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Félix Revuelta (Naturhouse): "La mujer del presidente no debe dirigirse ni contratar con empresarios"
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Félix Revuelta (Naturhouse): "La mujer del presidente no debe dirigirse ni contratar con empresarios"

El propietario de Naturhouse, del Logroñés y promotor de Sociedad Civil Catalana, presenta un libro que resume su vida y defiende el fracaso como paso necesario para llegar al éxito

Foto: Félix Revuelta en la presentación de su libro en la Fundación Cajasol de Sevilla.
Félix Revuelta en la presentación de su libro en la Fundación Cajasol de Sevilla.
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Félix Revuelta es uno de los hombres más ricos de España (con una fortuna valorada en unos 140 millones de euros) y a sus 73 años saborea el éxito personal y profesional. Pero ha querido que su biografía esté protagonizada por sus tropiezos. Así se lo encargó al periodista malagueño Pedro Luis Gómez, tras una entrevista radiofónica en Canal Sur, que le hizo recapacitar en un momento muy complicado de su vida. Acababa de fallecer su mujer, Luysa, el gran amor de su vida.

Un año después ha visto la luz el libro El fracaso es el principio del éxito, que edita Deusto con epílogo de Pedro J. Ramírez. La obra repasa su vida desde sus inicios en una familia muy humilde —menor de tres hermanos— que creció en Logroño estudiando en los Escolapios con una beca, un joven al que se le daban muy bien las matemáticas y que se metió a Guardia Civil hasta que se dio cuenta de que su destino era "todo por la Patria" pero fuera de muros del Cuartel.

PREGUNTA. Deje que empiece preguntándole por su último fracaso. La UD Logroñés no ha conseguido el ascenso a Primera. ¿Seguirá apoyando este proyecto hasta conseguir el ansiado éxito?

RESPUESTA. Claro que sí. Lo del partido de la pasada semana para mí fue una gran decepción, y también para los aficionados. Allí había 14.000 personas esperando celebrar ese triunfo y ver a su equipo en Primera. Pero sabemos que en el fútbol, como en la vida, a veces se gana y a veces se pierde, y hay que saber estar a las duras y a las maduras. Y por eso, al día siguiente me levanté y convoqué a la gente para decirle que nos poníamos a trabajar para conseguirlo el próximo año. Y estoy seguro de que será así.

P. La pasada semana se aprobó la Ley de Amnistía para los independentistas catalanes, que le he escuchado decir que es un "fracaso del Estado". ¿Cree que también es solo un escalón hasta conseguir el éxito allí?

R. Hombre, yo espero que sí. Hacer una amnistía general a este tipo de personas que estaban queriendo separar Cataluña del Estado; que, de hecho, hicieron un complot y fomentaron una agitación; que la Policía lo pasó muy mal y mucha gente con ellos… Pues yo creo que no es de recibo que un presidente del Gobierno, por querer seguir ahí, se baje los pantalones y apruebe una amnistía así. Además, no sé si los jueces se lo van a admitir, ni tampoco Bruselas… Creo que no deberían, porque, si no, mañana cualquiera puede hacer lo mismo o cualquier otra cosa que esté penada. Mañana puede empezar otra revolución con esta misma esperanza de que no tendrá consecuencias penales para los que la hagan. Todo esto ha sido un error. Pero el presidente que tenemos hace lo que sea por gobernar y por eso este lío que tenemos.

placeholder Antonio Sanz saluda al Félix Revuelta, ante la consejera de Economía, Carolina España, y el autor del libro, Pedro Luis Gómez. (Europa Press)
Antonio Sanz saluda al Félix Revuelta, ante la consejera de Economía, Carolina España, y el autor del libro, Pedro Luis Gómez. (Europa Press)

P. ¿Qué le llevó a usted a impulsar el movimiento de Sociedad Civil Catalana frente a los independentistas en pleno 'procés'?

R. Es que yo llevaba 55 años viviendo en Cataluña, una tierra que me enamoró y en la que encontré una sociedad abierta, la más adelantada, emprendedora, a la vanguardia de España… Mis hijos nacieron ahí y saben catalán. Pero después he visto el declive de Cataluña por culpa de unos políticos extremistas y con poca formación que han tomado decisiones que solo han perjudicado a la economía y a la sociedad catalana. Lo he sentido como algo propio. Yo veía ese declive hace tiempo, pero veía que no había oposición de ningún tipo, ni por el propio Estado. Hasta que me encontré con varias personas más que pensaban igual y decidimos que era el momento de que la sociedad civil diera un paso al frente para decir basta.

P. ¿Cuándo dio ese paso, en un momento tan complicado, no midió las consecuencias que podía tener sobre su empresa, Naturhouse, o sobre su propia familia?

R. Un poco sí. De hecho, lo analicé, pero la suerte que tengo es que había internacionalizado mis empresas, con sociedades de inversión en muchos sitios. Y en el caso de la empresa madre, Naturhouse, está presente en 30 países y la facturación en España era solo de un 20% de mi mercado, y Cataluña era un 5%. Entonces decidí que podía jugarme ese 5%, porque además pensé que, como máximo, caerían las ventas a la mitad allí, porque no me comprarían los independentistas, pero la otra mitad de la población es constitucionalista y me iba a seguir comprando, como así fue. Me negué a poner las etiquetas en catalán, porque ya estaban en español, que entendemos en todo el país. Y lo cierto es que no perdí nada, porque los constitucionalistas me compraban más por apoyarme.

"La suerte que tengo es que había internacionalizado mis empresas, con sociedades de inversión en muchos sitios"

P. ¿Y la presión sobre su familia?

R. Hombre, pues es verdad que como me cogieron manía y empezaron a hacerme algunos boicots, pues no fue fácil, como cuento en el libro. Por eso, al final decidí marcharme de Cataluña y creo que fui el primer empresario que lo hizo, lo que levantó aún más polvareda. Dije que me iba porque ni había orden, ni había seguridad jurídica, ni había algo a lo que agarrarse con esos políticos retrógrados…

P. Usted se vino a vivir a Andalucía, donde ha fijado residencia en su Hotel Las Dunas. ¿Por qué? ¿Qué le ha aportado?

R. La verdad es que me enamoré de Andalucía hace ya tiempo de la mano del conocido locutor Luis del Olmo, que me invitó a jugar algún torneo de golf. Entonces estábamos mi mujer y yo buscando algunos lugares por el mundo para irnos de Cataluña, incluyendo el Caribe. Pero descubrimos Marbella y la Costa del Sol y nos dimos cuenta de que teníamos lo que queríamos en casa, en España. Empezamos comprando una casa y pasando algún tiempo en verano y Navidades. Y luego apostamos por el hotel. En Andalucía, la gente es amable y acogedora y se está muy a gusto, tenemos una buena climatología y además en estos momentos está de moda, porque con el Gobierno que tenemos estamos felices…

P. ¿Ha notado el cambio con la Junta de Juanma Moreno?

R. Claro. Ha conseguido atraer empresarios, ha bajado impuestos, ha creado mucho empleo y es una sociedad mucho más dinámica de la que había antes. Mi hija con su familia vive ya allí todo el año y notan aún más ese cambio. Yo también, aunque esté todo el día viajando por todo el mundo.

placeholder Revuelta en el Hotel Las Dunas con Pedro Luis Gómez en la entrevista que dio origen al libro.
Revuelta en el Hotel Las Dunas con Pedro Luis Gómez en la entrevista que dio origen al libro.

P. Ha sido uno de los promotores del Festival Starlite de Marbella…

R. Fue una oportunidad que surgió y nos pareció que se podía hacer algo bonito y que fuera importante para la Costa del Sol y para Andalucía.

P. ¿Qué le sobra y qué le falta a la Costa del Sol?

R. Aquí lo que falta es el tren que conecte Málaga con la Costa del Sol. Es increíble que una zona turística y con tanta población, y de alto poder adquisitivo, no cuente con un buen transporte ferroviario como cualquier municipio de Suiza. En Marbella viven en invierno 150.000 personas, pero en verano se llega al millón. En Estepona se llega a los 400.000. ¿Cómo es posible que no haya ese tren ya?

"Es increíble que una zona turística, y de alto poder adquisitivo, no cuente con un buen transporte ferroviario como en Suiza"

P. ¿Por qué este libro ahora? ¿Qué quiere contar que no se sepa sobre usted?

R. Tras fallecer mi esposa, Luysa, me quedé dándole vueltas a la cabeza de cosas que me quedaban por hacer. Me di cuenta de que a mí me hizo ser empresario, un libro que me inspiró y pensé que quizá yo debiera dar ese mismo ejemplo por si sirviera de inspiración para cualquier chaval… Me encantaría. Debemos contribuir a dignificar al empresario. En EEUU la gente pone en un pedestal a los que crean sus empresas, pero aquí solo queremos ser funcionarios.

P. Usted es uno de los hombres más ricos de España y podía haber contado un libro presumiendo de su éxito, pero ha querido que el libro cuente sus fracasos hasta llegar aquí. ¿Por qué?

R. Para que la gente joven no tenga miedo al fracaso, porque sin fracasos no llega el éxito. Hay que intentarlo hasta dar con la tecla. Hace 14 años que llegué a EEUU y me sorprendió que me recibieron como a un héroe que llegaba a invertir y crear empleo. Allí se aprecia al que lo intenta. Recuerdo que conocí entonces en Miami a un camarero asturiano que trabajaba como un loco y que ya entonces me contaba tanto sus fracasos anteriores como sus ganas de conseguir dinero para montar su propia cafetería. Pues años después lo volví a ver y ya tenía dos locales. Ese es el ejemplo.

P. ¿Por qué en España está peor visto fracasar en algo? ¿Por qué colgamos a partir de entonces el cartel de "fracasado" al que lo intenta?

R. Bueno, porque ese es el carácter que tenemos en España. Nos molesta el éxito y nos reímos del fracaso. Si un conocido tiene éxito, decimos que es un desgraciado que ha tenido suerte, que es un borracho, que es… Y si tiene un fracaso, decimos que sabíamos lo que iba a pasar porque no sirve para nada. Esto hay que cambiarlo.

"Ese es el carácter que tenemos en España. Nos molesta el éxito y nos reímos del fracaso"

P. Usted admira a grandes empresarios españoles a los que algunos partidos intentan demonizar. ¿Sigue en nuestra mente la imagen del empresario especulador, gordo y con puro, que roba a los obreros?

R. Bueno, una cosa es un especulador y otra bien distinta un empresario que monta negocios o fábricas y crea empleo, como son la mayoría de este país. Y estos últimos pueden ser gente que gana dinero poco a poco, lo invierte bien y se hacen millonarios, pero sin dejar de cumplir con sus obligaciones ante sus empleados, ante sus clientes, ante sus accionistas y ante el Estado, al que paga sus impuestos. Y si encima hace obra social, pues es una persona que hay que admirar. Pero aquí seguimos con el tópico que asocia al empresario con un especulador.

P. Estos días se habla mucho de los encuentros de la mujer del presidente del Gobierno con empresarios privados. ¿Cree que este caso fomentará esa imagen de los especuladores buscando los favores del poder?

R. Bueno, en este caso es que aún no sabemos bien lo que ha ocurrido, si esta señora se ha dirigido a ellos para sacar sus emolumentos o al revés. Pero si a mí me llama la mujer del presidente del Gobierno o la Reina, también la voy a recibir. La que no tiene que dirigirse por ética a los empresarios es ella, ni contratar con ellos nada. El empresario, por respeto, la va a escuchar, y si además te ofrece un negocio, a lo mejor aceptas y caes en la tentación.

Foto: Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en Benalmádena, Málaga. (EFE/Jorge Zapata)

P. Deje que le pregunté por Naturhouse, que este pasado año ha facturado unos 50 millones. ¿Por dónde van sus planes de futuro? ¿Siguen con la vista en China?

R. De hecho, esta próxima semana estaré en Shanghái para asistir a una feria, y luego iré a India. No es solo China. Todo el continente asiático está subiendo mucho y cuando la gente empieza a comer más es cuando tiene problemas de peso, y ahí es donde entramos nosotros, así que es una oportunidad que creo que debemos aprovechar.

P. Si usted se encontrara de frente a usted mismo de joven, ese guardia civil de familia humilde con ganas de comerse el mundo, ¿qué le diría hoy?

R. Pues no le diría nada. Le dejaría que cometiera los mismos errores y fracasos para aprender en la vida, porque así es como se consigue el éxito.

Félix Revuelta es uno de los hombres más ricos de España (con una fortuna valorada en unos 140 millones de euros) y a sus 73 años saborea el éxito personal y profesional. Pero ha querido que su biografía esté protagonizada por sus tropiezos. Así se lo encargó al periodista malagueño Pedro Luis Gómez, tras una entrevista radiofónica en Canal Sur, que le hizo recapacitar en un momento muy complicado de su vida. Acababa de fallecer su mujer, Luysa, el gran amor de su vida.

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