Un vocal de la ‘polémica’ Hacienda de Guipúzcoa tiene intereses con socios de Roca y Corulla

Marbella, Madrid, Murcia, Espartinas... el caso Malaya está marcando la recta final de la campaña electoral en distintas ciudades españolas sin hacer distingos entre PP y PSOE. A dos días para las elecciones, la sombra de Roca planea también sobre el País Vasco y el PNV.

Sabido es que a los empresarios vascos Marbella les apasiona Marbella. No en vano, el resort marbellí Guadalmina -donde Aznar posee su dúplex- es conocido como ‘el Neguri andaluz’. Lo que no es tan sabido es que a Roca también le apasiona el País Vasco. Concretamente, la oficina de la Hacienda de Guipúzcoa, uno de cuyos vocales compartía intereses con los ‘socios vascos’ del ex asesor de Urbanismo y de su presunta testaferro, Montserrat Corulla, ex administradora del madrileño Palacio de Villagonzalo y representante del Beti-Jai.

El miembro de la Hacienda de Guipúzcoa es Jesús María Jiménez Oruna, designado vocal en representación del Departamento de Hacienda y Finanzas el 11 de febrero de 1998. Casualmente, Oruna era el administrador único de Promonagüeles, SL, sociedad vinculada a los hermanos imputados en el caso Malaya, González Sánchez-Dalp y cuyo domicilio social coincide con el anterior de Proinsa Desarrollo Siglo XXI, SL.

Proinsa es una de las empresas que ha acogido en su seno a los miembros de la llamada ‘trama vasca’: Agustín Aguirre Iguíniz, Luis Maya Galárraga y Javier Arteche Tarascón. Buenos conocidos de Roca y Corulla, aunque el juez Torres aún no les ha imputado en el caso Malaya.

Extraños casos de evasión fiscal

Estos días, la prensa vasca se extiende con los casos de corrupción de la Hacienda Foral de Irún –la segunda mayor población de Guipúzcoa-, donde han saltado extraños casos de evasión fiscal, como publicó este diario el pasado lunes, 21 de mayo. Dicha información recordaba que el candidato peneuvista a presidir la Diputación de Guipúzcoa, Jon Jáuregui, al conocerse su elevado patrimonio no declarado, tuvo que abandonar la candidatura y refugiarse en la vicepresidencia de la Kutxa.

Los ‘amigos vascos’ de Roca salpicaron a la Kutxa de San Sebastián. Maya y Arteche eran socios de la caja de ahorros en dos polémicos proyectos urbanísticos de Murcia: Lo Poyo y La Cerrichera. A consecuencia del escándalo, la Kutxa liquidó su sociedad de inversiones en la región. No hay que olvidar que Corulla utilizaba una Visa Oro financiada por Aguirene (la sociedad de Agustín Aguirre) domiciliada en la Kutxa.