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‘Día de la marmota’ en Ciempozuelos
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‘Día de la marmota’ en Ciempozuelos

Pobre Ciempozuelos, tan lejos y tan cerca de Madrid. El municipio de origen agrícola, la puerta de entrada desde Andalucía por la Vega del Jarama, sufre

Foto: ‘Día de la marmota’ en Ciempozuelos
‘Día de la marmota’ en Ciempozuelos

Pobre Ciempozuelos, tan lejos y tan cerca de Madrid. El municipio de origen agrícola, la puerta de entrada desde Andalucía por la Vega del Jarama, sufre un extraño ‘día de la marmota’ en medio de la presión de la megalópolis mesetaria. Porque si, el pasado otoño, el pueblo se hacía famoso cuando se supo que su alcalde estaba implicado en el presunto cobro de la mayor comisión por corrupción urbanística conocida (40 millones de euros), resulta que ahora el ex regidor se presenta a las próximas elecciones, a pesar de estar imputado. Su lista de nuevo cuño se llama Ciudadanos por Ciempozuelos, de abundante presupuesto a la vista de sus lujosos panfletos electorales, a todo color y de papel verjurado.

Pedro Torrejón estuvo tres meses callado. Cuando en octubre saltó el escándalo, el PSOE lo expulsó, dimitió del cargo y colocó al municipio en las portadas nacionales de los periódicos. Silencio. La campaña la estrenó con una carta enviada a los ciempozueleños echando la culpa a los demás del malentendido de aquel viaje a un banco de Andorra, donde abrió una cuenta y depositó una pequeña parte de ese dinero sucio. Falta por saber el destino de 39 millones.

“Ahora se entienden muchas cosas, ahora sabemos que había una trama para impedir que el PP gobernara el pueblo”. María Ángeles Herrera, la candidata de este partido a la alcaldía, se expresa con indignación. Y es que en 1999 los populares tenían mayoría absoluta, pero se les fugaron dos tránsfugas. Una de ellas, la candidata novena que les daba esa mayoría, ha vuelto al mundo de la política. Otro ‘día de la marmota’. Se llama Carmen Arenas y, casualmente, su marido, Francisco Ruiz, es el candidato décimo en la lista del ex alcalde imputado, el de la cuenta andorrana. Las investigaciones del caso apuntan a que la trama investigada tenía negocios desde el remoto año de 1991.

Quizá influya, pero el hecho de que haya tres mujeres candidatas se nota a la hora de hablar de los asuntos del pueblo que les preocupan. Por el consenso. Como cuando explican lo ocurrido con el famoso Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), causa del soborno. Fue aprobado por la Comunidad de Madrid pero está guardado en un cajón; a ver quién se atreve a publicarlo en el Boletín Oficial en plenas elecciones después de todo lo ocurrido. Las candidatas del PP y del PSOE coinciden: es un buen plan, fue aprobado por unanimidad y Ciempozuelos lo necesita para seguir creciendo. Herrera remacha: “Ni se nos pasó por la cabeza que esto estuviera ocurriendo bajo cuerda”.

La más joven de los que se presentan es Gema Fornell, que concurre por IU y está asombrada por la participación de Torrejón y con que haya gente que quiera ir en su lista; lo siente como una tomadura de pelo. Mientras que el otro hombre que se participa en la carrera es Javier de Oro, del Partido Independiente de Ciempozuelos, una escisión del PP que se ha convertido en fiel aliado de los socialistas.

Susana León fue nombrada alcaldesa el 30 de octubre pasado y es la candidata por el PSOE. Siente mucha pena por lo ocurrido, pero “el pueblo tiene que seguir adelante. Lo único que pido es que todo el mundo vaya a las urnas para superar esta situación tan atípica, que todos expresen su opinión y voten en libertad. Mi partido asumirá su parte de responsabilidad”. Tampoco entiende que Torrejón se presente a las elecciones estando imputado, y por no entender no alcanza a comprender el hecho de que un alcalde abra una cuenta en Andorra. “Debería concentrarse en su defensa y, si el juez le absuelve, plantearse su vuelta a la vida pública”. Lo que son las cosas: ese candidato podría convertirse en la llave del futuro gobierno municipal, ante un previsible empate técnico entre PP y PSOE.

Pobre Ciempozuelos, tan lejos y tan cerca de Madrid. El municipio de origen agrícola, la puerta de entrada desde Andalucía por la Vega del Jarama, sufre un extraño ‘día de la marmota’ en medio de la presión de la megalópolis mesetaria. Porque si, el pasado otoño, el pueblo se hacía famoso cuando se supo que su alcalde estaba implicado en el presunto cobro de la mayor comisión por corrupción urbanística conocida (40 millones de euros), resulta que ahora el ex regidor se presenta a las próximas elecciones, a pesar de estar imputado. Su lista de nuevo cuño se llama Ciudadanos por Ciempozuelos, de abundante presupuesto a la vista de sus lujosos panfletos electorales, a todo color y de papel verjurado.