El ministro noruego de Asuntos Exteriores asistió a los dos encuentros en Oslo entre el Gobierno y ETA

El papel del Gobierno laborista de Noruega en las negociaciones entre el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y ETA no fue sólo el de simple facilitador del escenario para que representantes de ambas partes celebraran, al menos, dos encuentros secretos, uno de ellos antes del anuncio del “alto el fuego permanente” del 22 marzo. Su apuesta por el frustrado proceso de paz fue más allá y llevó a uno de sus integrantes, el ministro de Asuntos Exteriores, Jonas Gahr Stoere, a estar presente al inicio de ambas reuniones, celebradas en una localidad de los alrededores de Oslo.

Así lo han confirmado a El Confidencial fuentes conocedoras del desarrollo de las negociaciones con la banda armada, que detallan que Jonas Gahr Stoere saludó a los participantes -entre los que se encontraba el número uno de ETA, José Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, Josu Ternera, y el presidente del PSE, Jesús Eguiguren- y les ofreció la colaboración de su Gobierno para solventar cualquier problema que surgiera durante los encuentros. A dichas reuniones también asistieron dos miembros del Centro Henri Dunant para el Diálogo Humanitario, la ONG suiza que ha realizado labores de mediación..

Las citas en las que estuvo presente el ministro noruego tuvieron lugar en noviembre de 2005 y en la segunda quincena de julio de 2006. En la primera de ellas -que se celebró después de que Gobierno y ETA hubieran mantenido el verano anterior dos encuentros en Ginebra, en la sede del Centro Henri Dunant- sirvió para fijar el alcance de la tregua que ETA anunciaría meses después. La segunda, con el alto el fuego ya en marcha y tras la declaración institucional de Rodríguez Zapatero en el Congreso de los Diputados, fue de ‘carácter técnico’ (ver noticia del pasado 18 de septiembre) para ultimar detalles sobre la que debía ser primera reunión formal entre ambas partes.

El ‘pacificador’

El Confidencial, a través de la Embajada de Noruega en España, ha intentado recoger la versión del ministro de Asuntos Exteriores o de un portavoz autorizado de su departamento sobre su presencia en las reuniones entre el Gobierno y ETA, pero al cierre de estas líneas no había recibido contestación alguna. Jonas Gahr Stoere, de 46 años de edad, se incorporó al gabinete laborista del primer ministro Jens Stoltenberg en octubre de 2005, un mes antes del primer encuentro entre emisarios de Rodríguez Zapatero y miembros de la banda en Oslo.

Su nombramiento tuvo como objetivo reforzar el papel de su país como mediador en diversos procesos de paz. Para ello, una de las primeras medidas que tomó al acceder a la cartera fue crear en su departamento una sección especial llamada ‘Paz y Reconciliación’. La segunda fue la retirada del apoyo noruego a la lista de organizaciones terroristas de la UE en la que están incluidas ETA y Batasuna. El país escandinavo justificó entonces esta decisión, precisamente, por su papel de facilitador en un proceso de paz que no quiso especificar.