Las dudas del mercado frenan la salida a bolsa de Volotea, Europastry, Tendam, Astara y H2B2

Los grandes bancos de inversión y los despachos de abogados que están asesorando las salidas a bolsa de empresas españolas tendrán que esperar para cobrar sus fees de éxito por colocar estas compañías a cotizar.

En las últimas semanas, se están desmoronando las expectativas de saltar al parqué de varios grandes grupos. El último en frenar su OPV (operación pública de venta) ha sido Volotea, que ya se pone de plazo para esta operación 2025, pese a que en abril expresó su deseo de que se realizara en el segundo semestre de este año.

Pocos días antes fue Europastry quien dio marcha atrás. El líder del pan congelado quería saltar al parqué con una valoración próxima a los 2.000 millones de euros.

Días antes de que se cayera Europastry también Tendam (Cortefiel) optó por esperar al menos hasta después del verano. Esta decisión se tomó después de que otro gigante del sector en Italia, Golden Goose, optara también por parar su salida a bolsa en Milán. "El importante deterioro de las condiciones del mercado tras las elecciones al Parlamento Europeo de este mes y la convocatoria de elecciones generales en Francia han impactado el desempeño de los mercados europeos y, en particular, el sector del lujo", indicaba el comunicado.

Todas ellas, sin embargo, no han sido capaces de seguir los pasos de Puig, que a principios de mayo salió a bolsa valorada en 14.000 millones de euros y ya se ha colocado en el Ibex-35 en sustitución de Meliá Hotels. No obstante, su recorrido bursátil ha sido más que discreto, pese a que en los debuts se espera un recorrido al alza para invitar a participar a los inversores. Desde los 24,5 euros llegó el 12 de junio a 27,60 euros. Sin embargo, desde entonces ha vuelto a caer y actualmente se sitúan por debajo de los 26 euros, lo que le ha permitido revalorizarse algo más del 5% en poco más de dos meses.

Antes de que se diera esta operación ya se había cancelado la OPV de Astara, la filial de suscripción de coches del grupo Bergé. Ya con planes de salir a cotizar el 25 de abril, finalmente decidió parar esta operación a principios de abril por la escasa valoración. "De común acuerdo con sus tres socios, ha anunciado esta decisión, teniendo en cuenta que, en este momento, las condiciones del mercado no son las más propicias para llevar a cabo la citada salida a bolsa", dijo entonces la firma.

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Las dudas en el mercado también afectan a empresas españolas al otro lado del charco. H2B2, la compañía de hidrógeno vinculada a Felipe Benjumea, puso fin a sus planes de salir a cotizar en el Nasdaq el pasado mes de abril tras romper un acuerdo de fusión que tenía con la sociedad RMG. De nuevo, la firma achacó el pinchazo a las circunstancias del mercado.

Ahora está por ver hasta qué punto la inestabilidad y las dudas del mercado se pueden acrecentar aún más tras el intento de asesinato de Donald Trump este fin de semana, a solo dos días de su proclamación como candidato republicano a La Casa Blanca el próximo mes de noviembre, donde algunas encuestas le dan como vencedor ante un Joe Biden cuestionado por el estado de su salud.

Sea como fuere, varios de los grupos que ahora han aplazado su salida a bolsa ya en otros momentos anunciaron intenciones de salir a cotizar y también acabaron frenando este plan.

Interés por excluir de bolsa

Mientras se caen estas salidas a bolsa, hay otras operaciones en sentido opuesto, como ocurre con Grifols, donde la familia fundadora y el fondo canadiense Brookfield pretenden lanzar una opa por el 100% del capital para sacar a este grupo de hemoderivados del parqué. Hines y Lar también han abierto la puerta a excluir de bolsa la socimi Lar España si triunfa la opa lanzada el pasado viernes.

Por otro lado, los nuevos dueños de Applus, I Squared y TDR, quieren hacer lo propio y excluir la empresa de cotización. En la misma línea, el grupo portugués Bondalti presentó en marzo una opa de exclusión sobre Ercros. Un proceso al que se ha sumado una contraopa del grupo italiano Esseco.

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Las bajas valoraciones no solo afectan al mercado de las salidas a bolsa, en las operaciones de compra y venta de grandes activos también se está notando. Fuentes del mercado señalan que las ofertas que recibió Acciona por la venta de un paquete de infraestructuras renovables han sido muy frías, de ahí que incluso la empresa de la familia Entrecanales podría plantearse otras opciones para esa operación.

Hay otros procesos de renovables que están tardando en cerrarse más de lo que se esperaba, como por ejemplo la venta del 49% de un portfolio de renovables por parte de Endesa, que espera lograr culminar la operación con éxito este mes de julio o principios de agosto.