El Gobierno responde a los embates de El Mundo y la COPE: “Hasta aquí hemos llegado”

La frase es textual, “hasta aquí hemos llegado”. Proviene de fuentes gubernamentales, que ayer reconocían a este diario una decisión del Ejecutivo: Se acabó el aguantar los embates de El Mundo, COPE y la dirección del PP y de sembrar dudas sobre las investigaciones policiales; ahora, se contestará a los ataques.

La gota que ha “colmado el vaso de la paciencia” del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, sostienen las mismas fuentes, ha sido la interpelación urgente presentada por el PP en el pleno del Congreso del pasado miércoles “sobre el esclarecimiento de la verdad de los atentados del 11-M… Dos años y medio más tarde de la masacre”.

El interpelado fue el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. Todo apunta a que desde su departamento partió, presuntamente, la filtración a El País de la transcripción de una conversación grabada en la cárcel al ex minero que vendió los explosivos de la masacre, José Emilio Suárez Trashorras, en la que dice a sus padres: “Mientras El Mundo pague, si yo estoy fuera, les cuento la Guerra Civil española”. El periódico aludido ha desmentido que haya pagado por las revelaciones de este procesado.

Rubalcaba es descrito por amigos y enemigos como un avezado político, muñidor de pactos y especialista en agip-prop (agitación y propaganda) y en sembrar tinta de calamar para desviar la atención. La supuesta filtración desde su departamento llega en plena reanudación del cuestionamiento de la autoría del 11-M, pero también cuando el proceso de diálogo del Gobierno con ETA atraviesa por un delicado momento. Fuentes gubernamentales explican que el Ejecutivo no esperaba que la estrategia del PP para el nuevo ciclo político arrancara con el 11-M. De ahí que se haya dado la orden de contestar a los embates de los ‘populares’.

Artillería contra Acebes

Entre la artillería gubernamental preparada figura el identificar ante la opinión pública a Ángel Acebes, secretario general del PP, como el ministro del Interior durante cuya gestión se llevó a cabo las investigaciones de los atentados de 2004. “Hemos aguantado dos años y medio. Ya basta de señalar a policías y guardias civiles como conspiradores, asesinos y manipuladores de pruebas”, explican fuentes del Ejecutivo.

El argumento contra Acebes se centra en que las primeras 48 horas después de un atentado son críticas en una investigación policial, como también lo son los primeros quince días. Y resulta que Acebes dirigió Interior desde el 11-M hasta el 14 de abril, fecha en la que el PSOE asumió el Gobierno. Cuando Zapatero llegó al poder, la investigación del caso ya había pasado al ámbito judicial, añaden las mismas fuentes.

Otra de las decisiones se centra en que el Ejecutivo “responderá con contundencia” cada vez que los populares lleven el 11-M al Parlamento. Y también se prepara como argumentario que fue el Gobierno de José María Aznar el que ascendió a los cargos policiales responsables posteriores de la investigación de la masacre. En el PSOE achacan al “nerviosismo” de dirigentes del PP el que hayan centrado su oposición en el 11-M, debido a que la Audiencia Nacional está a punto de fijar la fecha para el inicio del juicio sobre los atentados.

Presión de la Policía