"Vas perdiendo la memoria de trabajo": las secuelas de un empleado adicto al porno

"¿Qué droga es esta? ¡Me encanta!" Se llama pornografía, y su adicción hundirá por completo a la persona. Esta frase es de un adolescente de 13 años que participa en la serie documental Generación Porno, y la recuerda José Luis García, doctor en psicología y sexólogo.

Comienza desde joven, y es solo el principio. "Los adolescentes enganchados a la pornografía y las pantallas pueden disminuir su rendimiento académico hasta 1,5 puntos de lo que tenían debido a estas adicciones. En general, el rendimiento neurocognitivo y neuropsicológico se ve afectado por el consumo de la pornografía", expresa Alejandro Villena, psicólogo, sexólogo clínico y director Clínico y de Investigación.

Pero el joven deja de ser joven y pasa a ser adulto, y la falta de rendimiento académico se convierte en falta de rendimiento laboral. En palabras de García, "el porno puede enganchar a cualquier edad".

Si bien otras adicciones como las drogas o el alcohol son más evidentes en su repercusión en la vida laboral, la adicción al sexo online también afecta, aunque parezca que se queda en el terreno más privado o íntimo. "La adicción a la pornografía (o trastorno por comportamiento sexual compulsivo, como lo categoriza la OMS) puede tener repercusiones y consecuencias en la vida laboral", comenta Villena.

"El exceso de tiempo dedicado a la pornografía puede restar de tiempo a la productividad y al rendimiento laboral"

El sexólogo añade que "el exceso de tiempo dedicado a la pornografía puede restar tiempo a la productividad y al rendimiento laboral. Este comportamiento cobra gran importancia en la vida de la persona, haciendo que se reduzca el interés por otras actividades", y menciona como fuente el estudio Procesos cognitivos relacionados con el uso problemático de pornografía: una revisión sistemática de estudios experimentales. Esta investigación de ScienceDirect señala que la adicción al cibersexo atenta contra dos capacidades necesarias para el individuo para ser funcional laboralmente: la memoria de trabajo y la toma de decisiones.

Empezando por la memoria de trabajo, para medirla, se instruía a los participantes para que controlasen una serie de estímulos, y la memoria de trabajo se evaluaba mediante los tiempos de reacción y la precisión de la respuesta. Los resultados fueron muy consistentes: los participantes con un mayor consumo de pornografía tienden a tener "un peor desempeño en tareas que requieren la memoria de trabajo".

En cuanto a la toma de decisiones, constituye uno de los procesos cognitivos más importantes. Según el estudio, las personas con trastornos de la toma de decisiones tienden a mostrar preferencia por pequeñas ganancias a corto plazo en lugar de grandes ganancias a largo plazo. De este modo, los individuos que exhiben mayor reactividad frente a estímulos sexuales tienen una mala toma de decisiones, especialmente cuando este proceso está guiado por señales sexuales.

TE PUEDE INTERESAR

"Era una niña. Ni sabía lo que era masturbarse". Confesiones de una exadicta al porno de 21 años

Julia Rodríguez

De acuerdo con Melissa Lewis-Western, coautora del estudio Los efectos de la pornografía en el comportamiento poco ético en los negocios, publicado en el Journal of Business Ethics, en línea con la toma de decisiones, "las compañías están formadas por personas, que toman decisiones que determinan el futuro de su empresa".

Esta investigación, además, apunta que "la deshumanización de las personas causada por ver pornografía aumenta el comportamiento antiético, lo cual tiene el potencial de manifestarse en numerosos contextos empresariales. Por ejemplo, una mayor tendencia a mentir para obtener ganancias y ver a los demás solo como un medio para un fin, probablemente, es muy perjudicial para la eficacia y la cooperación del equipo dentro de una organización. La cooperación y la confianza en todas las áreas funcionales de especialización suelen ser necesarias para lograr objetivos importantes como desarrollar nuevos productos o entrar en nuevos mercados. Como tal, una disminución sustancial en la confianza y la cooperación debido a una mayor deshumanización de los demás por parte de los empleados tiene el potencial de impactar negativamente los resultados a nivel de empresa".

Inevitablemente, el consumo abusivo de pornografía acaba interfiriendo. "Con frecuencia hay una dejación de otras actividades y responsabilidades, en la medida en que tiene "otras prioridades". Por tanto, el mundo laboral podría verse afectado", asegura García.

"Una mayor deshumanización por parte de los empleados tiene el potencial de impactar negativamente los resultados de la empresa"

LinkedIn también indica que el desempeño en el trabajo puede verse comprometido. La procrastinación y la pérdida de concentración, consecuencias directas del tiempo invertido en la visualización de pornografía, pueden dar como resultado una disminución notable del rendimiento laboral. Esto, a su vez, afecta las oportunidades de crecimiento profesional.

Para algunos se convierte en algo incontrolable. Daniel Rego, exadicto a la pornografía, confesó en Focus que, "en medio del turno de trabajo, tenía que ir al baño a masturbarse". La necesidad de consumo puede poner en riesgo a la persona, incluso, según Villena, "llevándole a consumir pornografía en su entorno laboral".

Según el documento del Journal of Business Ethics, una encuesta de 2018 encuentra que casi el 60% de los participantes ve pornografía en el trabajo: la mitad ve pornografía mensualmente y el 10% la ve diariamente. De hecho, el 70% del tráfico online de pornografía ocurre entre las 9:00 y las 17:00, hora en la que, apuntan, "la mayoría de la gente probablemente esté trabajando".

TE PUEDE INTERESAR

Por qué tu padre pasa más tiempo que tú viendo porno cada día en internet

P. Cubria de Gorostegui

Este fenómeno se percibió también en el confinamiento, en pleno boom del teletrabajo. Así lo cuenta una encuesta a más de 6.000 empleados desde casa de 12 países distintos, incluido España, elaborada en 2020 por la compañía de ciberseguridad Kaspersky, que estudió cómo había cambiado la situación laboral. Según el informe, el 51% de teletrabajadores veía pornografía desde su dispositivo de trabajo durante la pandemia.

"El teletrabajo puede favorecer el uso de pantallas y de pornografía, por tanto, perder el tiempo con mayor facilidad. De hecho, en el estudio de ScienceDirect se vio que cuanto mayor es el consumo de pornografía, lo cual implica un mayor número de orgasmos, peor es la atención y concentración y la capacidad de planificación y organización. Tener sexo durante la rutina laboral podría cortar los tiempos de concentración de la persona", alude Villena.

El bienestar sexual mejora el trabajo

La adicción a la pornografía deriva en relaciones insanas con el sexo. Sin embargo, cabe mencionar que tener buenos hábitos sexuales puede mejorar muchos aspectos de la vida, incluido el ámbito laboral. De hecho, el teletrabajo también ha contribuido positivamente a las relaciones sexuales. "Poder estar en casa y tener más facilidad para tener encuentros con la pareja, por el tiempo que se ahorra en los desplazamientos o la posibilidad para descansar a la hora de la comida, sí que pueden ser ventajas en este sentido", señala Villena.

En declaraciones de García, "el teletrabajo ha permitido organizar el tiempo de manera más adaptada a las necesidades de cada persona, en la propia casa, dedicando espacios a actividades más personales y eso también puede afectar al estado de ánimo y al bienestar. En ese entorno es más fácil tener intimidad sexual".

"El teletrabajo ha permitido organizar el tiempo de manera más adaptada a las necesidades de cada persona en la propia casa"

En general, tener sexo habitualmente de manera sana puede ser muy beneficioso para el empleado y, en consecuencia, para la empresa. Villena afirma que la gente con bienestar sexual está "más concentrada en el trabajo y con menos distracciones. En este estudio de SageJournals Del dormitorio a la oficina: efectos indirectos de la actividad sexual en el hogar en el lugar de trabajo que analizó la relación de ambas variables en 2017, sí se encontró que el tener relaciones sexuales aumenta el rendimiento laboral", puntualiza.

Por su lado, García indica que hay evidencias científicas respecto de que una actividad sexual satisfactoria tiene efectos beneficiosos, con un estudio de la Universidad de Oregón. "Este estudio obtuvo hallazgos concluyentes: la actividad sexual gratificante mejora el rendimiento laboral, si bien puede haber diferencias por sexo y edades, así como en las prácticas sexuales concretas". En su opinión, es un factor a considerar.

"La actividad sexual gratificante mejora el rendimiento laboral, si bien puede haber diferencias por sexo"

No obstante, los expertos advierten que puede surgir el efecto contrario. Puede que, al revés, exista una cierta relación también y que circunstancias de cansancio y estrés laboral pueden afectar negativamente a las relaciones sexuales.

Sea como fuere, la relación de las personas con el sexo es más determinante de lo que parece. "La satisfacción vital de la persona puede influir en su vida laboral", expresa García. El sexo es una fuente de bienestar y ese bienestar provocará satisfacción en otras áreas como el trabajo. El problema es cuando se vuelve adictivo, físicamente o en plataformas online, hasta niveles insanos. García avisa: "El porno gana frente al control".