Los avales del covid cuestan ya 700 millones al Estado tras un repunte de morosidad

La banca registra ya las primeras señales de morosidad empresarial, con un coste millonario para el Estado. El año 2023 fue el de los primeros grandes impagos de las líneas ICO (Instituto de Crédito Oficial), con las que la banca regó a la economía durante el covid. La morosidad de estas financiaciones se duplicó durante el año pasado, del 4,1% al 8,2% (con datos de junio de 2023), algo cuyo efecto se ha empezado a notar en el ICO.

De este modo, el organismo público ha cubierto ya pérdidas por valor de 700 millones de euros con cargo a estos avales, con datos de septiembre del año pasado. Lo ha hecho para cubrir el agujero que han dejado los primeros créditos ICO con problemas de pago, cuyo valor total ascendía a 3.538 millones, tras un crecimiento de más de 1.000 millones (un 41%) entre marzo y septiembre.

El ICO destaca en su último informe que la banca le ha pagado ya comisiones cercanas a los 2.000 millones por los avales desde que estos fueron concedidos, de modo que el saldo neto para el Estado sería positivo. También destaca que la morosidad de estas líneas es del 2,3%, ya que mide los impagos sobre el total de las líneas puestas en circulación en 2020 y 2021, por valor de 140.000 millones. El 8,2% declarado por el Banco de España es sobre el saldo vivo de préstamos ICO covid.

Como explica el supervisor español, parte del aumento de esta ratio se debe a las amortizaciones de estos créditos, sin este efecto la tasa de impagos hubiera subido del 4,1% al 6,5%.

TE PUEDE INTERESAR

La morosidad de la banca sube por tercer mes consecutivo hasta el 3,6%

J. Z.

Muchas pymes, autónomos y grandes empresas solicitaron estas líneas en pleno confinamiento, ante el riesgo de sufrir tensiones de caja. Y un elevado número de ellos devolvieron el dinero de forma anticipada al recuperar su actividad. Por ello, las fuentes consultadas sostienen que lo que queda a la banca en estas líneas es la parte más complicada. De ahí que se espere que la factura para el Estado siga aumentando en los próximos trimestres.

Estas líneas se concedieron con un aval medio del 75% a favor de los bancos, que cubría el ICO. De este modo, uno de cada cuatro euros de impagos en estos créditos es cubierto por las entidades y los otros tres por el Estado. Se hizo así para garantizar que las entidades no cerraban el grifo del crédito a las empresas, en medio del confinamiento.

Balances bancarios

Por ello, este repunte de la morosidad también se ha ido reflejando en los balances de los bancos durante los últimos meses. Por ejemplo, Bankinter vio dispararse la morosidad de los créditos ICO del 3,7% al 8,5% el año pasado, con un repunte también de los créditos bajo vigilancia, del 8,8% al 12,1%. En el caso de Unicaja, la morosidad está muy por encima, en el 18%, aunque el aumento se ha debido sobre todo por la reducción del saldo total.

En el caso de CaixaBank, da menos detalles que otros competidores. Entre ellos que la cartera de préstamos ICO covid se redujo de 16.800 a 11.400 millones en 2023, y que la mayor parte de ellos están devolviendo principal regularmente. Su morosidad se sitúa en el 4,4%.