IAG anuncia unas pérdidas de 1.068 M y se abstiene de dar previsiones para 2021

IAG sigue atrapada en las turbulencias del coronavirus. El grupo de aerolíneas ha presentado este viernes unos resultados del primer trimestre que arrojan unas pérdidas de 1.068 millones de euros, respecto a los 1.860 millones del mismo periodo del año pasado. En un contexto en el que la cotizada seguía operando (a cierre de marzo) con un 19,6% de la capacidad de 2019 por la pandemia del coronavirus, IAG ha preferido no dar estimaciones de beneficio para 2021. La firma se deja en torno a un 1% en los primeros movimientos bursátiles de este viernes, a la vez que gana un 33% en bolsa este 2020.

Las pérdidas de las operaciones antes de partidas excepcionales fueron de 1.135 millones de euros (en comparación con los 535 millones del primer trimestre de 2020) pero estuvieron en línea con el consenso de analistas recogido por Bloomberg (1.130 millones). Los planes de capacidad de transporte de pasajeros para el segundo trimestre son de alrededor del 25% de la capacidad de 2019, aunque IAG subraya en el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que estos planes "siguen siendo inciertos y estando sujetos a revisión".

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La empresa reitera la cifra de liquidez de 10.500 millones de euros a cierre de marzo, números que ya reveló hace más de un mes cuando llevó a cabo operaciones de emisión de deuda y de ampliación de las líneas de crédito. Este viernes, El Confidencial avanza que sus marcas españolas Iberia y Vueling están negociando un nuevo balón de oxígeno con la banca y el Estado para garantizar su viabilidad. Las aerolíneas han pedido alargar un año la carencia y tres la amortización del préstamo de 1.000 millones de euros que recibieron hace justo un año para hacer frente a la pandemia. En este entorno, la deuda neta del grupo ha subido un 18,5% hasta los 11.564 millones de euros.

El consumo de caja semanal se redujo hasta los 175 millones de euros en el primer trimestre del año, un dato que se compara con los 215 millones que la empresa estaba quemando cada semana en el cuarto trimestre de 2020. De todas formas, la compañía espera que este parámetro se acelere de nuevo hasta los 200 millones de euros en el segundo trimestre de 2021.

Todo en un contexto en el que los ingresos se han desplomado un 78,9% en este primer trimestre respecto al de 2020, alcanzando ahora los 968 millones de euros. No en vano, en el arranque de año de 2020 los vuelos todavía estuvieron operando con normalidad hasta que en marzo se empezaron a decretar las medidas de contención de la pandemia del coronavirus. Asimismo, los ingresos por pasajes de viajeros se han reducido en un 88,4% hasta los 459 millones de euros, mientras que los que vienen de viajes de carga se han disparado un 42,3% interanual hasta los 350 millones. El grupo operó en este trimestre con una capacidad un 21,9% menor a la de 2020.

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Este trimestre, el grupo ha reducido los gastos totales de las operaciones en un 68,4% respecto al mismo periodo del año anterior, dejándolos en 2.036 millones de euros. Los gastos de personal, por ejemplo, se han desplomado un 49,6% hasta los 622 millones de euros, mientras que las tasas de aterrizaje y de navegción han caído un 73,5% hasta los 173 millones.

En las cuentas, el consejero delegado de IAG, Luis Gallego, ha pedido a los gobiernos "corredores de viaje sin restricciones entre países con programas de vacunación exitosos y protocolos de prueba eficaces, como Reino Unido y Estados Unidos" o "tests asequibles, simples y proporcionados para reemplazar las cuarentenas y costosas y numerosas pruebas" y "certificados digitales para la documentación de test y vacunación con el fin de facilitar los viajes internacionales".

Por otro lado, IAG también ha optado en reducir el efecto de la volatilidad de los precios de las materias primas contratando coberturas para las compras de combustible en función de los niveles de capacidad previstos, revisando esta política en mayo.