Mas se ha visto en secreto al menos cuatro veces con Montilla en 2006

Cataluña vive una fiebre de reuniones secretas en el ecuador de la campaña electoral que culminará con las elecciones autonómicas del próximo 1 de noviembre. Hasta el momento, se han dejado conocer con cuentagotas las reuniones que diferentes candidatos habían mantenido en secreto con sus rivales políticos: el líder de Convergencia i Unió (CiU), Artur Mas, con el de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluís Carod-Rovira, hace escasas semanas; Artur Mas con el presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, en el 2002, en el Coto de Doñana; o Artur Mas con el presidente y candidato del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Josep Montilla, en junio pasado.

Pero éstos son sólo algunos de los discretos encuentros que los dirigentes políticos han tenido entre ellos. Fuentes de toda solvencia han confirmado a El Confidencial que Mas se ha visto al menos cuatro veces con Montilla en lo que va de año, desde que el 21 de enero pactase en Moncloa el Estatuto catalán con el mismísimo presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. “Desde esa fecha, los contactos con los socialistas se articularon a través de Montilla. En ocasiones, el entonces ministro actuaba como correa de transmisión del presidente del Gobierno, pero otras veces era indispensable hablar con él de los asuntos de Cataluña porque aquí nadie te resolvía nada y había temas que solamente podía responder alguien con autoridad en el PSC”, señalaron a El Confidencial fuentes de CiU.

Aunque la última reunión que Artur Mas y Montilla mantuvieron fue la semana posterior al referéndum del Estatut, entre enero y mayo hablaron al menos en tres ocasiones más, sin la presencia de medios de comunicación y sin que lo supiese apenas nadie. Un dirigente convergente muy cercano a Mas subraya que él incluso se enteró de alguna de estas reuniones a posteriori. Los encuentros se realizaron para tratar temas muy concretos: desde el referéndum del Estatuto hasta la posibilidad de adelantar elecciones o la situación del Gobierno catalán.

Actividad incesante

Uno de los que más actividad ha desplegado durante los últimos meses ha sido, precisamente, Josep Montilla. El líder socialista se vio varias veces no sólo con Artur Mas, sino con el compañero de filas de éste, Josep Antoni Duran i Lleida, con el líder de Iniciativa per Catalunya-Verds (ICV), Joan Saura, y con los dirigentes republicanos Carod-Rovira y Joan Puigcercós. El tema que trató con los convergentes, según fuentes socialistas, fue “la estrategia que deberían llevar los dos partidos en relación con el Estatutt y cómo afrontar la campaña”, aunque en alguna ocasión se tocaron otros temas tangencialmente.

Las mismas fuentes aseguran que la reunión celebrada en junio, tras la celebración del referéndum se llevó a cabo “a petición de Mas, ya que estaba preocupado porque no sabía cuándo se iban a convocar elecciones. A petición también de Mas, el encuentro tuvo lugar en el reservado del restaurante de un hotel muy céntrico de Barcelona. En aquel momento, Montilla aún no había sido proclamado candidato, pero que quede claro que todas las reuniones fueron de trabajo y no entre amigos o de fin de semana en Doñana, como dijo Rajoy de su encuentro con Mas”.

Miedo al ‘día después’