UGT rehúsa ahora apoyar un documento sindical a favor del diálogo con ETA que habla de autodeterminación

El documento que elaboraban desde hace meses los sindicatos vascos y navarros de apoyo al proceso de paz no verá la luz. Al menos, a medio plazo. Esa es la impresión recogida por El Confidencial en diferentes fuentes políticas y sindicales consultadas, las cuales coinciden en señalar como causas del fracaso el cambio de actitud de la federación vasca de UGT -que en un primer momento se habían mostrado dispuesto a respaldarlo- y la oposición frontal de sus hermanos de Navarra a suscribir cualquier texto con el sindicato abertzale LAB, promotor de la idea.

La iniciativa sindical -que había recibido el respaldo implícito del propio José Luis Rodríguez Zapatero cuando anunció en junio, en los pasillos del Congreso, el inicio del diálogo con ETA- incluía en su borrador una polémica alusión a la autodeterminación, al recoger “el derecho de las ciudadanas y ciudadanos de Araba, Gipuzkoa, Bizkaia y Nafarroa a ser consultados sobre el actual o futuro status jurídico-político y a que se respete su voluntad” (ver borrador adjunto).

UGT-Euskadi ha pospuesto en varias ocasiones la firma del documento. En febrero, y después de que su general, Dámaso Casado, mantuviese una reunión pública con el máximo dirigente de LAB, Rafael Díez Usabiaga, los ugetistas vascos pusieron como condición la necesidad de esperar a que ETA anunciara la tregua, que ya entonces se consideraba inminente. El pasado mes de julio, y ante los nuevos requerimiento del sindicato abertzale, la central socialista pidió de nuevo tiempo. En esta ocasión reclamó esperar a después del verano para que se “enfriase” la situación política.

UGT: Sin comentarios

Sin embargo, los meses han seguido pasando y UGT no ha dado finalmente su apoyo público al polémico documento. Dámaso Casado, en una reciente entrevista en Euskal Telebista, acusaba a LAB de dicho retraso. El Confidencial ha intentado en numerosas ocasiones contactar con representantes del sindicato socialista y con el propio secretario general para que concretara dichas afirmaciones, quienes en todo momento han rehuido las preguntas de este diario. No obstante, fuentes del PSE han reconocido a este diario que el documento “nunca nos ha terminado de gustar”.

Por su parte, LAB acusa abiertamente a UGT del fracaso de la iniciativa, que desde hace meses cuenta con el apoyo del sindicato nacionalista ELA y de CCOO de Navarra y el País Vasco. “Se pretendía dar un respaldo al proceso de paz desde el mundo sindical, pero a este paso va a perder todo su sentido”, reconoce con cierto desencanto un portavoz de la central abertzale. Según éste, el gran escollo de la propuesta ha sido siempre la federación navarra de UGT. “No han querido reunirse con nosotros, a pesar de que se lo hemos propuesto en numerosas ocasiones. Ni siquiera la reciente elección de una nueva dirección ha cambiado la situación”, añaden, para recordar que “sin el apoyo de este sindicato en esta comunidad autónoma el texto no tiene ningún sentido”.

Polémico contenido

El borrador del documento se inicia con una declaración de intenciones de las organizaciones sindicales, donde se dice que el texto pretende ayudar al “inicio, desarrollo y culminación” del proceso de paz. El texto, tras manifestar su convencimiento de que su iniciativa está “recogiendo la voluntad inmensamente mayoritaria de las trabajadoras y los trabajadores de Araba, Gipuzkoa, Bizkaia y Nafarroa”, reconoce la existencia de diferencias entre los sindicatos para, a continuación, enumerar los cinco puntos sobre los que han llegado supuestamente a un acuerdo.