El Congreso escenifica un nuevo enfrentamiento PSOE-PP a cuenta de las nuevas reformas estatutarias

El Congreso de los Diputados atraviesa hoy por el ecuador de las reformas estatutarias emprendidas por José Luis Rodríguez Zapatero, con un debate en el que decidirá si las Cortes tramitan el Estatuto de Canarias. Tal y como empezó el proceso con el de Cataluña, esta reforma cuenta con la división entre los dos grandes partidos, PSOE y PP.

Los socialistas votarán esta tarde a favor de la admisión a trámite del Estatuto canario, aunque tienen la intención de reformarlo en las Cortes Generales, tal y como actuó respecto al de Cataluña y al fallido Plan Ibarretxe. Mientras, los populares se opondrán a su admisión a trámite al entender que rebasa los límites de la Constitución pero se muestran favorables a modificarlo luego si el PSOE se acerca a sus posiciones.

El debate de la reforma canaria ha comenzado a las 13:00 horas con tres ejes polémicos: la definición del archipiélago y de su territorio y de las competencias que atribuye al Gobierno autónomo. La reforma incluye como ámbito territorial autonómico el mar que conecta a las Islas Canarias entre sí, así como el espacio aéreo correspondiente.

También asume mayores competencias en materia de inmigración –la autorización de los permisos de trabajo, así como su tramitación y resolución-, se reserva la responsabilidad de prisiones –como ocurre en Cataluña- y proclama que el Estado transferirá sus competencias exclusivas suyas a través del artículo 150.2 de la Constitución, algo que fue suprimido de la reforma catalana.

Los socialistas tienen previsto abrir la negociación de la reforma canaria después de las elecciones autonómicas y municipales de mayo, aunque Coalición Canaria exigirá en el debate de hoy que se tramite antes de los comicios con el fin de dejar clara la posición de cada partido. Su candidato y portavoz en el Congreso, Paulino Rivero, ha proclamado que no permitirán que PSOE y PP “hagan trampas” e intenten ganar tiempo para eludir dejar clara su posición durante la campaña electoral, informa Efe.

El PP y el PSOE han alcanzado el consenso en la mayoría de los Estatutos reformados, a excepción del de Cataluña –que el segundo partido ha llevado al Constitucional- y, ahora, en el caso canario, donde es posible un futuro pacto a pesar de la confrontación que ambas formaciones exhiben hoy.

Ya se han aprobado los estatutos de Comunidad Valenciana y Cataluña. Mientras, el de Andalucía se someterá a referéndum el próximo 18 de febrero y el de Baleares culmina ahora su tramitación en el Senado. Quedan por entrar en las Cortes los estatutos de Castilla-La Mancha –está a punto de ser entregado en el Congreso-; Castilla y León –hay consenso entre los dos partidos mayoritarios, aunque continúa su redacción en el parlamento autónomo- y Galicia, que ha sido aparcado por la falta de acuerdo en la definición de la autonomía como nación.

Acuerdo total para Aragón

Anoche, PSOE, PP, IU y el PAR, cerraron la reforma del Estatuto de Aragón. El día 14 se constituirá la ponencia sobre esta reforma en la Comisión Constitucional y, tras dos semanas de trabajo, el dictamen final será elevado al Pleno del Congreso, posiblemente en la sesión del jueves 15 de marzo. Tras su aprobación, la reforma aragonesa será remitido al Senado y, si no hay modificaciones allí, será aprobada definitivamente. El objetivo es que entre en vigor ante de las elecciones de mayo.

El consenso alcanzado ayer solucionó los tres escollos que había en materia del agua (la disposición adicional quinta y los artículos 19.3 y 72), así como algunas correcciones en materia de financiación y de competencias. Respecto al agua, se sitúa en 6.550 hectómetro cúbicos la reserva hídrica de Aragón, algo en lo que está de acuerdo el PP al entender que forma parte de la legislación del Estado y es compatible con la planificación general de este bien escaso.