CaixaBank evita guerras de pasivo: "Seremos los últimos en pagar por los depósitos"

CaixaBank, el mayor banco minorista de España, se 'da un mus' en la incipiente guerra de depósitos. Al menos en su primera fase, que han abierto entidades como Deutsche Bank y EBN. La entidad catalana señaló en su plan estratégico presentado este martes que no solo no va a entrar en esta guerra, sino que será el último banco en España en pagar por los depósitos.

Así lo expuso su director financiero, Javier Pano, en una reunión con analistas: "Vamos a ser el último banco de la ciudad en empezar a pagar por los depósitos. ¿Por qué? Porque tenemos una gran posición de liquidez y no necesitamos pagar por los depósitos. Y por encima, como sabes, esta gran bolsa de depósitos procede de clientes principalmente tradicionales que tienen todos sus negocios bancarios con nosotros".

Esta posición tiene una gran importancia, ya que tras la fusión con Bankia, CaixaBank controla uno de cada cuatro depósitos en España, un 25,1%. En productos a largo plazo, su cuota es incluso mayor, del 29,6%, y en nóminas, del 37%.

TE PUEDE INTERESAR

CaixaBank se dispara un 5% en bolsa: promete rentabilidad del 12% y 9.000 M a sus accionistas

J. Zuloaga

La remontada del euríbor (del -0,5% al 0,2% este año) y las posibles subidas de tipos han hecho que CaixaBank replantee un plan estratégico más optimista, en el que espera llegar a obtener una rentabilidad (RoTE) del 12%. Este efecto hace que todos los créditos a tipos variables se 'reprecien', mientras que a los depósitos llega con retardo. Algo que durará más de lo previsto, según las palabras de Pano.

Plan para retener clientes

CaixaBank cuenta con nueve millones de nóminas y pensiones domiciliadas, que ingresan mensualmente 14.000 millones y realizan 5,2 millones de pagos diarios. Por ello, para la entidad es clave mantener esta base para tener éxito en el plan estratégico.

Preguntado por ello en la rueda de prensa posterior a la conferencia de analistas, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, señaló que "vamos a una visión cliente, si nos piden determinadas cosas les daremos una respuesta adecuada. Estamos anticipando que hasta el 35% de nuestra base de clientes acabará cobrando intereses, lo que dará para retenerlos".

La entidad explica en su presentación que un 60% de sus depósitos es de clientes particulares vinculados, 10 millones de usuarios con un saldo medio de 20.000 euros. En este sentido, CaixaBank prevé que un 30-35% de los clientes cobren por estos productos en 2024 si el euríbor llega al 1,55%, y que solo lo hagan un 20-25% si este índice se queda en el 0,8%.

Gracias a ello, la entidad espera mejorar su margen de clientes (interés medio que cobra por los créditos menos el que paga por los depósitos) de los 166 puntos básicos actuales a 250.

Foco en las hipotecas

Al margen de esta guerra en la que no prevé entrar, CaixaBank sí que confía en un flujo cada vez mayor de ahorro a productos como los fondos, los seguros y los planes de pensiones, en los que Gortázar ve gran margen de mejora tanto a nivel mercado como en la antigua red de Bankia.

La entidad también anunció este martes su intención de crecer a un gran ritmo en el negocio hipotecario, en el que se ha quedado atrás en los últimos años a pesar de su cuota de mercado del 25%. CaixaBank da actualmente un 15% de las nuevas hipotecas y prevé elevar este porcentaje hasta el 20%. Además, casi todos los créditos que firma actualmente —un 90%— son a tipo fijo.