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Moncloa fueza a Otegi a desmentir a ‘Gara’ con la amenaza de aplazar el primer encuentro oficial Gobierno-ETA
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Moncloa fueza a Otegi a desmentir a ‘Gara’ con la amenaza de aplazar el primer encuentro oficial Gobierno-ETA

Representantes del Partido Socialista de Euskadi (PSE) y dirigentes de la ilegalizada Batasuna mantuvieron durante el pasado martes discretos e intensos contactos para reconducir el llamado

Foto: Moncloa fueza a Otegi a desmentir a ‘Gara’ con la amenaza de aplazar el primer encuentro oficial Gobierno-ETA
Moncloa fueza a Otegi a desmentir a ‘Gara’ con la amenaza de aplazar el primer encuentro oficial Gobierno-ETA

Representantes del Partido Socialista de Euskadi (PSE) y dirigentes de la ilegalizada Batasuna mantuvieron durante el pasado martes discretos e intensos contactos para reconducir el llamado proceso de paz, fuertemente sacudido por la noticia aparecida el pasado lunes en las páginas del diario abertzale Gara en la que se aseguraba que ETA y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero habían adquirido supuestamente diversos compromisos antes del anuncio de la tregua.

Dichas conversaciones, según fuentes conocedoras de las mimas consultadas por El Confidencial, desembocaron finalmente en la mañana de ayer en las declaraciones que el líder de la ilegalizada formación, Arnaldo Otegi, hizo a una radio vasca, en la que, con un lenguaje muy comedido, desmentía sutilmente -se limitó a decir que “no le constaba”- la veracidad de dicha información.

En dichos contactos, siempre según las fuentes consultadas por este diario, los interlocutores socialistas vascos blandieron ante Otegi la amenaza de que Moncloa aplazaría sine die el anunciado primer encuentro oficial entre representantes del Ejecutivo de Rodríguez Zapatero y miembros de ETA -anunciado para este mismo mes- si no había una rectificación pública. El líder abertzale accedió finalmente a la petición.

No obstante, las fuentes consultadas insisten que la crisis originada en el proceso de paz por la noticia del diario Gara no está cerrada del todo. De hecho, aseguran que en los próximos días se mantendrán con la máxima discreción nuevos contactos con representantes de la izquierda abertzale para conseguir que el proceso de paz vuelva a discurrir a “velocidad de crucero”.

Tensiones internas en Batasuna

Sin embargo, restan importancia a las declaraciones que el pasado sábado, sólo 48 horas después de la primera reunión oficial entre el PSE y Batasuna, hacia Joseba Permach -y que ayer fueron ratificadas por el propio Otegi en su entrevista radiofónica-. En ellas aseguraba que la izquierda abertzale renunciaba a iniciar el proceso de legalización de una nueva formación y exigía la derogación de la Ley de Partidos.

Estas fuentes aseguran que son mensajes de “consumo interno” para tranquilizar a unas bases, las de la izquierda abertzale, que consideran que sus dirigentes no están contando con ellas para tomar decisiones de calado como es el apostar por unas nuevas siglas. “Los contactos están blindados a este tipo de declaraciones”, aseguran personas conocedoras de dichas conservaciones.

Varios políticos vascos consultados por este diario aseguran tener constancia de que en el seno de Batasuna se registra en los últimos días un intenso debate sobre los pasos a seguir en el proceso de paz. “Muchos militantes están molestos porque creen que sus dirigentes les han prometido más de lo que ahora ven que pueden conseguir”, apunta un diputado nacionalista del Parlamento de Vitoria.

Estatutos casi listos

A pesar de lo dicho por Permach y Otegi, en el PSE siguen convencidos de que la izquierda abertzale ya ha decidido dar el paso para crear un nuevo partido, aunque creen que no harán pública su intención hasta el próximo mes de agosto para, finalmente, presentar la solicitud en el Registro del Ministerio del Interior en septiembre. “Saben que hacer de nuevo legal a Batasuna es jurídicamente imposible”.

Representantes del Partido Socialista de Euskadi (PSE) y dirigentes de la ilegalizada Batasuna mantuvieron durante el pasado martes discretos e intensos contactos para reconducir el llamado proceso de paz, fuertemente sacudido por la noticia aparecida el pasado lunes en las páginas del diario abertzale Gara en la que se aseguraba que ETA y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero habían adquirido supuestamente diversos compromisos antes del anuncio de la tregua.