Air Europa nombra al CEO que pide la SEPI: cobrará más que el tope del sector público

El consejo de Air Europa se reúne hoy para aprobar el nombramiento de Valentín Lago como nuevo consejero delegado a propuesta de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Su designación, un mes y medio después de su anuncio oficial, el pasado 10 de febrero, se produce tras intensas conversaciones entre la aerolínea de la familia Hidalgo y el ente público, que en noviembre le concedió una ayuda de hasta 475 millones de euros. La demora se debe al salario a percibir por el nuevo CEO, que supera lo establecido en las empresas auxiliadas por el Estado por la crisis del covid-19.

Según fuentes próximas a la SEPI, Lago va a cobrar unos 300.000 euros por dirigir Air Europa mientras Iberia consigue las autorizaciones de la Comisión Europea para comprar por unos 500 millones la compañía fundada por Juan José Hidalgo. Un visto bueno que se espera para el tercer trimestre de este año, por lo que Lago estará presuntamente en el cargo apenas cinco meses.

Pese a este corto espacio de tiempo, el contrato ha supuesto un duro tira y afloja con la familia Hidalgo debido a las pretensiones económicas de Lago, que antes trabajó para Iberia y Vueling, ambas del grupo IAG. Según fuentes cercanas al organismo público, el directivo exigió en un primer momento un salario de 565.000 euros por año. Una cantidad que excedía por más del doble el límite de 210.000 euros que la propia SEPI establece como remuneración máxima (fijo más variable) a los ejecutivos del sector público estatal.

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Posteriormente, tras la negativa inicial de los Hidalgo, que rechazaron pagar dicha cantidad para no incumplir la norma exigida por la SEPI, Lago rebajó sus pretensiones a unos 360.000 euros al año. Finalmente, según fuentes cercanas al organismo público, el acuerdo se ha cerrado cerca de los 300.000 euros, incluidos los pagos en metálico y en especie. La sociedad pública no ha explicado cómo se justifica este pago a Lago, al que se le vincula con el ministro de Transportes, José Luis Ábalos.

Su contrato no incluye, por contra, un blindaje, por lo que se entiende que, dentro de unos seis meses, cuando Iberia pueda tomar los mandos de Air Europa, Lago tendrá que dejar su cargo. Especialmente porque el nuevo consejero delegado recibió una indemnización millonaria cuando en febrero de 2019 dejó sus responsabilidades en el Grupo IAG.

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Su designación, salvo medida en contra, se aprobará hoy en la reunión del consejo de administración de Air Europa, donde el Estado tendrá tres consejeros y los Hidalgo, dos. La SEPI ya nombró a finales de diciembre de 2020 a Juan Bujía y José Ángel Partearroyo como administradores de la aerolínea para supervisar la evolución de la compañía tras autorizar a principios de noviembre la ayuda de 475 millones. El organismo dependiente del Ministerio de Hacienda le concedió en una primera fase 240 millones de euros. El siguiente cheque, por 100 millones, debía haber sido entregado el pasado mes de febrero, justo cuando se anunció el nombre de Valentín Lago.

100 millones en juego

Pero el desacuerdo entre las dos partes por el sueldo del nuevo consejero delegado bloqueó la nueva inyección de dinero por parte de la SEPI. Una decisión que ha provocado graves tensiones de tesorería en Air Europa, que ha sufrido varias amenazas de embargos de las empresas —conocidas como lesores— propietarias de los aviones que alquila para sus operaciones. La compañía ha incurrido en impagos millonarios que se han traducido en advertencias por escrito de retención de las aeronaves en los aeropuertos con notario de por medio.

El nombramiento final de Lago supondrá, 'de facto', según las mismas fuentes, la concesión de los siguientes 100 millones de euros. Un dinero esencial para Air Europa que está facturando cerca de un 30% de lo que sería en una temporada normal de Semana Santa, pero que al menos le ha permitido abonar las nóminas de los cerca de 5.000 empleados.