Iberdrola revela que las tasas impuestas por el Gobierno se disparan un 138% (800 M) en 2023

Iberdrola ha registrado un aumento del 138% en el pago de tributos y otras tasas creadas por el Gobierno para el sector eléctrico en España en la primera mitad de 2023 respecto al mismo periodo de 2022. Según detalla la propia compañía, dichas tasas han pasado de 334 a 794 millones del pasado ejercicio a este, lo que supone más que duplicar el pago de estos tributos.

La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán alude en primer lugar al pago del nuevo gravamen temporal impuesto a partir del pasado 1 de enero de 2023 a energéticas y bancos. Esto le ha supuesto el abono a las arcas públicas de 216 millones adicionales respecto al ejercicio anterior. El Ejecutivo decidió aplicar esta nueva tasa por lo que entiende son beneficios caídos del cielo derivados de la subida de precios de la energía provocada por la invasión de Rusia a Ucrania. La compañía ya ha anunciado que ha recurrido este tributo por "vicios de inconstitucionalidad y contravención del Reglamento (UE)".

Iberdrola ha reportado en España un beneficio en la primera mitad de este año de casi 1.500 millones de euros, frente a los algo más de 950 millones del pasado año. Es decir, un 57% más. El ebitda en territorio nacional pasó de 1.764 millones de euros de enero a junio de 2022 a 2.890 en 2023 (+63%).

Pero el pago del nuevo gravamen no es la única cuestión que subraya la eléctrica vasca. La cotizada, que ha declinado hacer comentarios, detalla un coste de 133 millones de euros por el denominado tope al gas (cap del gas). Se trata de otra reforma levantada por el Ministerio para la Transición Ecológica en plena escalada de precios que obliga a las eléctricas a devolver lo ganado al vender su producción por encima de 67 euros por MWh en el mercado mayorista. De nuevo, la justificación del departamento que lidera la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, fue que las compañías estaban generando unos beneficios extraordinarios y caídos del cielo (windfall profits) por la subida exponencial de los precios del gas como consecuencia de la guerra.

En este sentido, cabe destacar que las eléctricas advertían, en plena tramitación del impuesto a los beneficios extraordinarios, que en su caso no existían tales ganancias, dado que ya estaban limitadas por esa barrera del cap del gas. Un argumento que en el sector creen que utilizarán las empresas en sus recursos judiciales.

Al margen de lo anterior, la multinacional también justifica el fuerte incremento de esta partida de tributos por otros costes como el bono social, que tras ser reformado por enésima vez tras decaer en los tribunales en 2022 le ha supuesto un coste de 122 millones de euros de enero a junio de este año. También alude a la reintroducción del canon hidráulico, que le ha supuesto un coste de 87 millones de euros. También en su nueva formulación, tras un fallo judicial sobre la normativa anterior.

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Cotizalia / Agencias Europa Press

Iberdrola añade también en esta partida los impuestos específicos a las nucleares. Por un lado, 60 millones de euros en el primer semestre por el impuesto a la producción de combustible nuclear gastado que se extraiga definitivamente del núcleo de las centrales. Por otro lado, 104 millones hasta junio por los importes necesarios para la gestión de residuos radiactivos y combustible nuclear.

En la pasada presentación de resultados de Iberdrola a finales de julio, el presidente de la eléctrica dijo que él se sentiría más seguro si se mantuvieran en funcionamiento las nucleares más allá del calendario previsto, tal y como proponía el programa del PP para las elecciones del 23 de julio. Fuentes del sector señalan que dicha ampliación solo se haría bajo el compromiso del Ejecutivo de eliminar varias tasas a la nuclear.

Los resultados electorales han dejado un escenario endiablado, donde el candidato popular, Alberto Núñez Feijóo, por ahora no tiene los apoyos suficientes para gobernar. Hasta el momento, se ha encontrado con la negativa de apoyar su investidura del PNV, partido que históricamente ha defendido los postulados regulatorios proclives a Iberdrola, primer contribuyente de la Hacienda vasca.

¿Recuperará estas tasas?

Pese a la subida de tasas pagadas por Iberdrola, el resultado final del devengo a las arcas públicas no es definitivo, dado que las compañías eléctricas recurren casi todas las medidas en los tribunales, en determinadas ocasiones con éxito.

La compañía se apuntó en 2021 un extraordinario de 826 millones de euros tras ganar una sentencia en el Tribunal Supremo, precisamente porque consideró que el pago del canon hidráulico desde 2013 no se ajustaba a derecho. Por otro lado, el alto tribunal acaba de instar al Ministerio para la Transición Ecológica a devolver 320 millones de euros a Iberdrola, Endesa y Naturgy por discrepancias en el pago del bono social desde 2014.