, Harald Wilhem (hoy jefe financiero de Daimler).