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X-Elio desafía trabas burocráticas y acelera 250 M en renovables en la Comunidad Valenciana
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CINCO NUEVOS PARQUES

X-Elio desafía trabas burocráticas y acelera 250 M en renovables en la Comunidad Valenciana

La promotora de Brookfield ultima los permisos para construir un parque de 100MW en Villena (Alicante) y tramita otros cinco más, incluido un piloto de megabatería en Castellón

Foto: Parque solar de Turroneros de X-Elio en Xixona, Alicante.
Parque solar de Turroneros de X-Elio en Xixona, Alicante.
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X-Elio, la promotora de proyectos de renovables de la gestora canadiense de fondos de inversión Brookfield Asset Management, quiere acelerar sus proyectos de plantas fotovoltaicas en la Comunidad Valenciana, uno de los territorios más retrasados en la implementación de fuentes de generación de energías limpias por su particular orografía y las trabas administrativas con las que desde hace años se topan muchas de las iniciativas que inician su tramitación. El CEO de la compañía, Lluís Noguera, anunció en un encuentro con medios de comunicación en Valencia que su parque más ambicioso en el territorio, una instalación de 100 megavatios bautizada como La Atalaya en Villena (Alicante), está a la espera del último permiso de licencia constructiva que emite el Ministerio de Transición Ecológica para los proyectos de más de 50MW.

Esta iniciativa movilizará una inversión de cerca de 80 millones de euros. X-Elio prevé otros cuatro parques más pequeños en desarrollo en las tres provincias valencianas, que sumarán un total de 250 millones de euros. Actualmente, opera la mayor instalación fotovoltaica de la autonomía, Turroneros I (en Xixona, Alicante), de 35MW, y acaba de terminar la construcción de Turroneros II en la misma población alicantina. Con la primera tiene firmado un acuerdo de suministro (PPA) con la petrolera Galp. Una vez finalizados todos los proyectos, generará 330MW, incluyendo los 5MW de un plan piloto de megabatería acumuladora de electricidad que quiere ensayar en la Comunidad Valenciana y que sería su primera iniciativa de este tipo en España (ya tiene otras en Estados Unidos o Australia), donde no se ha regulado todavía la promoción de acumuladores industriales. Los proyectos en desarrollo, tanto lo que tramita por la vía ministerial como por la autonómica, cuentan con declaración de impacto ambiental positiva, según explican de la empresa.

La apuesta de X-Elio tiene lugar en un territorio en el que sacar adelante un proyecto de renovables de cierta envergadura es una carrera de obstáculos de plazos, trámites administrativos y revisión por parte de diversos departamentos, que muchas veces emiten informes contradictorios. Según ha denunciado la patronal autonómica de empresas de renovables, Avaesen, la burocracia es mucho más lenta por parte de la Generalitat que el Gobierno central, un problema que se arrastra desde el Consell progresista del Botànic, que desplegó una sobrerregulación, especialmente en el apartado paisajístico, tras comenzar a aparecer protestas en diversos municipios por la avalancha de proyectos del interior. La consecuencia es que en la Comunidad Valenciana, la potencia eléctrica de fuentes renovables apenas representa el 21% frente al 61% del sistema nacional, según los datos de Avaesen.

La nueva Administración autonómica, que preside el popular Carlos Mazón, se ha comprometido a agilizar los trámites, pero sigue sin resolver los problemas. El nuevo Consell tiene previsto aprobar en breve el Plan Simplifica, que afectará a diversos sectores, entre ellos el de la energía, y su relación con la ventanilla administrativa autonómica. También contempla una nueva norma específica para renovables. No obstante, Mazón, que este miércoles se reunió en el Palau de la Generalitat con el CEO de X-Elio en el marco de sus encuentros periódicos con sectores empresariales, se ha mostrado públicamente crítico con algunas de la megaplantas solares que se tramitan por la vía ministerial. La Generalitat ha presentado alegaciones contra una decena de ellas, como la que se proyecta en San Miguel de las Salinas para dar servicio a la desalinizadora de Torrevieja.

placeholder Carlos Mazón, con los directivos de X-Elio, este miércoles en el Palau de la Generalitat. (GVA)
Carlos Mazón, con los directivos de X-Elio, este miércoles en el Palau de la Generalitat. (GVA)

Lluís Noguera trasladó al barón popular la intención de su compañía de respetar los requisitos marcados desde la Administración autonómica y la política de compromiso social de la empresa de Brookfield con los ayuntamientos y municipios en los que desarrolla iniciativas. X-Elio, por ejemplo, no tramita proyectos que exijan expropiaciones forzosas de suelo para las plantas. "Nuestro objetivo es generar un impacto positivo y duradero en las vidas de las personas que conviven con nuestros proyectos", señaló Noguera.

"Estamos comprometidos con el crecimiento y el desarrollo sostenible de la Comunitat Valenciana. Con más de 330MW de proyectos en energía renovable en proceso, esta inversión refleja nuestra dedicación a impulsar la economía local y a promover una transición energética hacia fuentes más limpias y sostenibles", señaló el CEO de X-Elio.

La promotora propiedad del gestor de fondos de inversión de Canadá, que compró a KKR su 50% de participación en 2023 para hacerse con toda la compañía, ha desarrollado más de 2,8 GW desde su nacimiento en 2005 y actualmente está presente en España, Italia, Alemania, Estados Unidos, América Latina, Oriente Medio, Japón y Australia. El año pasado invirtió más de 800 millones de euros en iniciativas fotovoltaicas, 600 de ellos en España.

X-Elio, la promotora de proyectos de renovables de la gestora canadiense de fondos de inversión Brookfield Asset Management, quiere acelerar sus proyectos de plantas fotovoltaicas en la Comunidad Valenciana, uno de los territorios más retrasados en la implementación de fuentes de generación de energías limpias por su particular orografía y las trabas administrativas con las que desde hace años se topan muchas de las iniciativas que inician su tramitación. El CEO de la compañía, Lluís Noguera, anunció en un encuentro con medios de comunicación en Valencia que su parque más ambicioso en el territorio, una instalación de 100 megavatios bautizada como La Atalaya en Villena (Alicante), está a la espera del último permiso de licencia constructiva que emite el Ministerio de Transición Ecológica para los proyectos de más de 50MW.

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