Batasuna prepara un argumentario para sus candidatos en el que acusa al PNV de corrupción

La izquierda abertzale no ha esperado a saber si finalmente estará como Abertzale Sozialisten Batasuna (ASB) en los comicios de mayo o tendrá que echar mano del plan B de las agrupaciones de electores para intentar concurrir a los mismos. Sus estrategas electorales han elaborado ya las líneas maestras de su campaña en las que apuntan al PNV como su principal rival en las urnas y a la corrupción como su principal argumento para atacar al partido de Josu Jon Imaz, según se desprende de un documento interno de Batasuna al que ha tenido acceso El Confidencial.

El texto, titulado PNV: dos sensibilidades, un único modelo, fue elaborado antes de que se presentase en el registro de partidos la siglas de ASB. En él, la izquierda abertzale pone de manifiesto que para apoyar dichas acusaciones piensa utilizar el caso de Jon Jauregui, el candidato del partido nacionalista a diputado general de Guipúzcoa que tuvo que renunciar a la carrera electoral el 2 de marzo tras aflorar las acusaciones de que no declaró al Fisco dos de sus seis viviendas. “Este suceso ha dejado al descubierto la trayectoria del PNV durante los últimos treinta años; es decir, que la gestión de las diversas instituciones ha sido utilizada para producir dinero y para cebar los negocios del partido”, afirman los autores del documento.

“No se trata de un caso aislado (…). Se pueden encontrar ejemplos en cada municipio”, insiste el texto antes de cargar también contra los otros dos partidos que sustentan el tripartito de Juan José Ibarretxe, Ezker Batua y EA, a los que acusa de “poner un celofán progresista a la política neoliberal” del lehendakari. “¿Qué modelo alternativo ofrecen EB o EA, que aparte de realizar algunos sorteos públicos no reconocen los problemas que hay en el ámbito de la vivienda?”, apostilla.

Destacar las discrepancias internas del PNV

La renuncia de Jon Jáuregui también ha servido a los estrategas de la ilegalizada Batasuna para resaltar las supuestas discrepancias en el seno del PNV que ha destapado el caso -“dentro de ese enfrentamiento interno se han podido ver jugadas extremadamente reprobables durante las últimas semanas”-, aunque insisten que ese no es el mensaje más importante a trasladar al electorado: “Pueden existir puntos de vista diferentes en cuanto al sentido de la nación, pero en lo que respecta al negocio, el PNV se muestra como un todo unificado. Eso es lo que resulta escandaloso para la izquierda abertzale”.

Frente a esto, los autores del documento insisten en que la ilegalizada formación debe lanzar la idea de que ellos son la única alternativa para hacer frente a esa corrupción. “La izquierda abertzale debe trabajar enormemente en las instituciones para dar la vuelta al régimen ejecutado por el PNV durante tantos años”, puede leerse en el documento, en el que ha continuación recalca que para ello “no parte de cero (…), ha gestionado ya decenas de ayuntamientos y en todos ellos ha trabajado con sinceridad y ha desarrollado políticas que responde a intereses populares”. “Los próximos meses y las próximas elecciones nos ofrecen una ocasión excepcional para demostrarlo”, concluyen.

Contra Imaz

No es la primera vez que la ilegalizada formación y ETA convierten al partido nacionalista en el principal objetivo de sus ataques. De hecho, en el comunicado del pasado mes de enero en el que la banda armada reconocía la autoría del atentado de Barajas, los etarras se referían a él con la significativa expresión “el PNV de Imaz” y le acusaba de haber actuado durante la tregua “contra la izquierda abertzale alimentando la línea del Gobierno español”. Desde entonces, los dirigentes de Batasuna tampoco han ahorrado descalificaciones hacia los nacionalistas moderados.