El cuestionado Pacto Antiterrorista firmado por PP y PSOE no recibirá la puntilla durante la redacción de las conclusiones de la Comisión del 11-M. Al menos esa es la intención de los socialistas, que han propuesto al resto de los grupos no tocarlo y cre

La Comisión de Investigación del 11-M vive sus últimas sesiones. Hoy todos los grupos parlamentarios celebrarán una reunión en la que cada uno de ellos defenderá los documentos de conclusiones que han ido redactando en las últimas semanas. Entre ellos estará el que ha elaborado el PSOE, en cuyas 450 páginas de extensión carga duramente contra la actitud del PP durante los días que siguieron a la masacre. Sin embargo, en dicho texto los socialistas no darán la puntilla final al malherido Pacto por las Libertades firmado por los populares y por ellos mismos la pasada Legislatura.

De hecho, el documento recogerá la recomendación de firmar un segundo acuerdo antiterrorista entre todas las fuerzas políticas, pero, en este caso, sólo destinado a combatir la amenaza integrista. Una propuesta para la que el PSOE sólo ha encontrado, por el momento, el apoyo de IU, cuyo documento de conclusiones también recoge la necesidad de este nuevo pacto.

Sin embargo, los otros socios parlamentarios del Gobierno, ERC, así como CiU, PNV y el Grupo Mixto, insistirán en sus conclusiones en la necesidad de poner punto final al actual Pacto Antiterrorista para elaborar “un nuevo acuerdo global que plasme la unidad de todos los partidos demócratas frente al terrorismo etarra y frente a las nuevas formas de terrorismo internacional”, como se recoge textualmente en el documento de los nacionalistas catalanes.

El apoyo de IU no es, sin embargo, incondicional. Según han señalado a El Confidencial fuentes de la coalición, Llamazares se ha comprometido a no pedir el fin del Pacto Antiterrorista -“ya lo hemos hecho en numerosas ocasiones desde que se firmó”- hasta ver cómo evolucionan en los próximos meses los contactos entre el Gobierno y ETA que autorizaba la reciente resolución del Parlamento. “Si vemos que no cristalizan, entonces sí volveremos a pedir al PSOE que certifique su defunción”, añaden.

Reuniones sólo con IU

El acuerdo entre socialistas y la coalición se ha fraguado en el transcurso de numerosas reuniones y contactos telefónicos mantenidos en las últimas semanas entre sus miembros. Unos contactos que tendrán su reflejo, además, en otras numerosas coincidencias de los documentos que presentan ambos partidos. En los últimos días, el PSOE también intentó algunas tímidas aproximaciones con los otros grupos minoritarios, a algunos de los cuales les pidió un adelanto de sus conclusiones, pero con ninguno de ellos ha llegado a celebrar reuniones para consensuar las mismas.

De hecho, la impresión manifestada por varios de los diputados de la Comisión es que el documento final de conclusiones va a reflejar serias discrepancias entre los partidos con la presencia de “numerosos votos particulares de los diferentes grupos”. “Un texto único es imposible en estos momentos”, reconoce uno de ellos. Así, ERC ha presentado un informe en el que pide, por ejemplo, responsabilidades políticas a nueve cargos con nombres y apellidos del Gobierno de José María Aznar, incluido el ex presidente, mientras que el resto de los grupos evita en todo momento personalizar las críticas.

Desde las filas del PSOE se reconoce también que, hace meses, se intentó incluso un acercamiento al PP para llegar a unas conclusiones comunes. Una aproximación en la que se ofrecieron a rebajar sus duras críticas a la acción del Gobierno popular durante aquellos días. Sin embargo, “la cerrazón del PP no nos ha dejado otra opción que volver a ellas” y, por ello, aparecerán ampliamente reflejadas en los 450 folios del informe que han elaborado los socialistas. Sin embargo, en él no han encontrado hueco para dar la puntilla al Pacto Antiterrorista.