¿Estaba al tanto Galán de los pagos a Villarejo? "Rotundamente sí"

La declaración este miércoles de José Antonio del Olmo, ex responsable de visar las facturas en Iberdrola, ha sacudido aún más si cabe la investigación de la Audiencia Nacional sobre los presuntos pagos irregulares de la compañía eléctrica a José Manuel Villarejo. Su comparecencia de este miércoles ante el juez Manuel García-Castellón, que dirige el caso, ha chocado de frente con la línea de defensa del grupo dirigido por Ignacio Sánchez Galán, al que apuntó directamente en su respuesta a las preguntas muy concretas del magistrado.

Según fuentes jurídicas, García-Castellón inquirió a Del Olmo si Galán estaba al corriente de los métodos utilizados por Iberdrola para abonar las facturas a Villarejo. Y Del Olmo, que hasta la fecha había ido en tres ocasiones a la Audiencia Nacional como testigo, respondió de forma instantánea con un "rotundamente sí". El directivo apuntó a lo más alto de la compañía. "En Iberdrola, no se mueve nada si no lo autoriza Galán", respondió Del Olmo a preguntas muy orientadas por García-Castellón.

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La declaración había levantado mucha expectación en la cúpula de Iberdrola, que llegó a enviar un comunicado interno a los empleados para anunciar que Del Olmo había sido declarado investigado, tras las acusaciones de Iberdrola y de sus tres directivos imputados. En sus declaraciones de la primera semana de noviembre, estos aseguraron que ese documento fue elaborado 'ad hoc' para eximirle de cualquier responsabilidad.

Pese a este cambio de rol —de testigo a imputado—, García-Castellón ofreció total cobertura a Del Olmo. "Señor Del Olmo, sabemos que su hija ha sido despedida de Iberdrola", en referencia a la información publicada por El Confidencial. "Si siente cualquier tipo de presión o se siente amenazado, por favor, no dude en comunicárselo a este juzgado", le señaló el magistrado, ante la mirada de los abogados de Iberdrola, que antes escucharon cómo el responsable de firmar las facturas había involucrado en esta práctica tanto a Galán como a su mano derecha.

Del Olmo ratificó de nuevo la veracidad del informe interno publicado en exclusiva por este medio el 4 y 5 de diciembre de 2019, en que el directivo detallaba la presunta trama de irregularidades para pagar a Villarejo a través de empresas pantalla, como Castellana de Seguridad. Además, el contable argumentó que rubricó las facturas por orden de sus superiores, desde José Luis San Pedro, número dos de Iberdrola, hasta Fernando Bequer, director general del grupo.

Según estas fuentes, el ahora investigado reveló que, tras la publicación del citado informe, Juan Carlos Rebollo y José Luis San Pedro se reunieron con él para que se retractase del contenido y que, durante ese encuentro, Sánchez Galán, presidente y número uno de la compañía, y el director de Servicios Jurídicos, Santiago Martínez Garrido, actual director jurídico, llamaron por teléfono a Rebollo, actual jefe de Administración y Control, para saber cómo había ido el encuentro y si había accedido a desmentir el contenido del informe.

Además de no acceder a esta demanda, Del Olmo citó como conocedores del caso a Sánchez Galán, a Julián Martínez Simancas, exdirector del Área Jurídica, secretario actual del consejo de administración y estratega jefe del presidente, y a Rafael Orbegozo, jefe de gabinete de Presidencia que también autorizó los pagos a Villarejo por el espionaje a Florentino Pérez, presidente de ACS y del Real Madrid, tal y como informó este medio.

El millonario contrato de Kroll

Durante el interrogatorio, García-Castellón pidió a Del Olmo que le aportase, si lo tenía, el contrato de Kroll, la mayor agencia de servicios de inteligencia del mundo. Iberdrola llegó a pagar cerca de 10 millones de euros a esta compañía. La eléctrica ha admitido el desembolso de esta cantidad a favor de Kroll, rebautizada como K2, si bien en el sumario de la denominada pieza número 17 del caso Tándem tan solo aparecen facturas por 4,9 millones que coinciden en el tiempo con la investigación a Florentino Pérez.

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Estos pagos fueron autorizados por la dirección de Relaciones Institucionales de Iberdrola, dirigida por Becker, hoy consejero de El Corte Inglés, y por la secretaria general, liderada por Martínez Simancas, El visado de parte de estas últimas facturas lo hizo Jesús Pernía, hombre de confianza de Simancas y persona encargada del montaje y desarrollo de las juntas de accionistas, que se jubiló años atrás y que posteriormente fue de nuevo contratado por la compañía.

Iberdrola siempre ha defendido la legalidad de la contratación de Villarejo, al que reconoce haber abonado 17 facturas, 14 de ellas sin pedido formal y fuera del sistema de registro, por un total de 1,2 millones entre 2004 y 2017. La eléctrica, que defiende haber actuado dentro de la legalidad, se ha querellado contra Del Olmo por falsedad documental y por revelación de datos confidenciales, como las minutas que la compañía pagaba a los miembros de sus consejos asesores en varias comunidades autónomas de España donde tenía presencia y actividad. Entre 20.000 y 40.000 euros por cada sesión.