Anónimos a curas navarros exigiéndoles trabajar por una Euskal Herria independiente

Más de cincuenta sacerdotes navarros han recibido en los últimos días una carta que, en tono imperativo, les exige que trabajen “más activamente por una Euskal Herria libre, soberana e independiente”, al tiempo que se les comunica que “venimos constatando su inhibición y escaso interés en la defensa de la Iglesia Vasca”.

Esa Euskal Herria que personas anónimas demandan en la carta, “no llega con expulsar a las fuerzas represivas. Es necesario hacer el vacío a toda la derecha fascista y a algunos elementos del PSOE”. Los autores de la misiva asumen que es posible que los sacerdotes rechacen actuar de esta forma. Si fuera así, estarían “dispuestos a comprenderle con tal de que su trabajo” sea positivo en “otras actividades: nombres vascos a los que se bautizan, promover la ikastola, el folklore vascos, etc”.

El anónimo termina pidiendo el voto “para H.B. ¡Qué más da cómo nos llamen los fascistas…! Será el mejor modo de castigar a los caciques de siempre y a los ‘moros’ de UPN. La grandeza y unidad de Euskal Herria así lo demanda”.

El escrito ha sido remitido por correo a sacerdotes y párrocos de numerosos pueblos, incluidas varias parroquias de Pamplona. Fuentes del arzobispado que dirige Fernando Sebastián calculan que la cifra de los destinatarios supera ya la cincuentena. El anónimo comenzó a llegar la semana pasada, a partir del 16 de mayo.

Los sobres están dirigidos al cura de cada localidad, pero no se detalla su nombre. Los matasellos son distintos, y en los anónimos destinados a los párrocos de pueblo no figura el código postal “pero los carteros lo hacen llegar, por inercia”, sostienen en fuentes de la Diócesis de Pamplona y Tudela.

“Nunca había pasado, jamás se había recibido una comunicación masiva y en tono impositivo”. Así se expresan en fuentes del arzobispado que explican la reacción de los curas que han recibido la carta: “Muchos sacerdotes están curados de espanto y pasan olímpicamente, otros están asustados porque se les involucre en estas cosas políticas. Pero no deja de ser un anónimo, cuyo contenido causa dolor y preocupación”. La Diócesis ha expresado hoy su repulsa por estas cartas que, a su juicio, suponen una coacción que busca amedrentar a los sacerdotes.