Adif estudia estructuras societarias para desarrollar nuevos negocios

Adif se está planteando crear nuevas estructuras societarias para poder poner en valor todos sus negocios más allá de su actividad principal de despliegue y gestión de infraestructuras ferroviarias.

La empresa pública ha encargado a Ernst & Young Abogados (EY) un estudio técnico jurídico de alternativas societarias para el desarrollo de nuevas líneas de actividad. Según señalan fuentes al tanto de los planes de la empresa, la firma ha lanzado consultas a expertos con el objetivo de conocer sus opciones para valorar una posible restructuración de las actividades non-core.

La licitación centra el estudio en servicios de energía y servicios conexos, según consta en documentación oficial, pero las fuentes consultadas amplían el abanico a todas las actividades alternativas a la principal. Entre las mismas, Adif ya desarrolla las de telecomunicaciones, a través de su red de fibra óptica, la energía, con sus propuestas de autoconsumo, la potencial explotación comercial de sus estaciones o la gestión de sus aparcamientos.

Estos negocios pueden ser explotados por Adif en exclusiva, pero en muchos casos se están produciendo alianzas o joint ventures con otras empresas, por lo que elegir la mejor estructura societaria también es importante de cara a poder rentabilizarlos en el futuro.

Por ejemplo, en lo que respecta a parkings, este mismo mes de junio Adif y Adif Alta Velocidad anunciaron la adjudicación a Saba para la gestión de 22.000 plazas en 55 estaciones de tren repartidas por España. Aunque en este caso se trata de una adjudicación directa, la firma quiere ver qué posibilidades societarias se podrían explorar en el futuro para maximizar el valor de todo aquello que no está directamente relacionado con su principal actividad de despliegue de líneas.

En este sentido, cabe destacar que, por ejemplo, Adif Alta Velocidad tiene entre sus responsabilidades la gestión de una red de fibra óptica de 16.000 kilómetros, que se extiende por el tendido ferroviario entre las principales capitales españolas. Estudiar las mejores opciones para este tipo de negocio estaría en el cometido que pretende llevar a cabo de la mano de la big four contratada.

Al margen de lo anterior, Adif tiene más posibilidades. Al ser uno de los principales consumidores de electricidad, dadas las necesidades de los operadores para mover sus trenes, otra de las opciones a estudiar es todo lo que tiene que ver con la energía. A este respecto, la firma anunció en septiembre de 2023 un nuevo plan para que los propios operadores (Renfe, Iryo y Ouigo) puedan promover sus plantas de energía renovable que les permitan reducir el coste de la luz, uno de los principales gasto que tienen las compañías.

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C. R.

De esta manera, con unas estructuras societarias autónomas para cada uno de sus negocios y joint ventures, Adif podría plantear hipotéticamente en el futuro extraer el máximo valor de las mismas a través de desinversiones u otras opciones, como ya hacen otras grandes empresas.

Grandes empresas de telecomunicaciones o energéticas han subdividido algunas de sus actividades en sociedades propias de las que posteriormente venden una participación. Esto es algo que ha hecho Naturgy con sus redes de gas, Redeia con su red de fibra o Iberdrola con algunos grandes complejos de energías limpias, entre otras compañías. Esto les permite poner en valor sus negocios y extraer recursos propios para poder aumentar las inversiones o destinar fondos a otros fines.