Gutiérrez Orrantia acepta la contraoferta de Citi y rechaza ser CEO de Naturgy

La crisis de poder en el seno de la mayor compañía gasista de España abre hoy un nuevo capítulo. Nacho Gutiérrez-Orrantia, favorito para ocupar el puesto de consejero delegado y asumir parte del poder ejecutivo que ahora asume el presidente Francisco Reynés, ha decidido quedarse en Citi, donde ahora es codirector de banca de inversión de Citi para Europa, Oriente Medio y África,

Así lo ha publicado este mediodía la agencia de noticias Bloomberg y ha confirmado El Confidencial. Previamente, este periódico ya había publicado que el banco estadounidense había lanzado una contraoferta a su ejecutivo para tratar de retenerle. Esta noticia llega justo el día en el que el Consejo de Administración de Naturgy iba a debatir la creación del puesto de CEO, si bien fuentes conocedoras del proceso aseguraron a este diario que hoy no se iba a adoptar una decisión formal. Isidro Fainé, presidente del holding de inversiones Criteria Caixa, máximo accionista de la entidad, ralentizó todo el proceso ayer al emitir un comunicado mostrando su apoyo a la gestión de Reynés.

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Fuentes conocedoras de la situación en el banco afirmaban ayer a El Confidencial que Citi está haciendo todo lo posible para que Gutiérrez Orrantia se quede en la entidad, por lo que le han presentado una oferta para mejorar su situación profesional en el grupo estadounidense. En Citi están muy satisfechos con su trabajo y con cómo ha resuelto las implicaciones para su negocio de la crisis con el mercado ruso tras la invasión de Ucrania. Desde la entidad americana, aprecian que Criteria, GIP y CVC, clientes suyos, hayan valorado las capacidades de su banquero, pero esperan que siga en la institución muchos años más.

Orrantia, de 50 años y residente en Londres desde que fue ascendido desde el cuartel general de Madrid, dijo, desde el primer momento que salió su nombre a la palestra, que estaba muy feliz en la entidad y que las informaciones periodísticas eran "rumorología", como la que le vinculó al cargo de CEO de Cellnex hace unos meses. Lo cierto es que Orrantia, que ya fue tanteado por Naturgy hace tres años para el puesto de director general corporativo, cambió este lunes su foto de perfil de WhatsApp. El banquero de 50 años reemplazó una viñeta de un conocido cómic por una imagen de la sede de Citi en Londres, en la que destaca con nitidez el logo del banco.

El movimiento de Fainé

Criteria Caixa aseguró ayer que, como "primer accionista de Naturgy, ratifica su confianza en el equipo gestor de la compañía encabezado por su presidente, Francisco Reynés, y apoyará sus propuestas dirigidas a poder afrontar los importantes retos de la compañía en los próximos años". Un mensaje escueto con el que Fainé quiso aplacar cualquier intento de GIP, CVC e IFM, el resto de accionistas relevantes de la gasista, de imponer un consejero delegado que pusiera en duda la capacidad de mando del actual primer ejecutivo en la reunión que hoy celebra el consejo de administración.

El comunicado ralentiza unos tiempos que se aceleraron la semana pasada, cuando desde el holding inversor se distribuyó la versión de que estaban de acuerdo con la propuesta de GIP, CVC e IFM de nombrar a un consejero delegado con capacidad de gestión. Hasta el punto de que fue el propio Fainé el que se implicó personalmente en la operación y habló con el principal candidato para convencerle, pese a que el veterano banquero, si bien es presidente de honor del grupo energético, no tiene responsabilidad ejecutiva en su consejo de administración.

GIP y CVC llevan invertidos en Naturgy siete y cinco años, respectivamente, y ya han deslizado en círculos financieros su intención de desprenderse de sus respectivos paquetes del 20%. El fondo estadounidense y el luxemburgués pagaron cada uno de ellos 3.800 millones por esas participaciones, a las que les han sacado una rentabilidad latente de más del 50%, dividendos incluidos. Aunque todo esto se ha producido bajo la gestión de Reynés, los inversores consideran que ya se ha cumplido el ciclo inversor y es hora de buscar una salida.

El proyecto Géminis que Naturgy aprobó a comienzos de 2022, justo antes de la invasión rusa de Ucrania, pretendía precisamente ofrecer una venta de salida a sus grandes accionistas. Pero el inicio de la guerra movió todas las piezas del tablero geopolítico, y el Gobierno aseguró que no era el momento de plantear una operación como esa, dejando el plan en una vía muerta de facto. Esto ha acabado impacientando a los grandes accionistas, que plantearon la designación de un puesto ejecutivo con un perfil especializado en M&A para poder cerrar su desinversión.