Vicens Vives reduce capital para lograr salud financiera tras años de pérdidas millonarias

La situación financiera de Vicens Vives es delicada. La empresa editorial, que obtuvo un préstamo de 16,2 millones de Cofides el curso pasado, se ha visto obligada a reducir su capital social para restablecer su equilibrio financiero tras años de pérdidas millonarias. En concreto, el grupo ha reducido capital en 5,63 millones para equilibrar su capital y su patrimonio neto.

Así, la junta de accionistas de Editorial Vicens Vives se reunió, con carácter extraordinario, para aprobar esta reducción de capital, que asciende a 5.631.670,5 euros, mediante la amortización de 93.705 acciones nominativas de 60,1 euros de valor nominal cada una de ellas, "con la finalidad de compensar parcialmente las pérdidas de la sociedad que quedaron pendientes", como era voluntad de su junta general.

El grupo editorial está dirigido por Jaume Vicens Barceló, cuenta con una plantilla superior a los 350 trabajadores, facturó cerca de 30 millones y arrojó pérdidas de 2,2 millones en 2022. Cifras muy similares a las del año anterior y notablemente mejores que las de 2020, año en que el impacto de la pandemia hizo que perdiera más de 10,8 millones de euros.

Esta reducción de capital se ha producido poco más de un año después de que se aprobara la solicitud presentada por Vicens Vives al Fondo de Recapitalización de empresas afectadas por el covid (Fonrec), gestionado por Cofides, y que permitió a la compañía obtener una financiación de 16,2 millones de euros: 13,4 millones a través de un préstamo participativo y otro ordinario de 2,8 millones de euros. Algo que, por aquel entonces, sirvió para restablecer el desequilibrio patrimonial y reforzar su solvencia y liquidez, puesto que el periodo de carencia era hasta noviembre de 2024.

Cuenta con una plantilla superior a los 350 trabajadores, facturó cerca de 30 millones y arrojó pérdidas de 2,2 millones en 2022

Así, y al no tener obligaciones de atender vencimientos de deuda hasta dicha fecha, los administradores consideraban que disponían de los mecanismos suficientes para recuperar este deterioro, mejorar su capacidad financiera y evitar el desequilibrio patrimonial, pero la realidad es que solo han tardado un año en tener que realizar otra operación financiera. Desde la propia Vicens Vives señalan a El Confidencial que la reducción de capital es una de las medidas que han llevado a cabo, aunque habrá más. "La compañía está estudiando diferentes opciones para adaptarse a las necesidades actuales del mercado y mantener su competitividad", destacan.

Todo ello, tras arrojar unas pérdidas próximas a 25 millones en el último lustro. Solo en 2020, año de la irrupción del covid a nivel mundial, los números rojos estuvieron ligeramente por encima de los 11 millones de euros, y su patrimonio neto fue negativo en casi 11 millones a cierre de 2022. No obstante, el impacto de la pandemia ha provocado cambios legislativos a nivel empresarial, ya que la Ley 3/2020, de 18 de septiembre, de medidas organizativas para hacer frente al covid, establece que, a efectos de determinar la concurrencia de la causa de disolución prevista en el artículo 363.1.e) del texto refundido de la Ley de Sociedades de Capital, no se tomarán en consideración las pérdidas de 2020 y 2021.

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Carlos Rodríguez

La editorial atraviesa por un momento delicado en sus más de 60 años de vida. Fundada en 1961 por Roser Rahola de Espona y Pere Vicens Rahola, viuda y primogénito de Jaume Vicens Vives, considerado uno de los mejores historiadores españoles del siglo XX, logró dar el salto internacional en la década de los noventa al expandirse por Colombia, México, Chile o Perú, países en los que sigue presente. Veinte años después, llegaría su transformación digital con el lanzamiento de su plataforma educativa propia: Edubook.