Rajoy se muestra "estupefacto" ante la escalada de filtraciones

El líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha expresado hoy a los miembros de su partido que está "estupefacto" ante la escalada de filtraciones, desde la que se ha producido en relación a la convocatoria de su reunión con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, antes de que él diera su consentimiento, hasta la filtración de los contactos con ETA y, finalmente, por la rueda de prensa que hoy ha ofrecido el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, según fuentes internas del PP.

En la dirección del Partido Popular también se ha detectado indignación y malestar profundo a cuenta de la reunión entre enviados del Gobierno y de ETA. La cúpula del PP entiende que Zapatero ha “incumplido” la resolución del Congreso porque el encuentro con la banda terrorista conocido hoy se ha producido en un entorno de violencia. El enfado se centra, además, en que no se ha informado a Rajoy de este paso, cuando ha aceptado a ciegas un encuentro con el presidente para el próximo viernes.

En la cúpula del PP crece una convicción: se acusa al Gobierno socialista de haber creado “deliberadamente un clima artificial de pesimismo para que esta reunión con ETA sea aceptable por la opinión pública. Los mensajes que emitía el Ejecutivo y el PSOE en los últimos días se han centrado en dar a entender que el proceso corría el riesgo de irse al garete con el objetivo de que la sociedad acoja ahora como un alivio este anuncio” del encuentro con ETA que el entorno de Rubalcaba califica de “contactos exploratorios”.

"Desconcertante" y "escarmiento". Esas son las palabras más repetidas por varios líderes populares consultados por este diario. Todos ellos coinciden en que el Gobierno es "inconsecuente" al haberse reunido con la banda terrorista, ya que había advertido de que habría “consecuencias”, tras el reciente robo de 350 armas cortas por parte de ETA en Francia. “Todos entendimos que tales consecuencias implicarían la paralización del proceso. Ahora se ve que supone reunirse con ETA”.

El PP centrará sus críticas a Zapatero en este supuesto incumplimiento de su palabra y de la resolución del Congreso, con el fin de que cale en la opinión pública el mensaje de que el presidente “engaña” a la sociedad, en lugar de que ésta acepte sin más un encuentro con los terroristas.

Rajoy irá a Moncloa

El mayor incumplimiento reside, según los populares, en que la resolución del Congreso de mayo de 2005 autoriza al Ejecutivo a reunirse con ETA “siempre que se den las condiciones adecuadas para un final dialogado de la violencia”. Estas son: “clara voluntad de poner fin a las mismas” y “actitudes inequívocas que puedan conducir a esta convicción”. Y, a juicio del PP, ni la violencia callejera, ni las extorsiones, ni los robos de armas ni, en general, la actividad de ETA en Francia apuntan a esa convicción.

Al mismo tiempo, descartan la posibilidad de que Rajoy decida no acudir a la reunión prevista para mañana con Zapatero. Se trata de una cuestión institucional. Aunque aún no se ha decidido si hará declaraciones al término del encuentro en La Moncloa o, bien, en la propia sede de Génova.