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ERC quiere forzar un referéndum de autodeterminación a través de una ley creada por el Parlamento catalán
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ERC quiere forzar un referéndum de autodeterminación a través de una ley creada por el Parlamento catalán

“El Tribunal Constitucional se habría de inhibir por el principio de improcedencia de juzgar si todo un pueblo se ha equivocado, pero también por todos los

Foto: ERC quiere forzar un referéndum de autodeterminación a través de una ley creada por el Parlamento catalán
ERC quiere forzar un referéndum de autodeterminación a través de una ley creada por el Parlamento catalán

“El Tribunal Constitucional se habría de inhibir por el principio de improcedencia de juzgar si todo un pueblo se ha equivocado, pero también por todos los requisitos y filtros que ha tenido que pasar el Estatuto durante su tramitación, por las circunstancias que rodean el diferente tratamiento a las peticiones de recusación de los magistrados, por las opiniones manifiestamente hostiles al Estatuto expresadas por algunos de sus componentes y por la contingente naturaleza de la correlación de fuerzas internas entre los magistrados.

Así reza textualmente el punto número 7 de una dura resolución que el pasado sábado aprobó la dirección de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Detrás de esta radicalización aparente de los independentistas catalanes se encuentran no sólo los problemas internos (un sector de Esquerra, con el ex consejero Joan Carretero a la cabeza, pugna por posturas más soberanistas), sino un contexto de precampaña electoral y la necesidad de marcar distancias con Convergència i Unió (CiU), empeñada los últimos días en lanzar guiños a los republicanos y en criticar a ERC, de quien dice que apoya el recorte del Estatuto.

La resolución de la dirección concluía que “vistos los acontecimientos y la ofensiva para hacer un segundo recorte al Estatuto, la vía autonomista está agotada y es preciso impulsar y apoyar las iniciativas cívicas y sociales que comporten más poder de decisión para Cataluña y hacer efectivo el derecho a celebrar un plebiscito de independencia”.

'President' Artur Mas

“Lo que se ha querido decir -señala a El Confidencial una fuente de la dirección de ERC- es que la vía federalista y la vía autonomista no son viables y sólo nos queda la vía soberanista. Hemos de empezar a pensar en un referéndum sobre la autodeterminación”. En este sentido, el vicesecretario general de Coordinación Interna, Xavier Vendrell, aprovechó un acto de las juventudes del partido realizado ayer para lanzar un aviso a navegantes declarando que Esquerra estaría dispuesta a cambiar de socio si el nuevo (en clara referencia al líder de CiU, Artur Mas) estuviese dispuesto a convocar un referéndum sobre la autodeterminación.

“Nosotros sólo daremos apoyo a quien se comprometa a convocar el referéndum, independientemente del dictamen que pueda hacer en un futuro más o menos cercano el Tribunal Constitucional -afirmaron a El Confidencial fuentes de la formación independentista-. Ahora tenemos la oportunidad de avanzar y no queremos dejarla escapar. Esquerra trabajará desde Madrid y desde Cataluña para tener ese derecho y pedimos a CiU que nos ayude si es un partido nacionalista como dice”.

Sin embargo, existe un problema: si bien el primer texto del Estatuto preveía la competencia de convocar referéndum por parte del Gobierno autonómico, esta competencia ya ha sido eliminada y, salga el texto que salga del Constitucional, no sería posible realizarlo con la legislación en la mano. El propio Vendrell apuntó que, si la legislación española no lo permite, su formación quiere acogerse “a la jurisprudencia europea e internacional, que reconoce el derecho a la autodeterminación”.

Una Ley de Referéndums

Otras fuentes, no obstante, apuntan a diferentes vías jurídicas que Esquerra estudia en estos momentos. “Podríamos plantear iniciativas en el Congreso de los Diputados para que se nos reconociese ese derecho. Pero no es la única manera: se podría buscar un consenso en el Parlamento catalán y elaborar una Ley de Referendums. De todos modos, está por ver todo esto, porque apenas acabamos de empezar a estudiar la cuestión”, señala una fuente de la dirección de ERC.

“El Tribunal Constitucional se habría de inhibir por el principio de improcedencia de juzgar si todo un pueblo se ha equivocado, pero también por todos los requisitos y filtros que ha tenido que pasar el Estatuto durante su tramitación, por las circunstancias que rodean el diferente tratamiento a las peticiones de recusación de los magistrados, por las opiniones manifiestamente hostiles al Estatuto expresadas por algunos de sus componentes y por la contingente naturaleza de la correlación de fuerzas internas entre los magistrados.