Todos los partidos, salvo el PSOE, apoyan al PP para que el Congreso elija al presidente de la CNMV

El presidente del PP, Mariano Rajoy, estaba ayer contento: ya no está solo, porque ha fracasado el intento de aislarlos con el que comenzó la era de José Luis Rodríguez Zapatero. El giro significativo se produjo ayer mismo. Todos los partidos políticos, salvo el PSOE, aprobaron una iniciativa popular en el Congreso, suavizada por IU, por la que se insta al Gobierno a cambiar el sistema de elección del presidente y del vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

De ser elegidos por el Gobierno, estos dos altos cargos serán designados por el Parlamento por una mayoría cualificada aún sin concretar. El Gobierno tiene de plazo todo este año para elaborar una Ley que cambie el sistema de designación. La iniciativa aprobada incluye también que el presidente y el vicepresidente de la CNMV sean controlados por la Comisión responsable del Parlamento, y que ambos podrán ser cesados –también por mayoría cualificada del Congreso- en caso de incumplimiento grave de sus obligaciones, incapacidad permanente para el ejercicio de su función, incompatibilidad sobrevenida o condena por delito doloso.

Los de IU desconocían que los populares iban a aceptar su enmienda de sustitución. Así, se pasó de la propuesta inicial del PP de modelo de elección parlamentaria a través de una mayoría de tres quintos del Congreso (210 diputados) a otra de "mayoría cualificada", sin determinar el tipo, y, al mismo tiempo, otorgándose a la Cámara Baja la potestad de cesar a los dos principales responsables de la CNMV.

Durante el debate, los grupos de la oposición dijeron estar de acuerdo con el "espíritu" de la proposición no de Ley del PP, pero adelantaron que no la apoyarían si se mantenía la mayoría cualifica de tres quintos, por entender que dejaría fuera de los futuros acuerdos a los grupos minoritarios. La respuesta del PP sorprendió: su portavoz, Miguel Arias Cañete, aceptó la integridad de la enmienda de IU. El resultado: el PSOE se quedó sólo, con 140 votos en contra, frente a 149 votos a favor de la proposición no de ley del PP modificada (los de PP, CiU, ERC, ONV, IU, Grupo Mixto y Coalición Canaria). La ausencia de 23 diputados socialistas –once de ellos del Gobierno- propició el vuelco.

La derrota socialista se produce a escasos 19 días de las elecciones municipales y en plena crisis de credibilidad de la CNMV. Además, uno de los acusados por Manuel Conthe de presionar a este organismo es el candidato socialista a la alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián.

Se trata de la vigésimo séptima derrota socialista en sesión plenaria en el Congreso, y la primera liderada por los populares en colaboración con IU. Se trató de una reedición de la famosa pinza que, en la década de los años 90, protagonizaron Julio Anguita y José María Aznar frente al PSOE en el Gobierno. Aunque, esta vez, los de IU desconocían la operación popular.

El PNV y CiU, futuros aliados

La alegría de Rajoy no se quedó ahí. Porque el presidente del PNV, Josu Jon Imaz, dijo en público lo que ambos reconocen en privado. El dirigente nacionalista no descarta alcanzar algún pacto con el PP si este partido gana las próximas elecciones, aunque reconoce las diferencias “notables” que separan a ambos proyectos. Su reflexión es similar a la que expresó el líder del PP en una entrevista con este diario. Y es fruto de más de una conversación de sobremesa discreta entre ambos líderes, que se llevan bien personalmente. Rajoy respondió a Imaz agradeciendo el gesto.