¿Es legal que te cobren un euro si eres propietario e invitas a la piscina de tu comunidad a amigos y familiares?

• Mis vecinos traen muchos amigos a la piscina de la comunidad, ¿se puede controlar?
• ¿Es necesario tener un socorrista en la piscina de la comunidad?

Con la llegada del verano, las piscinas comunitarias se convierten en el punto neurálgico de muchas urbanizaciones. Los vecinos, especialmente los niños, aprovechan el calor para disfrutar de largos días de chapuzones y juegos acuáticos. Sin embargo, la gestión de estas instalaciones puede generar conflictos, especialmente en lo que respecta a la normativa y el acceso de invitados.

Las normas de uso de las piscinas comunitarias están reguladas por el Real Decreto 742/2013, que establece los criterios sanitarios básicos y mínimos. Cada comunidad autónoma puede añadir sus propias normativas, lo que implica que las reglas pueden variar significativamente de una región a otra. Entre las medidas más comunes se incluyen el control de aforo, la implementación de sistemas de acceso que eviten aglomeraciones o la obligatoriedad o no de tener socorrista.

Opinión

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Una cuestión recurrente entre los propietarios es la posibilidad de invitar a amigos y familiares a la piscina. Este asunto, que puede parecer trivial, tiene una gran importancia en términos de convivencia y uso responsable de las instalaciones. Las comunidades de vecinos suelen establecer normas específicas en sus estatutos para regular el número de invitados y asegurar que todos los propietarios puedan disfrutar de la piscina sin inconvenientes.

¿Es legal cobrar un euro por cada invitado?

Recientemente, se ha viralizado la propuesta de cobrar un euro a cada invitado que acceda a la piscina comunitaria. La iniciativa corrió a cargo de la residente de una urbanización, cuya idea pasa por controlar el aforo y recaudar fondos para mantener y mejorar las instalaciones comunes, beneficiando así a todos los propietarios, algo que ha generado un amplio debate en redes sociales.

Expertos en propiedad horizontal aseguran que es posible establecer este tipo de cobros mediante una norma de régimen interior. Las comunidades de vecinos tienen la facultad de aprobar medidas como el pago por invitaciones o carnets especiales para visitantes, siempre y cuando estas normas se acuerden en junta y se recojan en los estatutos de la comunidad, de manera democrática y transparente, y asegurándose de que todos los vecinos están de acuerdo y conocen las nuevas normas, para evitar malentendidos. Además, recomiendan que cualquier fondo recaudado se gestione de manera clara y que los vecinos sean informados regularmente sobre cómo se están utilizando estos recursos para mejorar las instalaciones comunes.

"No se puede convertir una piscina privada en una pública"

Por su parte, el abogado de Legálitas, Tomás Felipe de Pedraza, asegura que “las normas de régimen interior suelen regular el número de invitados, los horarios, si se puede comer o no..., sin perjuicio de que también hay unas normativas a nivel administrativo que tienes que respetar”.

Eso sí, a pesar de que la comunidad pueda aprobar el pago de un euro, el abogado recuerda que “no se puede convertir una piscina privada en una pública”, puesto que “hay una normativa y una serie de derechos” de acuerdo a las reglas para el uso de la piscina.

Las comunidades de vecinos pueden cobrar la entrada a la piscina siempre que se acuerde en junta y se recoja en los estatutos

Por este motivo, es crucial que cualquier normativa de este tipo sea aprobada por la mayoría en una reunión de la comunidad y esté claramente especificada en el reglamento interno. Felipe de Pedraza recuerda que cualquier vecino que no esté de acuerdo con esta medida “tendría la posibilidad de impugnar en los tribunales esa decisión si creen que es perjudicial o si va en contra de sus derechos”.