ERC se mantiene firme en su rechazo al ‘Estatut’ tras conocer que las encuestas electorales les favorecen

Los dirigentes de ERC apuestan por mantener su oposición al Estatut pese al aumento de la presión a la que les están sometiendo el PSOE y los otros partidos catalanes en los últimos días para que finalmente se decanten por el ‘sí’ al polémico texto. El motivo: las encuestas que manejan reflejan un panorama electoral muy similar al que salió de las elecciones autonómicas de noviembre 2003 e, incluso, apuntan a una ligera subida de los republicanos en intención de voto que puede traducirse en un escaño más.

Según estos datos, CiU mantendría sus actuales 46 escaños, aunque puede perder uno. El PSC repetiría los 42, con peligro también de ceder un parlamentario, mientras que ICV y el PP mantendrían su representación -nueve y quince, respectivamente- y ERC aseguraría los 23 con los que cuenta en estos momentos, con posibilidades de ganar uno más a costa de alguna de las dos grandes formaciones catalanes.

Sin embargo, lo más sorprendente de los sondeos que manejan no es tanto el reparto de escaños como el alto porcentaje de catalanes que aseguran estar dispuestos a votar ‘no’ en la consulta que debe refrendar el polémico proyecto del Estatut: un 20%. “Cuando se iba a votar la Constitución europea, los sondeos daban un 12% de voto negativo en Cataluña y finalmente ascendió al 28%. No significa que se vaya a producir un aumento similar, pero sí creemos que este porcentaje es significativamente mayor del que reflejan las encuestas y que es fruto de nuestra posición”, apuntan fuentes republicanas.

Con este panorama, la dirección de ERC -que este fin de semana mantuvo un encuentro de sus altos cargos en la localidad barcelonesa de Cardona- ha optado por mantenerse firme en sus negociaciones con los socialistas. “Si no aceptan al menos el 75% de lo que se les pidió en el documento de mínimos que (Josep Lluis) Carod-Rovira les entrego el 6 de marzo, votaremos ‘no’ en el Congreso”, apunta una fuentes republicana. Entre las exigencias de Esquerra, no sólo está el control sobre la gestión del aeropuerto barcelonés de El Prat, sino también diversos aspectos de la financiación -principalmente la recaudación y gestión de todos los impuestos por parte de una Agencia Tributaria de la Generalitat-, el rescate de peajes, la competencia exclusiva para fijar los horarios comerciales y la creación de un órgano conjunto Madrid-Barcelona para la concesión de los permisos de trabajo y residencia a inmigrantes, entre otros.

Elecciones para otoño

Los republicanos insisten en que las amenazas de Pasqual Maragall y el PSC de forzar su salida del Consell Executiu no va a hacerles cambiar en una postura, el ‘no’, que han defendido en las últimas semanas en más de doscientos actos por toda Cataluña. De hecho, uno de los hombres fuertes del partido y conseller de Comercio, Turismo y Consumo, Josep Huguet, insistía recientemente que ERC sólo decidirá su posición en el referéndum -que se celebrará muy posiblemente el próximo 18 de junio- “después de una amplia consulta a sus bases”. Una bases que, por cierto, se han manifestado reiteradamente en contra de apoyar el texto tal y como quedó tras el pacto Zapatero-Mas de enero.

Las fuentes de Esquerra consultadas aseguran, de hecho, “no temer” el adelanto electoral con el que los amenazan y creen que éste, más que un problema para ellos, lo es para Maragall, al que el propio PSC -con el ministro José Montilla a la cabeza- no respalda para repetir como candidato. “Estamos preparados para una convocatoria anticipada de elecciones”, aseguran, antes de añadir que “tal vez sea ésta la única posibilidad real del president de repetir como cabeza de lista de los socialistas”.