Crecen las críticas a Puras por su pacto con los nacionalistas: "Nos engañó antes y ahora"

Mientras el candidato socialista, Fernando Puras, avanza en el pacto del futuro Gobierno de Navarra con Nafarroa-Bai, sectores de la sociedad de esta comunidad empiezan ya a criticar al socialista por esta negociación. Al parecer, el dirigente del PSN les había transmitido en privado y durante la campaña que no emprendería ningún acuerdo que buscara la anexión con el País Vasco y que no se presentaría a la elección de presidente si resultaba en tercera posición, como así ha ocurrido.

"Nos engañó antes y ahora", sentenció ayer en un artículo el ilustre periodista navarro José Javier Uranga, el ex director del Diario de Navarra que sobrevivió en 1980 a 27 disparos de ETA. En su 'Carta abierta a Fernando Puras' y bajo el pseudónimo de Ollarra, este periodista denuncia que el líder socialista "ha faltado otra vez a su palabra" al pretender ser presidente cuando dijo que no concurriría si el PSN quedaba en tercer lugar. Falta a su palabra "a pesar de su apuesta verbal navarrista, en el fondo la misma que UPN; nos engañó antes y ahora. Ocultó a sus posibles votantes con quién iba a pactar. Si hubiese descubierto sus intenciones, los resultados hubieran cambiado. Algunos de sus votos hubiesen ido a UPN, otros al Bai. Se insinuó en una dirección, pero ahora va en sentido contrario", sentencia Uranga para reclamar a Puras que, si es un hombre de honor, cumpla con su palabra y, "si no puede o no le dejan, le queda una solución: dimitir"https://www.elconfidencial.com/espana/2007-05-31/empresarios-sindicatos-y-prensa-presionan-a-los-socialistas-navarros-para-que-pacten-con-upn_514418/ target=parent>'estatus quo' existente en la comunidad foral desde hace dieciséis años. Hoy, tal posibilidad se ve muy lejana.

Semana clave para el pacto

Queda poco margen para la duda. Todo apunta a que Navarra estará gobernada por el PSN, IU y Na-Bai (la menestra formada por PNV, EA, Aralar y Batzarre), aunque los socialistas sigan con su juego de no descartar un pacto con los conservadores. Este acuerdo es contrario a las instrucciones iniciales de José Luis Rodríguez Zapatero. El secretario general del PSOE cedió al principio a las presiones de los barones y decidió con Puras que el PSN facilitara el gobierno a la lista más votada. Pero la dirección del PSN y la militancia defiende un gobierno de progreso, y así lo han expresado en las reuniones internas.